MALTRATO INFANTIL COMO PROBLEMA DE SALUD PÚBLICA: CARACTERISTICAS Y FACTORES DE RIESGO EN NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTES, HOSPITAL DR. LUIS RAZETTI. BARINAS. 2015-2017
alberto becerraEnsayo18 de Febrero de 2020
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BOLETIN ACADÉMICO NÚMERO 15 DEL HOSPITAL DR. LUIS RAZETTI[pic 1]
Compilación de Trabajos Especiales de Grado para Optar al Certificado
de Especialista Noviembre año 2017.
MALTRATO INFANTIL COMO PROBLEMA DE SALUD PÚBLICA: CARACTERISTICAS Y FACTORES DE RIESGO EN NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTES, HOSPITAL DR. LUIS RAZETTI. BARINAS. 2015-2017.
Autora: Marbellys Linares
Tutor: Pedro Medina
Asesor Metodológico: Maribel Villahermosa
Marbellys Linares Residente de tercer año en la Especialidad de Pediatría y Puericultura en el Hospital Dr. Luis Razetti Barinas. Correo Electrónico: marbellyslinares@gmail.com
Pedro Medina Médico Pediatra Adjunto del Pediatría y Puericultura, Hospital Dr. Luis Razetti Barinas. Correo electrónico: pedro_medina@gmail.com
Maribel Villahermosa Lcda. Enfermería. Docente de Metodología de Investigación del Postgrado Asistencial del Hospital Dr. Luis Razetti. Barinas Correo electrónico: marbellí.flor@gmail.com
MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA SALUD
DIRECCION GENERAL DE INVESTIGACION Y EDUCACION
MALTRATO INFANTIL COMO PROBLEMA DE SALUD PÚBLICA: CARACTERISTICAS Y FACTORES DE RIESGO EN NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTES, HOSPITAL DR. LUIS RAZETTI. BARINAS. 2015-2017.
Autor: Marbellys Linares
Tutor: Pedro Medina
Fecha: Noviembre 2017
Resumen
El presente estudio tuvo como Objetivo: Analizar el maltrato infantil como problema de salud pública en relación con sus características, factores de riesgo en niños, niñas y adolescentes, tipo más frecuente y sus consecuencias en el Hospital Dr. Luis Razetti, desde Enero 2.015 a Octubre 2.017. Materiales y Métodos: El estudio se realizó con un método cuantitativo, diseño no experimental, retrospectivo y transversal, la población y muestra fue de 27 niños, niñas y adolescentes, la técnica fue la observación y el instrumento fue la lista de cotejo contentiva de (35) ítems correspondientes a las variables en estudio. Resultados: Los niños maltratados en un 37,04% fueron preescolares, donde el 62,96% son de sexo femenino, procedentes del medio rural en un 51,85%, con nivel de pobreza extrema el 85,19%, hijos de padres con bajo nivel educativo en un 48,15%, en condiciones de hacinamiento el 66,67%, donde el tipo de maltrato mas frecuente fue por desatención en salud 44,44% y un 48,15% con consecuencias psicológicas. Conclusiones: Los niños maltratados fueron por factores de riesgo económico y el maltrato fue con mayores consecuencias en el ámbito psicológico.
Líneas de investigación: Problemas socioculturales que afectan la infancia.
Campo de la Investigación: Maltrato Infantil
Descriptores: Maltrato infantil, problema de salud Pública, factores de riesgo, consecuencias.
Introducción
El acelerado crecimiento de la población humana en la Tierra puede tener varias consecuencias, entre ella el riesgo de vivir en un ambiente rodeado de violencia, situación de la que desafortunadamente no escapan los niños.
Según estudios internacionales revelan que una cuarta parte de todos los adultos manifiestan haber sufrido maltratos físicos de niños, 1 de cada 5 mujeres y 1 de cada 13 hombres declaran haber sufrido abusos sexuales en la infancia, cifras que reporta la Organización Mundial de la Salud (OMS) (2016), siendo considerado este un problema de Salud Pública.1
El maltrato infantil (MI) se define según la OMS (2002) como “los abusos y la desatención de que son objeto los menores de 18 años, e incluye todos los tipos de maltrato físico o psicológico, abuso sexual, desatención, negligencia y explotación comercial o de otro tipo que causen o puedan causar un daño a la salud, desarrollo o dignidad del niño, o poner en peligro su supervivencia, en el contexto de una relación de responsabilidad, confianza o poder”. 2
A pesar de lo antes expuesto, se le ignora o desprecia en los países en vías de desarrollo, e incluso la familia en ocasiones le parece normal, propia de la educación del menor, lo que es un obstáculo para que los padres se declaren como agresores y denuncien el caso.
Santana R. y colaboradores (1998), manifiestan que el maltrato infantil ha llegado a ser un problema que se incrementa en forma alarmante. Aun cuando no se tienen cifras precisas de la magnitud del mismo, se infiere que su presencia es cada vez más evidente, afectando todos los países del mundo y clases sociales.3
Lo más trágico del maltrato infantil es que las afectaciones derivadas de la violencia experimentada, en la primera infancia cobrarán factura a lo largo de la vida de las víctimas, cuyas secuelas siempre estarán presentes, aún 30, 40 ó 50 años más tarde seguirán manifestándose (Solera, C. 2014).4
Por esto es necesario difundir el conocimiento sobre este problema en todos los ámbitos, con la finalidad de prevenirlo, identificarlo e iniciar su abordaje terapéutico temprano, evitando de esta forma las consecuencias y los efectos tan intensos que tiene sobre el ser humano.
Al respecto Manterola, (2012) afirma: “El maltrato a los niños no es un mal de la opulencia ni de la carencia, sino una enfermedad de la sociedad”.5 El MI se ha convertido en un conflicto al que actualmente se enfrentan las diferentes disciplinas implicadas en su abordaje, puesto que no se presenta en forma aislada, sino que involucra una gran variedad de factores biopsicosociales.
Existe una estrecha relación entre los diferentes tipos de maltrato y el desarrollo biopsicosocial del niño, así lo demuestran los análisis realizados, lo que puede traducirse en problemas escolares, tanto en el plano cognitivo como en el de la interacción social, y en alteraciones de la conducta manifestadas por agresión y retraimiento.6
Luntz y colaboradores (2012), refieren que el maltrato infantil se relaciona con el abuso de sustancias tóxicas, delincuencia, criminalidad y suicidios, establecen que existe un desajuste personal y social en estos niños. Teniendo como consecuencia problemas de somatización, ansiedad, hostilidad, miedo, rechazo, depresión y desconfianza.7
Valenzuela y colaboradores, (2013) reflejan en sus investigaciones una mayor frecuencia de problemas psicosomáticos y diversas alteraciones del comportamiento sexual en personas que tienen antecedentes de abuso sexual en la niñez, en tanto que otros autores lo relacionan con trastornos de la personalidad más severos.8
Destaca en este aspecto lo desarrollado a partir del análisis del maltrato fetal y su repercusión en el vínculo afectivo que se establece en el binomio madre-hijo desde la etapa preconceptiva.
El Informe Nacional sobre Violencia y Salud en el año 2014, realizado por la UNICEF, señala que México y Corea del Sur presentan las tasas más altas de muertes por heridas en niños menores de 14 años y ocupa el primer lugar en el rubro de muertes intencionales entre 1 y 14 años provocados por sus padres.9
Asimismo, la Hoja informativa del Programa sobre Mujer, Salud y Desarrollo de la OPS/OMS, cada año, más de 40 millones de niños son víctimas, en el mundo, de diversas formas de maltrato (intrafamiliar, trabajo infrahumano, tráfico, prostitución infanto-juvenil, infanticidio selectivo, entre otras formas).10
Según Lezama (2015), en Venezuela, de acuerdo con el monitoreo hemerográfico realizado por la Organización No Gubernamental (ONG) Centro Comunitario de Aprendizaje (CECODAP), reportan dos de los cuatro estados orientales (Anzoátegui y Monagas) con más violencia familiar contra niños, niñas y adolescentes (NNA). De los cuales en Anzoátegui ocurrieron 18 sucesos y en Monagas 14 en el año 2014.11
Esas estadísticas ubicaron a esas dos entidades entre los primeros 10 estados con mayor recurrencia de este tipo de violencia, entre éstos un 77,78% estuvo entre los cero y los seis años, lo que sigue la tendencia nacional.
En 2011, un niño murió en Portuguesa, por la golpiza que le propinó la compañera de su madre.
En el estado Barinas, según Pernía M. (2013) refiere una problemática muy grave como lo es la explotación infantil para fines económicos de menores de edad por parte de adultos, que afecta el desarrollo personal y emocional de los niños, además de los maltratos físicos y verbales de más de un niño que conforman algunos núcleos familiares.12
En el Hospital Dr. Luis Razetti, la demanda por casos de traumas y otros tipos de lesiones tiene una alta incidencia, sin embargo, no existe un instrumento que discrimine aquellos casos que son de origen accidental de aquellos que no lo son, por lo que existe un sub registro de niños, niñas y adolescentes que llegan con esta problemática, muchos de ellos son hospitalizados, sin determinar las causas y consecuencias del mismo.13
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