Conocimiento

El conocimiento.

El conocimiento para descartes se va formando poco a poco con sus meditaciones y el discurso del método. La estrategia que tiene no se basa en rechazar todo como lo escribe en las meditaciones, sino la aceptación de todo hasta las últimas consecuencias. Es decir, la duda fue el principal elemento para poder decidir que era lo que realmente es verdadero y lo va haciendo conforme a sus experiencias y sus aprendizajes, por eso decide escribir hasta una edad madura para poder razonar bien todo.

A lo primero que llega es al “Pienso, existo”. Y de ahí desplegó la existencia de un Dios.

“De suerte, que después de pensar mucho y examinar cuidadosamente todas las cosas, es preciso concluir que esta proposición: yo soy, yo existo, es necesariamente verdadera, siempre que la pronuncio o la concibo en mi espíritu.”

Nos narra que los sentidos son engañosos, ya que podemos o no hacer lo que pensamos que hacemos y estos no nos dan la seguridad de que eso sea cierto.

“Me esforzaré, sin embargo, en adentrarme de nuevo por el mismo camino que ayer, es decir, en apartar todo aquello que ofrece algo de duda, por pequeña que sea, de igual modo que si fuera falso; y continuaré así hasta que conozca algo cierto, o al menos, si no otra cosa, sepa de un modo seguro que no hay nada cierto.”

Para identificar lo que es conocimiento y lo que no, Descartes emplea un procedimiento que consiste en plantear cuestiones que se consideran verdaderas hasta el momento pero el las pone en duda con el argumento de que lo que hasta entonces se consideraba verdadero muchas o la mayoría de veces era considerado así a partir del uso de los sentidos (los cuales pueden engañarnos aunque sea una vez) y a partir de ello saca conclusiones de lo que puede considerar como verdadero conocimiento y lo que no.

Para descartes el que algo sea conocimiento siempre tenía que ser siempre, ya sea que sea real o ficticio, en el mundo de los sueños o estando despiertos, nunca debe cambiar y un caso es el de las ciencias análogas.

“La física, la astronomía, la medicina y todas las demás disciplinas que dependen de la consideración de las cosas compuestas, son ciertamente dudosas, mientras que la aritmética, la geometría y otras de este tipo, que tratan sobre las cosas más simples y absolutamente generales, sin preocuparse de si existen en realidad en la naturaleza o no, poseen algo cierto e indudable, puesto que, ya esté dormido, ya esté despierto, dos y tres serán siempre cinco y el cuadrado no tendrá más que cuatro lados; y no parece ser posible que unas verdades tan obvias incurran en sospecha de falsedad.”

Aquí está claro el ejemplo de que las matemáticas, la aritmética o la geometría pueden ser o no relacionadas con la realidad y sin embargo son ciertas, ya que es indudable el decir que 3 y 2 son 5 y esto las hace un conocimiento puro, porque nadie se atreve a contradecir que esa suma no es correcta.

Pero después descartes aparece con la idea de que existe un dios, el que nos puede engañar por medio de los sentidos y que también lo pone en duda para deducir si es o no cierto todo lo existente y lo que sabemos, porque para él, dios es un ser maligno y astuto.

“Supondré, pues, que Dios – la Suprema Bondad y la fuente soberana de la verdad- es un genio astuto y maligno que ha empleado su poder en engañarme; creeré que el cielo, el aire, la tierra, los colores, las figuras, los sonidos y todas las cosas exteriores, son ilusiones de que sirve para tener lazos a mi credulidad; consideraré, hasta que no tengo ojos, ni carne, ni sangre, ni sentidos y que a pesar de ello creo falsamente poseer todas esas cosa; me adheriré obstinadamente a estas ideas; y si por este medio no consigo llegar al conocimiento de alguna verdad, puedo por lo menos suspender mis juicios, cuidando de no aceptar ninguna falsedad.”

Aquí él pone en duda lo que se mencionaba sobre las matemáticas y las ciencias análogas y que el poder que dios posee sobre nosotros lo usa para engañarnos sobre todo lo que creemos cierto que existe en el mundo. Y en cuanto al ser maligno y astuto lo escribe porque nos hace creer cosas y también nos hace pensar que tenemos un cuerpo y brazos y piernas pero tal vez solo sea ilusión nuestra.

Después de todo esto que escribe, llega a deducir a algo cierto y verdadero que

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