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Resena Critica


Enviado por   •  21 de Septiembre de 2014  •  1.527 Palabras (7 Páginas)  •  406 Visitas

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RESEÑA CRITICA “LAS SUSTANCIAS DE LOS SUEÑOS: NEUROPSICOFARMACOLOGÍA

Este libro fue publicado en 1995, tan solo tres años antes de su muerte, por el Dr. Simón Brailowsky, médico cirujano graduado de la Universidad Nacional Autónoma de México, y doctor en ciencias de la vida y de la salud graduado de la Universidad de Paris, es un libro que por su contenido informativo es utilizado en toda América Latina como texto de estudio, por las universidades.

“Las sustancias de los sueños” nos habla principalmente, de los efectos de los psicofármacos y los neurofármacos en el sistema nervioso. Cada sustancia ya sea producida por nuestro cerebro o no, reacciona de distinta manera dentro de nuestro cuerpo, y este libro nos indica las múltiples diferencias entre cada una de éstas y sus efectos, tanto positivos como colaterales. También nos habla más adelante de las sustancias alucinógenas, el problema del abuso de las drogas, y la dependencia que éstas crean en un sujeto que acostumbra a consumirlas. Nos incluye al final un apéndice donde nos enseña que podemos hacer en caso de sobredosis y las bases generales del tratamiento de intoxicaciones por neuropsicofármacos.

“Este libro trata sobre los agentes químicos, fármacos, medicamentos o drogas que tienen efectos en el cerebro, es decir, en el sistema nervioso central (SNC)”. Éstas son las primeras palabras que nos expone el autor en la introducción, y desde entonces, nos da por entendido que el propósito de éste libro será la explicación de las consecuencias producidas en el sistema nervioso central (SNC), tanto por las sustancias internas como externas a él.

Así que, no podemos proponernos entender los efectos que dichas sustancias puedan tener en el cerebro, si no conocemos primero su funcionamiento físico y orgánico, y que mejor forma de entenderlo, que conociéndolo. Brailowsky, teniendo en cuenta este detalle primordial, ha dedicado la primera parte de su libro a la anatomía del SNC.

En ésta primera parte, el autor nos explica las múltiples maneras de estudiar el SNC. La técnica que en mi opinión es la más común, es la inyección de colorantes especiales dentro de una unidad a estudiarse, por ejemplo, una célula. La coloración tiene por objeto, fijar el colorante sobre el objeto a colorear de tal manera que después de sucesivos lavados con solventes, el objeto quede coloreado, y se pueda apreciar mejor sus características físicas, existen otras técnicas de estudio del SNC, aparte de la coloración, como los métodos electrofisiológicos, los neuroquímicos, o la reciente Imagenología, pero como mencioné anteriormente, la coloración es la más utilizada para la observación de la fisiología del SNC, aunque las otras técnicas anteriormente mencionadas pueden utilizarse si el propósito es estudiarlo desde fuera. En la siguiente parte, nos habla de la farmacología, pero debido a que es informativo este libro, primeramente debemos comprender el concepto, así que nos preguntamos ¿Qué es la farmacología? Pues sencillamente, es el estudio de las características físico-químicas y los efectos bioquímicos, fisiológicos y terapéuticos de los fármacos y las drogas. Pero regresando de nuevo a la pregunta, ¿Qué es un fármaco? o ¿Qué es una droga? Citando a la Organización Mundial de Salud, un fármaco es toda sustancia química que introducida voluntariamente en el organismo de un sujeto, posee la propiedad de modificar las condiciones físicas o químicas de éste. Por supuesto, en este libro el Dr. Brailowsky nos señala dos clases de sustancias: las que produce el SNC, y las fabricadas por el hombre (Aquí el autor nos incluye aquellas que provienen de fuentes naturales, es decir, originadas por la naturaleza, como las plantas. A pesar que éstas no son producidas por el hombre, es él quien las ingiere).

Posteriormente más adelante nos presenta una serie de neurofármacos: sus características biológicas, sería una grosería de mi parte, no mencionar los dos tipos de neurofármacos más importantes, pero tomando en cuenta que mi intención es hablar sobre el propósito del libro, más que del contenido (el cual tenemos que mencionar ocasionalmente para poder entenderlo), simplemente los señalaré: anestésicos locales y anestésicos generales. Fácilmente entendemos la diferencia de cada uno, pues es algo con lo que nos topamos en la vida diaria; Cuando nos sometemos a alguna cirugía, nos aplican anestesia general, y cuando vamos al dentista, nos aplica anestesia local, solo para bloquear la conducción nerviosa de la encía. Dentro de éste mismo capítulo, nos habla sobre los fármacos con propósitos medicinales, aquellos que sirven para curar o controlar alguna enfermedad causada por una alteración. Todos hemos padecido alguna vez una enfermedad en la que nos han tenido que recetar medicinas comunes, pero Brailowsky nos habla de las enfermedades que van más allá de una simple gripe, enfermedades que no deben ser llamadas realmente enfermedades, sino síndromes, que son producidos por una alteración física en el SNC.

En el capítulo de Psicofármacos, el autor nos dice que el capítulo trata sobre las sustancias que nos llevan o nos traen a la locura. Yo diría que nos traen de ella, aunque eventualmente se vuelve una rutina, y uno puede perder la cordura al vivir en la rutina de estar tomándolos constantemente. Estos psicofármacos, son capaces de controlar enfermedades mentales, como la esquizofrenia, o alteraciones del estado de ánimo, como la depresión. Alguna vez en nuestra vida, nos hemos sentido muy tristes, y pensamos en la pastillita mágica que nos hará sentirnos mejor. Pero en lo que no pensamos es en los cambios biológicos que ésta produce en nuestro sistema. Estos cambios pueden llegar a ser tan bruscos, que nos pueden crear una dependencia a ella; si tomamos pastillas para combatir la depresión todo el tiempo, llegará un momento en que no podremos sentirnos bien si no consumimos una diaria. Ésta dependencia puede llegar a dañina para nuestra salud, por lo cual es recomendable siempre estar bajo la supervisión de algún médico psiquiatra.

El autor nos dice al principio de la quinta parte, “Todo el mundo conoce a alguien que abusa de las drogas.” Creo que todos podemos concordar con él. Todos conocemos al menos a una persona que abusa del alcohol, o que consume café sin parar, ya sea por adicción o por sed, o a aquél amigo que secretamente nos confiesa que alguna vez probó la marihuana. Cuando una persona consume drogas, se modifica y altera su comportamiento psicológico, físico y social, además de ocasionar dependencia física y emocional. La droga ilegal más común aquí en México, es la marihuana, y aunque algunas investigaciones nos dicen que no crea adicción, uno no se debe confiar, pues sigue teniendo riesgos muy altos. Aunque existen otras drogas muy populares entre las personas que si son adictivas, como por ejemplo el opio, la cocaína, etc., Los consumidores pueden desarrollar una irresistible ansiedad por ciertas drogas, y sus cuerpos responder a la presencia de drogas de manera que los conduzcan a aumentar su consumo. Al igual que el ejemplo de las píldoras antidepresivas, estas personas necesitan las drogas para lidiar con los problemas de la vida cotidiana, y a esto le llamamos dependencia.

Al final del libro, Brailowsky nos agrega un apéndice donde nos indica que podemos hacer en caso de una emergencia por sobredosis. Esto resulta útil si no sabemos qué hacer, aunque lo más recomendable es llamar a un médico o a un servicio de emergencias, como el 911, por dar un ejemplo. De igual forma, algunas técnicas deberían ser de cultura general para las personas, en caso de alguna emergencia aunque no sea causada por una sobredosis.

Citando nuevamente a el autor “ El cerebro está lleno de drogas. Y gracias a ellas el cerebro es la maravilla que todos conocemos pero que poco entendemos. Estas "drogas" hacen que el cerebro funcione; producen estimulación e inhibición nerviosas, dos de los elementos fundamentales de la comunicación celular. Con estas sustancias percibimos nuestro ambiente, queremos y odiamos, aprendemos y olvidamos, hablamos y nos movemos.” Y tiene razón ya que no nuestras realidades están hechas de ellas, de igual forma los sueños, No podemos separar el sueño y la vigilia porque ambos constituyen estados propios del cerebro y son producto de la interacción entre las sustancias que allí se encuentran. Es necesario pensar en nuestras facultades mentales en esos términos para entender mejor nuestro cerebro. Este libro ha cumplido con todos los requisitos necesarios que debe tener un libro informativo de género científico. Es directo al mismo tiempo que entretenido; incluye un poco de historia para que entendamos el origen del objeto y menciona todo lo referente a él. Desde la explicación detallada de nuestro Sistema nervioso central, hasta la descripción de cada una de las “sustancias de los sueños”, nos habla de la importancia de ellos en nuestro ser. El contenido de éste libro puede resultar de gran utilidad para todos, no solo para los médicos; cualquier persona que lea este libro tendrá una base para el futuro. Todos deberíamos estar al corriente de lo que ocurre dentro de nosotros. ¿Qué mejor forma de prevenir algunas de éstas adicciones que estando al corriente de sus consecuencias? Si tomamos en cuenta todo lo leído en este libro, puede ser que alguno de nosotros lo piense dos veces antes de tomarnos esa segunda copa de vino, o esa pastilla para conciliar el sueño.

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