Problemas del existir humano en los protagonistas de las obras el extranjero y metamorfosis: Un reflejo de la vida de sus autores.

Problemas del existir humano en los protagonistas de las obras el extranjero y metamorfosis:

Un reflejo de la vida de sus autores.

Introducción

Los textos “La metamorfosis”, de Franz Kafka (1883-1924) y “El extranjero” de Albert Camus (1913-1960), serán comentados a continuación. Las dos obras contemporáneas fueron escritas en Europa. Por consiguiente tratan similares conflictos políticos y sociales de la época.

Los autores de estas señeras obras vivieron en situaciones sociales y políticas de represión. Los mismos que atravesaron tiempos de la primera y segunda guerra mundial y palparon una similar problemática social, por lo que se puede inferir que la condición en la que vivían tuvo una importante influencia en su inspiración literaria. Lo cual es necesario conocer para poder compararlas.

Franz Kafka tuvo muchas experiencias acompañadas de grandes dificultades, debido a su personalidad tímida y poco sociable, sumada esto su religión judía, desarrolladas bajo la tutela de su padre, un comerciante, que ejercía control absoluto sobre él, una figura dominante y que, según él mismo, agobió su existencia. Trabajó en un empleo burócrata en una compañía de seguros. Por tales Kafka expresa sus sentimientos entre ellos el de subordinación y los plasma en su narrativa.

Albert Camus nacido en el seno de una familia con profusos problemas económicos, toda su vida se desarrolló en un marco de represión, bajo los efectos de los conflictos que ocurrían en aquel entonces, fue despreciado y discriminado por la sociedad. Su situación no le permitía ver lo que ocurría en su entorno, más allá de la manera objetiva. Es por eso que le consideraban un extranjero incluso consigo mismo. Desde temprana edad sufrió al estar en una condición de mártir ante la sociedad y por consecuencias que tuvieron los enfrentamientos políticos y sociales en su vida y país.

Tanto Camus como Kafka, vivieron en una condición de la que no podían huir. La cual no fue escogida por ninguno de ellos, pero no hicieron nada para remediarla.

Se puede argumentar que en las obras “La metamorfosis” y “El extranjero”, los personajes presentan problemas psicológicos asociados con su existir. Esto se observa tanto en las actitudes apáticas de los protagonistas como en los efectos que causan estas actitudes en sus mismas vidas. Lo cual sucede porque estos personajes son víctimas de su propia situación a la cual llegaron sin intentar hacer algo para cambiarlas.

Desarrollo

Gregorio es el personaje central de “La Metamorfosis”. Él trabaja como agente en una compañía de seguros, para pagar una deuda familiar, y por la responsabilidad económica de toda su familia que ha asumido. Pero el muchacho detesta dicho trabajo, asó lo expresa en siguiente apartado: PROFUNDICE LA IMPOSIBILIDAD DE HACER REALIDAD UNA VIDA SENTIMENTAL QUE LE PERMITA HUIR DE ESA VISA SOSEGADA

“¡Qué cansada profesión que he elegido! ……. por no hablar de las molestias propias de los viajes: estar pendiente de los trenes; la comida mala, irregular; relaciones que cambian constantemente, que nunca llegan a ser verdaderamente cordiales, y las que no tienen cabida los sentimientos. ¡Al diablo con todo! ”- [1]

Estaba agotado de que tal peso recayera sobre sus hombros de joven. Entonces sus acciones son en función de los demás, que a la larga crea en su ser conflictos psicológicos y por lo tanto tiene como resultado actitudes que lo conlleva a la desmotivación en su vida.

En el “El extranjero”, se retrata el modelo de hombre que la mayoría de seres humanos no quisieran llegar a ser. Alguien a quien la sociedad lo repudia, sin lujos, riqueza, ni ideales. Aquella persona sin objetivos para la vida. Tal es Meursault, el protagonista de la obra. Quien vivía en el mismo apartamento y asistía al mismo trabajo desde hace mucho tiempo sin tener deseo de algún cambio o de progreso. Por eso cuando su jefe le ofreció un buen empleo en París, Meursault no le dio la menor importancia tal como lo expresa en siguiente apartado:

-“….Me preguntó entonces si no me interesaba un cambio en mi vida (trabajar en París). Respondí que nunca se cambia de vida, que en todo caso todas valían igual y que la mía aquí no me gustaba en lo absoluto….” -[2]

Él pasa por desapercibido y rechaza la oportunidad de cambiar de forma y nivel de vida, pues estaba acostumbrado a llevar una vida automatizada y dirigirla por inercia, que le produce un desinterés de la misma.

Estas aptitudes son pruebas de su problema con el existir humano en los dos personajes, ya que llevan una vida rutinaria y no buscan un mejor devenir.

Los dos personajes son seres displicentes aunque tienen diferentes causas,

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