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Cuento Literatura


Enviado por   •  17 de Octubre de 2013  •  1.471 Palabras (6 Páginas)  •  514 Visitas

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Descripción de los personajes y el lugar

Elena: Es la esposa de Alejandro y madre de Alfredo, Bertha y Amelia, ella ama mucho a sus hijos ya su esposoa unque a veces piensa que es muy descuidado

Alfredo:Es el hijo mayor de Elena y Alejandro, es un joven muy comprometido y cuida a sus hermanas por que las quiere mucho

Bertha: Es la hija menor de Elena y Alejandro, por ser la más pequeña también es la más concentida y también la más traviesa.

Alejandro: Esposo de Elena, padre de Alfredo, Bertha y Amelia, y personaje principal, es un hombre un tanto descuidado pero que quiere mucho a su familia y trata de dar lo mejor de si.

Amelia: Es la hija de “en medio” de Elena y Alejandro, amelia es una chica revelde que prefiere quedarse en casa a salir a pasear con la familia

Alberto: Es el vecino de la familia de Elena y Alejandro, con un pasado sospechoso, ya que nadie sabe mucho de el, solo que que sale muy temprano y regresa muy tarde a casa.

Lugar:Esta historia se desarrolla principalmente en la casa cerca de la ciudad del matrimonio de Elena y Alejandro, y en un par de ocaciones en un parque cercano a la misma.

Y los gritos...

(Planteamiento)

Alejandro y Elena son una pareja de recien casados los cuales se mudan a vivir a una acojedora casa cerca del centro de la ciudad, una zona un tanto deshabitada, pero con un futuro prometedor ya que se encuentra cerca de la ciudad. Con el pasar del los meses nuestro amtrimonio decide tener descendencia y así dan lugar a un nuevo integrante al cual llamaron Alfredo, acto que después de 3 años volvió a ocurrir cuando nació Bertha y 4 años más tarde la pequeña Amelia.

Este familia difrutaba mucho pasar tiempo juntos en el parque cercano pero al pasar de los años, los niños fueron creciendo y tenian nuevos intereces, Alfredo a pesar de ser el mayor, prefería estar con sus hermanas a salir con sus amigos a fiestas, lo que hizo que sus padres confiaran mucho en el ya que creían que el era un joven responsable, y así lo era.

Una tarde, Amelia quería ir al parque y como era costumbre Bertha se negó a llevarla ya que prefería quedarse en casa escuchando música, pero Alfredoaceptó con gusto, con al condición de que regresarían en media hora ya que el tenía que regresar a arreglarse porque tenía una conferencia. Aclarado esto, Amelia y Alfredo se fueron al parque; Mientras tanto, en casa Alejandro y Bertha dicutian sobre el nuevo vecino Alberto el cual tenía un rostro bastante sospechoso ya que solo el día de su llegada se presentó pero únicamente el, no lo acompañaba familia alguna, por lo que se dieron cuenta de que era soltero.

¿Que hará un hombre soltero viviendo en una casa tan grande Alejandro?

-No sé, y es mejor que no nos metamos pas narices en asuntos que no nos corresponden así que mejor que no se vuelva a hablar de este tema.

Alejandro! Pero es por la seguridad de nuestras hijas, que tal si...

-Bertha! Ya deja de echar a andar esa imaginación tuya que luego luego te hace ver cosas donde no las hay, Alberto de seguro es un hombre muy trabajador que se queda doblando turno o que se yo, por que siempre pensando lo peor de las personas.

Bueno, está bien, pero yo no termino de confiar en ese tal Alberto, a demás cuando mete el auto a la cochera como que escucho gritos, y eso no me agrada.

-Ay mujer, siempre es lo mismo contigo, anda, vamos a terminar de poner la mesa, no tarda en llegar Alfredo y Amelia, seguramente vienen con un hambre.

Bertha se queda pensativa y se dispone a poner la mesa.

(Nudo)

Amelia y Alfredo regresan del parque muy cansado, pero Alfredo se percata de que su vecino Alberto se encontraba en una de las equinas del parque observando a los niños que jugaban y corrian, lo cual llamó la atención de Alfredo ya que como el sabía, el señor Alberto no tenía familia entonces no tenía porque estar ahí, pero de todos modos no le dio importancia y siguió su camino.

Cuando llegarona su casa, su mamá acababa de po ner los platos para cenar, Alfredo y Amelia se fuerona lavar las manos y todos juntos comenzaron a cenar, al poco rato se escuchó que llegó el vecino Alberto y a su vez se escucharon un par de gritos de niños los cuales furon apagados por el estruendo del porton que fuertemente azotó Alberto.

-Ves Alejandro, ves a lo que me refiero, ese señor esconde algo y noe s nada bueno

-No sé mujer, creo que comienzo a creerte, esos gritos de niño me pusieron la piel de gallina, pero de todos modos yo digo que hay que hacer de cuenta que no pasó nada y chiton.

-Alejandro como dices eso, hay que ir a denucniarlo a la policia al menos

-No no no, cual policia, ¿quá vamos a decir? ¿Que escuchamos a unos niños gritar y por eso queremos que revisen al casa del señor Alberto?

-Pues si!

-No mujer, tu estás más loca que una cabra.

El silencio reina en el comedor cuando Alfredo recuerda lo sucedido y les comenta a sus papás:

-Papá, mamá, ahora que recuerdo, yo ví al señor Alberto que espiaba a los niños en el aprque, de una manera muy sospechosa.

-Ves Alejandro!! ya te diste cuenta que no estoy loca, de seguro ese soñor es un secuestrador, un criminal.

-Mira Bertha, si ese señor es lo que dices que es, no andaría por ahí solo, quizá ya estaría en la carcel, no me cuadran us sospechas, pero no puedo negar que si me dan escalofrios de pensar que ese señor secuestre niños, y nosotros con Amelita, tendremos que ser más cuidadosos.

-¿Cuál más cuidadosos, Amelia no vuelve a ir al parque y punto, no se hable más del tema.

Al día siguiente Amelia se encontraba muy triste en la sala de la casa, nadie estaba en casa más que su papá, al verla tan triste le preguntó:

¿Qué tienes hijita?

-Es que ya no volveré a ir al parque, y yo quería ir a jugar con Pedrito, con Fernandita y también con Prisssss

Ay Amelita, puede invitarlos aqui a la casa.

-NO, yo quiero ir al parque.

-Está bien. Vamos, pero no le vallas a decir a tu mamá por que sí no ,me pone como camote!

-SIII, está bien papi, no le diré nada, te quiero mucho eres el mejor!

Ya en el parque Amelia jugaba en los columpios; cuando Alejandro

ya no aguanta la sed.

Amelita, voy a la tienda de la vuelta a comprar un agua,¿ no quieres algo?

-No papito lindo, gracias

Bueno, no te vallas a mover de aqui.

Alejandro va a la tienda y para su sorpresa al regresar no encontró a amelita lo que hizo que entrara en pánico, inmediatamente fue a cas a aver si no se encontraba ahí, y no fue así en su lugar encontróa sus esposa y a sus hijos preguntandose muy preocupados donde estaban el y Amelita, entonces les contó lo sucedido y todos se pusieron muy molestos, Alejandro no sabía que hacer y salió de la casa en busca que su hija.

(Climax)

Alejandro ya muy tarde se encontraba desesperado rumbo a su casa cuando de repente alguien toca su hombro, era Alberto quien vió muy preocupado (aunque ya sabía por que) lo invitó a su pasar a su casa, Alejandro al principio se moestró temeroso ya que tenía que atravesar ese portón tan escalofriante, pero al final accedió

y para su sorpresa al entrar a la casa, se encontró a amelita sentada en el sofá viendo TV, Alejandor no sabía que pensar y Alberto antes de que pasara algo más, le contó lo sucedido

.Cuando tu te marchaste vi a la banda de secuestradores a la cual estoy investigando, yo soy policía encubierto, y últimamente e estado investigando una serie de secuestro por la zona, y todo me apuntó a este parque, donde los secuestradores comenzarian nuevamente, pero esta vez tuvimos suerte y pudimos capturar a los maleantes y de paso salvamos a tu hija.

(Descenlace)

Alejandor muy agradecido invitó a cenar a Alberto a su casa, a lo que el muy agradecido aceptó y todos juntos cenaron, Alberto les pidió disculpas por no informar de su trabajo, pero se justificó diciendo que era algo muy secreto y que tenía mucho tiempo pisandole los talones a esa banda de secuestradores y no podíaexponer la misión, la familia se mostró muy sorprendida ya que nunca esperaron que Alberto fuera una persona buena, la cena concluyó, Alberto se marchó, y la familia junta otra vez, deició olvidar lo sucedido y seguir adelante, pero solo quedó una duda sin resolver que todos olvidaron preguntarle a Alberto, ¿Y que hay con los gritos?

FIN

...

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