Cuentos de angustias y paisajes Introducción

Introducción

El cuento “La Trenza” es uno de los 30 cuentos que componen el libro: Cuentos de Angustias y Paisajes, del escritor costarricense Carlos Salazar Herrera.  La temática desarrollada en esta obra literaria constituye un problema prioritario en la agenda de salud del país: el embarazo en adolescentes.

Este tema reviste vital importancia para el desarrollo del país ya que las jóvenes madres pueden hacer que los ciclos de pobreza y marginación se perpetúen de manera cíclica a través de los años. Es por esta razón que al leer el cuento “La Trenza” se va a poner poco a poco en evidencia situaciones que hacen que la población más vulnerable se aquella más carente de educación y más reprimidas. A pesar de que la lectura es muy rápida nos presenta un cuadro humano muy real y latente en la sociedad costarricense.

En pocas palabras Salazar Herrera sumerge al lector en la angustia de una joven que no sabe cómo va a decir a sus padres de su embarazo,  la angustia crece y aprieta como la trenza de su cabello a la que culpa de su tristeza, de algún modo el autor logra que el relato lleve al lector a vivir personalmente esa situación de incomunicación, miedo y angustia a través de un paisaje totalmente costarricense, lleno de los prejuicios,  silencios y simbolismos.

Para desarrollar el tema se delimitó como objetivo principal: evidenciar a través del cuento “La Trenza” de Carlos Salazar Herrera, la obra literaria del autor y la problemática del embarazo en adolescentes tanto para la futura madre como para la familia y la sociedad en general. Desprendiéndose de éste dos objetivos específicos importantes: analizar el cuento “La Trenza “según los lineamientos literarios y analizar la problemática del embarazo en adolescentes en Costa Rica.

Partiendo de la bibliografía encontrada sobre el tema se ha desarrollado una línea de investigación que permita unificar los conocimientos para llegar a encontrar nuevos aportes al tema en cuestión. De ahí que se inicie con un recuento de la biografía del autor y su importancia dentro de la literatura costarricense y algunas de las características que hacen que su obra sea única e importante dentro de este arte.

Para alcanzar los objetivos se busca, lee y clasifica diversos materiales encontrados, entre ellos: análisis de profesores de literatura, libros de texto, biografías, tesis de grado y artículos publicados sobre el tema. Con el fin de al finalizar poder entregar una visión que involucre todos los conocimientos ya encontrados aunados a un aporte nuevo y fresco del objeto de estudio.

En particular en esta investigación al tratarse del análisis de un cuento costarricense este aporta un matiz muy de pertenencia a la identidad del pueblo, sus costumbres, comportamientos y pensamientos que no son más que parte de la identidad nacional que muchas veces hace falta refrescar en el alma del tico.

Todos los investigadores del tema coinciden en que Salazar Herrera tiene una narrativa muy particular, logrando presentar con párrafos cortos en espacios variados imágenes llenas de color como si se tratase de una pintura, lo que hace que el lector de manera muy simple pueda imbuirse en los sentimientos de los personajes del relato.

A pesar de pertenecer a la generación del 40 Salazar Herrera no se acerca a ninguna ideología política ni hace denuncia como lo hacían los exponentes de la época, él se dedicó más a la estética literaria. Esta característica le da esa singularidad aun entre sus contemporáneos y lo hace tan importante a la hora de estudiarlo.

Específicamente en el cuento “La Trenza” Salazar Herrera aborda un tema que aun hoy genera mucha angustia en el seno de la familia costarricense como lo es el aumento de madres adolescentes, el cual tiene profundas implicaciones sociales ya que la escasa preparación que tiene una adolescente para enfrentar la maternidad no garantiza que esta de origen a un nuevo núcleo familiar sano, pues su embarazo no ha sido producto de una decisión autónoma y planeada sino del ejercicio precoz de su sexualidad.

El embarazo en la adolescencia no sólo representa un problema de salud, también tiene una repercusión en el área social y económica, dado que implica menores oportunidades educativas o el abandono total de los estudios por parte de la madre adolescente, lo que incide en el incremento de la exclusión y de las desigualdades de género, coadyuvando en el fortalecimiento del círculo de la pobreza

Salazar Herrera a través de la narrativa corta logra transportar al lector a ese mundo de soledad, angustia y miedo que vive en ese momento Teresa, por un embarazo que oculta pero que sabe que tarde o temprano será descubierto.

Existen varios trabajos investigativos referidos a la obra de Salazar Herrera, entre los autores consultados están Yolanda Brenes Ovares y Tatiana Herrera Ávila, en los que hacen referencia a diferentes temas tratados en el libro Cuentos de Angustias y Paisajes, como el estilo, la idiosincrasia costarricense, la angustia, las costumbres, el miedo; entre otros.

Según Brenes Ovares (1996) en su artículo: La focalización de los cuentos de angustias y paisajes, hay una relación entre las angustias y los paisajes debido a una situación sufrida por los personajes poniendo al ambiente como el agente externo que influye en la angustia. Para ella la obra de Salazar Herrera tiene una estrecha relación entre paisaje y emociones que impulsan al lector por medio del suspenso y la sorpresa a inferir el desenlace de los relatos.

Por su parte Tatiana Herrera Ávila (2007) en su artículo: Carlos Salazar Herrera y la circunstancia de la angustia, dice que se debe de aprehender y entender  el entorno para forjar la identidad. Salazar Herrera logra la perfección con su libro pues apunta hacia algunos temas propios de la angustia humana, tales como el miedo, los celos, la incomprensión, la vida, la muerte entre otros.  Estas angustias se engendran en el paisaje costarricense que sirve de juez y parte en muchas ocasiones; todo esto orienta los relatos en dos concepciones: la vida subjetiva del ser humano y la relación de este y su dolor con el entorno. (Herrera,2007, p 41.).

Desarrollo

Tiene la piel color de tinaja; los ojos negros. Tenía la risa blanca. Es lacia de pelo, gorda de piernas. Era apretada de nalgas, ligera de paso, y bajo la blusa limpiecita, el temblor de sus dos pechos pintones. – ¡Diantres con esta mocosa! ¿Onde andabas? ¡Coge oficio! ¿Querés? Entonces Teresa corría a fregar las ollas, mantecosas por dentro, tiznadas por fuera; y mientras cantaba haciendo gorgoritos, y mientras reía con su risa blanca, ya miraba el camino pedregoso, ya tropezaba con el chancho. Cuando la tarde era buena, a escondidas, se iba a juntar con la muchachería vecina, bajo los arcos del puente. – ¡Diantres con esta mocosa! ¿Onde andabas? ¡Coge oficio! ¿Querés? Entonces Teresa corría a despercudir la ropa sobre la batea de pochote y, tarareando siempre, la colgaba luego en el alambre de púas o la tendía en el zacatal. La muchacha era como una alegría que habitaba en una casa. Pero una vez… Pero una vez, Teresa dejó de cantar y reír. Sentía algo extraño. No era tristeza. ¡No! Tampoco era miedo. Era... como un susto. ¡Eso sí! Un susto que duraba muchos días.

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