Informe De Quimica

Introducción

Un laboratorio de química es un lugar especial por muchos motivos. Por una parte los materiales usados son, en general, delicados. No solo el material de vidrio, que como todos sabemos se rompe con facilidad, sino también los instrumentos de precisión. Requieren extremo cuidado en su manejo. Y conocer perfectamente su funcionamiento, para evitar errores que puedan deteriorarlos. Pero además, el laboratorio es un lugar peligros y, es por esto, conveniente tener nociones básicas tanto de manejo de aparatología como de normas de seguridad e higiene para evitar, por un lado deteriorar el material y por otro y más importante, evitar situaciones de riesgo.

Normas generales.

 La química requiere limpieza y un buen químico debe ser un científico limpio y ordenado. Todo el material de laboratorio debe estar en perfecto estado de higiene antes de comenzar a trabajar y debe quedar limpio después de terminar.

 La higiene no solo afecta a los materiales de vidrio y utensilios manuales sino que también al resto de aparatología.

 Si usamos productos químicos corrosivos o capaces de teñir la piel, conviene usar guantes (de goma o látex) y bata manga larga.

 Las personas con el pelo largo deben tener especial cuidado, ya que el cabello pueden entrar en contacto con sustancias químicas sin que nos demos cuenta. Por eso conviene trabajar con el pelo recogido.

 Todo el material debe quedar limpio, ordenado y en perfecto estado tras finalizar el trabajo. Si algún material debiera desecharse o tirarse a la basura, bien por su uso habitual o bien por su deterioro accidental, deben tenerse en cuenta las normas básicas de reciclado.

Materiales y técnicas de laboratorio

Vaso de precipitados:

Es un recipiente de forma cilíndrica, generalmente alargado y con un vocal de pared ligeramente engrosada. Se utiliza para realizar mezclas y disoluciones. Normalmente está fabricado en vidrio, aunque también puede ser de plástico. El plástico es más barato, pero menos resistente a la mayoría de productos químicos y no puede calentarse al fuego. El vidrio suele ser más caro. Existen vasos de precipitados de diversos tamaños y capacidades. Aunque pueden estar graduados, no son un sistema de medición de volúmenes adecuado por la poca precisión de las marcas.

Matraz:

Es un tipo de recipiente que posee una parte ovalada o esférica y un cuello alargado que se abre al exterior. Es el más adecuado para llevar a cabo disoluciones y mezclas (en cantidades pequeñas). Suele ser resistente al calor, son de vidrio y se utiliza para operaciones de mezcla, reacciones quimicas, etc. El vocal estrecho puede ser tapado con un corcho, lo que permite la agitación manual sin que se derrame el líquido del interior. Existen matraces de diferentes tamaños y capacidades.

Matraz Erlenmeyer:

Es un recipiente muy usado en química debido a su versatilidad. Posee un cuello estrecho, lo que le permite ser tapado y al igual que el matraz, su parte inferior está ensanchada, lo que le permite realizar agitaciones manuales y lo hace muy adecuado para llevar a cabo mezclas, disoluciones o reacciones químicas. Existen diferentes capacidades y podemos encontrarlos de plástico o de vidrio. Aunque suelen presentar graduación, no es precisa, por lo que no lo consideraremos un sistema de medición de volúmenes.

Matraz aforado:

Se trata de un matraz que posee, en una zona del cuello, una marca que delimita un volumen determinado. Es utensilio de medición de volumen muy exacto. Pero tiene el inconveniente de que, al poseer solo una marca o aforo, solo nos permite realizar la medición de un solo volumen. Hay matraces aforados para 10ml, para 20ml, para 100ml, etc. También puede ser usado para realización de mezclas, disoluciones o reacciones químicas. Es un tipo de recipiente de precisión especialmente preciso y delicado.

Tubo de ensayo:

Son tubos cilíndricos, de base ovalada y en general escaso volumen. Su función es realizar ensayos. Es decir, en ellos se trabaja con pequeños volúmenes, en general de partes de compuestos o mezclas y con los que queremos realizar algún tipo de prueba química. Pueden ser de vidrio o plástico. Y suelen ser considerado materiales desechables, ya que en muchas ocasiones las pruebas realizadas en ellos los deterioran en ensucian de tal modo que resulta imposible su reciclado o limpieza. Dado que su base no es plana, deben ser colocados en algún soporte (que suelen denominarse gradillas).

Gradillas:

Pueden estar construidas de varios materiales (aluminio, alambre recubierto por resina epoxi, madera o acrílico). Su función principal es la sostener los tubos (de ensayo, de sentrífugas, etc.).

Pinza de madera:

Esta herramienta sirve para sujetar los tubos de ensayos, mientras se calientan o se trabajan con ellos. Son de madera.

Probeta:

Es un recipiente cilíndrico, alargado, de vocal ancho, una base plana y amplia que permite trabajar sin riesgo de que se caiga y un sistema de graduación a lo largo de todo el tubo. Miden volumenes, contenidos y solo se emplea cuando solo se necesita medir un volumen aproximado.

Pipeta:

Consiste en un tubo, generalmente de vidrio aunque también puede ser de plástico, alargado y graduado, con una parte afilada, por la que se toma y se vierte el líquido, y una zona superior abierta que se usa para absorber aire y que el líquido suba por el interior de la pipeta por succión. La pipeta se cierra con el dedo índice y se deja caer el líquido permitiendo la entrada de aire en la pipeta subiendo ligeramente el dedo. Son más exactas que las probetas. Existen pipetas de mucha precisión, que permiten medir volúmenes incluso de menos de 1ml. Se usan para sacar de una botella una cierta cantidad del líquido, vertiendo en otro recipiente la cantidad exacta que necesitamos.

Bureta:

Son tubos largos cilíndricos de vidrio, diámetro uniforme en la porción graduada y cuyo extremo inferior se cierra con una llave de vidrio o teflón (denominada robinete). Se

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