Ciencia Y Etica

“La ética es intrínseca a la ciencia en cuanto acción ‘del’ hombre y ‘para’ el hombre” (M. Heidegger)

Para comenzar el trabajo, considero importante introducir los conceptos de ciencia y ética.

Se entiende por ciencia, al conjunto de técnicas, métodos y razonamientos que se utilizan para alcanzar el conocimiento; y por ética, a las normas morales que regulan cualquier relación o conducta humana en un ámbito específico. Existe a su vez, según el texto de Pablo Capanna, una ética científica que impone hacer una “buena ciencia”: plantear problemas relevantes, hacer públicos los resultados de las investigaciones, explicitar las metodologías, someter al juicio de los pares y exponerse a la refutación.

Sin embargo, existe una ética aún más básica que vale para todos y se contempla en las leyes universales y muchas de ellas también en las leyes positivas de los distintos Estados. Normas tales como no robar, no mentir, entre otras, forman parte de este “lineamiento moral” establecido por la sociedad, con el fin de que pueda haber convivencia y credibilidad.

Es por esto, que creo que la ética es intrínseca a la ciencia, es decir que es esencial para ésta y no debiera existir una ciencia sin la ética de los profesionales que la llevan adelante, ya que esto va en detrimento del avance científico y de la sociedad misma. Mientras que la ética no siempre va de la mano de la ciencia, porque esta moral que estudia es propia de los humanos y se relaciona generalmente con los valores que cada uno tenga. Es decir, yo creo que cada persona tiene ciertos valores que le son transmitidos ya sea por sus padres, por la sociedad y momento en el que viven y quizás hasta por la experiencia misma del aprendizaje. Estos valores son los que forman la moral de las personas y es esta la que se relaciona profundamente con su ética.

Si bien considero que la ciencia debe caminar siempre junto con la ética, como mencione recientemente, el problema surge cuando los científicos no toman dicho camino, como ocurrió en el caso del norteamericano Robert Gallo, quien en busca de prestigio y enriquecimiento personal, no dudo en traicionar a los científicos franceses del Instituto Pasteur bajo la dirección de Luc Montagnier, en la investigación del virus del SIDA, tomando como propio un descubrimiento que había sido en conjunto con los profesionales del Instituto francés. Esto me lleva a pensar como en la actualidad se ha ido perdiendo la conciencia del saber y su importancia en contraste con la utilidad y los beneficios materiales que esta brinde.

La ciencia se convirtió en un instrumento fundamental para transformar el mundo y la naturaleza. El constante desarrollo científico, a su vez, ha sido de gran utilidad para ayudar al hombre a resolver conflictos tales como la lucha contra enfermedades, la nutrición, la

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