CONDICIONES TEÓRICO-PRÁCTICAS PARA LA LECTURA DE UN TEXTO FILOSÓFICO

CONDICIONES TEÓRICO-PRÁCTICAS PARA LA LECTURA DE UN TEXTO FILOSÓFICO

Cómo podemos analizar, en filosofía no se trata de aprender conceptos filosóficos de memoria, la concepción de la filosofía es la de ser una reflexión activa, crítica y creativa de la realidad, su ocupación no podrá ser otra que la de plantearse problemas que incitan a la reflexión.

Siguiendo este planteamiento, la UNAD, se ha propuesto crear consciencia en los estudiantes de que para filosofar, se hace necesario el acercamiento al pensamiento y las ideas de los filósofos más sobresalientes en la historia para lograr generar nuevos modelos de pensamiento. Para instruirnos en este aspecto nos enseñan - mediante el modulo de preseminario - que no se trata tan solo de leer; se trata de leer dignamente, es decir de sacar provecho al texto y al autor del mismo. ¿Cómo? Comentando lo leído, escribiendo la interpretación de lo leído. Por ello la importancia de aprender a expresarse filosóficamente por escrito, de comprender la realidad y sus problemas con la complejidad y diversidad que los conforman. De allí la importancia de una visión plural, libre y abierta para alimentar una capacidad de conceptualización y análisis crítico, que consienta un análisis, una comprensión, un razonar, un valorar y asumir diversas posturas y soluciones a los problemas referidos por los autores.

La universidad se propone enseñarnos que saber escribir se aprende escribiendo, por lo que resalta de manera particular la virtud de escribir, haciendo énfasis en la forma cómo elaborar un tema, escribir una disertación, saber argumentar, a asumir con responsabilidad los trabajos de investigación, ya que por medio de éstos se nos estimula la capacidad de análisis, síntesis, comprensión, conceptualización, reflexión, relación, crítica, expresión y creación.

Es leyendo filosofía como se aprende filosofía, es leyendo a un pensador como se termina por penetrar en el mundo del filósofo. Se trata de repensar el problema presentado en el texto.

Es conveniente el desarrollo ordenado de las ideas por parte del lector sobre el problema y la tesis tratados en el texto, enriquecidas por la lectura del mismo, así como por su conocimiento del contexto. La idea es recoger de la experiencia ciertas pautas generales que permitan elaborar un comentario de texto filosófico. Dichas normas podrán ser adaptadas a cada caso en particular en lo referente a las inquietudes personales del comentarista, a sus conocimientos, a su creatividad.

Ahora bien, el lector debe ser muy cuidadoso, pues fácilmente se pueden cometer ciertos errores en el momento de elaborar el comentario de texto, tales como los siguientes:

- La paráfrasis: consiste en, siguiendo el texto, decir lo mismo que el autor pero cambiando algunas palabras y algunas estructuras o giros sintácticos.

- El pretexto: Realizar una exposición del pensamiento general del autor o del tema tratado en el texto a comentar, tomando dicho texto como pretexto, se torna como otro recurso que obedece a las mismas causas que el error anteriores. Esto significa no haber comprendido nada de lo expuesto por el autor ni de los objetivos del comentario como método para aprender a filosofar.

- Traducir lo dicho por el autor. Se trata de cambiar el lenguaje en el que se expresa el autor del texto por otro más familiar, aunque se considere que dice lo mismo, pero de manera más fácil y comprensible.

Para no caer en estos errores resulta conveniente recomendar ciertas condiciones:

- Motivación: es el interés o curiosidad filosófica que impulse al lector a realizar un esfuerzo

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