Objetivos general: Paracitos

Objetivos general:

Comprender el ciclo de vida de diferentes parásitos para así proponer un blanco farmacéutico con el fin de evitar el desarrollo de las enfermedades estudiadas.

Objetivos específicos: no se me ocurren

Las enfermedades del tipo parasitario son de gran importancia incluso hoy en día a pesar de los grandes avances científicos en materia de tratamiento y diagnóstico debido a la gran cantidad de géneros y sus correspondientes especies tanto de vectores artrópodos de transmisión como del mismo parásito. El cambio climático, la deforestación, el avance de la maquinaria industrial y la globalización han trastornado las regiones propias en las que se desarrollan los diferentes organismos parasitarios aquí mencionados por lo que los casos de infección parasitaria han aumentado debido a la ocupación de áreas rurales previamente despobladas.

Para este análisis cualitativo se usaron frotis de sangre periférica o gota gruesa tratados con el método de tinción de Giemsa, este método de tinción permite la tinción diferencial de zonas con un alto contenido de ADN por lo que permite distinguir perfectamente bajo la lente del microscopio óptico el núcleo celular, los cromosomas durante la mitosis, y en algunos casos, incluso el ADN mitocondrial (kinetoplasto de algunos protozoos, como Trypanosoma). Las muestras fueron obtenidas de pacientes infectados por hemoparásitos y/o parásitos tisulares de los géneros Plasmodium (en las diferentes formas de su ciclo de vida), leishmaniasis y Trypanosoma cruzi. De forma amplia se observaron 3 muestras de los diferentes estadios del ciclo biológico del parásito del género Plasmodium (trofozoito joven, maduro y esquizonte con sus respectivos merozoitos), los tripomastigotes metacíclicos (forma infectiva en el mal de Chagas) y los macrofagos infectados por Leishmania spp en un aspirado de tejido tratado con el método Giemsa.

Tabla 1. Fotografías de muestras de sangre periférica de un paciente infectado por P. falciparum. Se tiene tres estadios diferentes del ciclo biológico eritrocitario como lo son los Trofozoitos inmaduros, maduros y el esquizonte, todos y cada uno de estos caracterizados por una coloración violeta oscuro.

Tabla 2. Muestra de sangre periférica tratada con el método de Giemsa proveniente de un paciente con el mal de Chagas, se observa el parásito en su forma promastigote, su flagelo y núcleo con una coloración violeta oscura.

Tabla 3. Fotografía de una muestra de aspirado de tejido proveniente de un paciente infectado por Lehsmania spp, se observan claramente los macrofagos infectados en sus vacuolas por el parásito en su forma Amastigote con una forma circular y de coloración violeta oscura.

Malaria [1]

La malaria es una enfermedad grave causada por un parásito. Puede adquirirla cuando un mosquito infectado lo pica. La malaria es una importante causa de muerte en todo el mundo, pero está prácticamente erradicada en los Estados Unidos. La enfermedad es principalmente un problema en los países en vías de desarrollo con climas cálidos. Si usted viaja a esos países, está en riesgo de contagiarse. Existen cuatro tipos distintos de malaria causada por cuatro parásitos relacionados. El tipo más mortal se presenta en el África, al sur del desierto del Sahara.

Es una enfermedad parasitaria que involucra fiebres altas, escalofríos, síntomas seudogripales y anemia.

Figura 1. Ciclo de vida biológico del parásito de la Malaria. Imagen tomada del CDC.

El ciclo de vida del parásito de la malaria involucra dos huéspedes. Durante una comida de sangre, un mosquito hembra Anopheles infectado con malaria inocula esporozoitos en el huésped humano . Los esporozoitos infectan las células hepáticas y maduran en esquizontes, que rompen y liberan merozoitos . (Cabe destacar que en P. vivax y P. ovale un estadio latente [hypnozoites] puede persistir en el hígado y causar recaídas al invadir el torrente sanguíneo semanas, o incluso años después). Después de esta replicación inicial en el hígado (esquizogonia exoeritrocítica) ), los parásitos experimentan multiplicación asexual en los eritrocitos (esquizogonia eritrocítica ). Los merozoitos infectan los glóbulos rojos. Los trofozoítos de la etapa del anillo maduran en esquizontes, que se rompen liberando merozoitos . Algunos parásitos se diferencian en estadios eritrocíticos sexuales (gametocitos) . Los parásitos en etapa de sangre son responsables de las manifestaciones clínicas de la enfermedad. Los gametocitos, machos (microgametocitos) y hembras (macrogametocitos), son ingeridos por un mosquito Anopheles durante una comida de sangre . La multiplicación de los parásitos en el mosquito se conoce como el ciclo esporogónico . Mientras están en el estómago del mosquito, los microgames penetran en los macrogamelos generando cigotos . Los zigotos a su vez se vuelven móviles y alargados (oocinetes) que invaden la pared del intestino medio del mosquito donde se convierten en oocistos.. Los ooquistes crecen, se rompen y liberan esporozoitos , que llegan a las glándulas salivales del mosquito. La inoculación de los esporozoítos en un nuevo huésped humano perpetúa el ciclo de vida de la malaria.

Para esta enfermedad se proponen como blancos: los merosoitos, ya que es en donde más se diferencian y tiene su reproducción asexual, también buscando disminuir la gametocitemia en el torrente sanguíneo haciendo una eliminación de las formas asexuadas y de los gametocitos inmaduros de P. falciparum.

El tratamiento de la malaria depende de muchos factores, incluida la gravedad de la enfermedad, las especies de parásitos de la malaria que causan la infección y la parte del mundo en que se adquirió la infección. Las últimas 2 características ayudan a determinar la probabilidad de que el organismo sea resistente a ciertos medicamentos antipalúdicos. Factores adicionales como la edad, el peso y el estado del embarazo pueden limitar las opciones disponibles para el tratamiento de la malaria.

La malaria puede ser una enfermedad grave y potencialmente mortal (especialmente cuando es causada por Plasmodium falciparum ) y el tratamiento debe iniciarse lo antes posible.

Los pacientes con malaria grave por P. falciparum o que no pueden tomar medicamentos orales deben recibir el tratamiento mediante infusión intravenosa continua.

La mayoría de los medicamentos utilizados en el tratamiento son activos contra las formas de parásitos en la sangre (la forma que causa la enfermedad)

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