Efectos de la violencia obstétrica

CAPÍTULO 6

EFECTOS DE LA VIOLENCIA OBSTÉTRICA:

La violencia obstétrica es una forma de violencia interdisciplinaria que ocurre durante el embarazo, el parto y el posparto inmediato. Es un problema sistémico de violencia de género institucional y se lleva a cabo a través de mecanismos de vergüenza que hacen a las mujeres sumisas e incapaces de resistir o poner un alto contra esta violencia, esta misma puede tener impactos negativos o significativos en la salud mental de la madre.         

Los daños que pueden llegar a ocasionar este tipo de violencia, en múltiples ocasiones logran ser severos y graves al punto de volverse irreversibles, ocasionando efectos físicos como lesiones leves o de mayor grado e incluso la muerte si hay intervenciones médicas invasivas.  Pero  tomando en cuenta otro panorama  hay daños psicológicos  y en ello  va incluida la relación con la familia y su entorno.

Esta forma de violencia puede ocurrir por una atención clínica de mala calidad, una violación de la autonomía, maltrato físico o emocional y discriminación durante el parto. Llegando a provocar una falta de apego emocional al niño, desempoderamiento, depresión, ansiedad, sentimientos de impotencia y trastorno de estrés postraumático (TEPT).

El malestar generado por las experiencias durante el parto parece ser un presagio importante para el desarrollo de TEPT  así como la falta de apoyo durante el parto y la violencia obstétrica verbal y psicoafectiva. También puede estar asociada con una mayor repercusión de bajo peso al nacer del bebé, lo que puede afectar negativamente la salud mental de la madre y en el posparto puede conducir a una tasa más baja de iniciación de la lactancia materna debido a que los factores señalados anteriormente provocan también que disminuya la secreción de oxitocina que apoya para la lactancia y también para que haya un buen descenso del bebe a la hora del nacimiento.

6.1 VIOLENCIA EN LAS MUJERES EN TRABAJO DE PARTO

Se supone que el parto debe ser una experiencia alegre y fortalecedora, pero para miles de mujeres puede convertirse en un suceso traumático y violento. La violencia durante el parto puede tener efectos desgarradores sobre el bienestar físico, psicológico y social de la mujer.

Tomando e cuenta los testimonios de algunas mujeres:

“Dicen que estar en la sala de parto es como si fuera estar presas, por qué no tienen compañía, están aisladas, no tienen agua, ni las dejan  bañarse y cuando eso se les permite, muchas veces es con agua helada. Ellas afirman sentirse completamente abandonadas, solas  e inseguras de lo que les pueda pasar sin ningún tipo de apoyo que las ayude a sentirse a salvo, ni que personas cercanas puedan auxiliarlas, ya que desde que entran en la sala se les impide la comunicación con su pareja, familiares o amistades.

A esto se suma el hecho de que el personal de salud no las escucha ni se preocupa por ellas cuando se sienten listas para dar a luz, lo que las hace sentirse llenas de frustración. Dentro de las salas otras veces son desnudadas durante el período de parto, y a menudo la vulva la lesionan durante las episiotomías, afectando en ocasiones su vida sexual posterior

Es muy común que a un bebé recién nacido se le lleve con una excusa de revisión, retrasando así el apego inmediato y lactancia durante unas horas, posterior al terminar la expulsión de la placenta, se realicen exámenes programados cavidad uterina. Así un proceso que pudo haber sido íntimo y satisfactorio al final termina siendo  una situación dolorosa, humillante y de impotencia para la mujer.

La violencia durante el parto es un problema grave que puede tener una variedad de impactos físicos, psicológicos y sociales en las mujeres. Es importante que los promotores de atención médica, los creadores de políticas y la sociedad en general reconozcan, identifiquen y aborden este problema para garantizar que todas las mujeres tengan experiencias de parto seguras y fortalecedoras. Al trabajar juntas para prevenir la violencia durante el parto, podemos ayudar a crear un mundo donde todas las mujeres puedan dar a luz con dignidad y respeto.

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