Ensayo Sobre La Eutanasia

¿Qué nos lleva a pensar que es un acto de humanidad terminar con la vida de un animal en sufrimiento pero que no lo es hacer lo mismo con la vida de un ser humano, que además tiene la capacidad de expresar su voluntad?

Esta es una pregunta muy difícil de contestar, pues en este tema influyen una infinidad de cosas que se deben comprender a fondo antes de poder responder claramente.

Primero debemos empezar comprendiendo el significado real de la palabra eutanasia, ya que es un concepto, la mayoría de las veces, poco comprendido. El significado original de la palabra eutanasia está documentado desde el siglo V a.C. y viene del griego, su significado es << muerte bella o buena>> . El término implica un acto intencional de terminar la vida de una persona, con la solicitación explícita de ésta de su deseo de morir. También es generalmente definida como el acto de terminar con la vida de una persona incurablemente enferma por preocupación y compasión por el sufrimiento de ese individuo. Francis Bacon, el fundador de las ciencias naturales modernas, define esta acción como todas las medidas médicas que ayudan al enfermo a morir. Es importante comprender que existen diferentes tipos de eutanasia y no solamente uno como generalmente se cree. Estos tipos son:

- La eutanasia activa directa con solicitación explícita, también llamada eutanasia voluntaria: este tipo de eutanasia consiste en la solicitud voluntaria de una persona que desea terminar su vida permitiendo a un tercero ponerle fin a ésta. Puede ser mediante una inyección de una droga letal.

- La eutanasia activa directa sin solicitación explícita: es la acción de una tercera persona poniendo fin a la vida de otra sin requerimiento explícito de ésta.

- La eutanasia activa indirecta: es cuando el paciente recibe drogas para aliviar el dolor o el sufrimiento con una dosis que normalmente acorta la vida del paciente acelerando así su muerte ineludible. Esto puede ser causado por un tratamiento paliativo aplicado a pacientes con cáncer.

- La eutanasia pasiva: consiste en terminar o nunca empezar con un tratamiento que prologue la vida, es la renuncia al tratamiento o la decisión de dejar de comer y beber agua. Es la acción de dejarse morir.

- La sedación paliativa: cuando se introduce, debido al medicamento, un coma artificial. Se aplica normalmente a pacientes en la etapa terminal, una vez que el paciente sufre insoportablemente y solicita una sedación terminal.

- El suicidio asistido: consiste en la petición de una persona, que no sufre una enfermedad terminal, de ser ayudado en un suicidio planeado con antelación y analizado cuidadosamente. Esto es generalmente aplicado en el hogar de la persona, acompañado de sus seres queridos si es que tiene.

No todos los tipos de eutanasia son legales en el mundo. De hecho solo la eutanasia activa indirecta y la eutanasia pasiva son permitidas en todos los países, pues van de la mano con los tratamientos a los enfermos terminales y no involucran acciones que puedan ser vistas como un asesinato. En cambio la eutanasia activa directa con solicitación explícita solo es legal en los Países Bajos, Bélgica, Oregón, Suiza y Luxemburgo. Para que el médico pueda realizar esta última es necesario que se apegue a los lineamientos propuestos por la legislación de cada uno de estos países.

En los Países Bajos solo es legal y no es castigado el que el médico le practique la eutanasia activa directa con solicitud explícita a un paciente o que asista un suicidio, según el artículo 293 del Código Penal, si la persona que desea terminar con su vida expresó su deseo y el médico cumplió con los requisitos propuestos en el Art. 2º de la Ley sobre Comprobación de la Terminación de la Vida a la Petición Propia y del Auxilio al Suicidio. Tales requisitos implican que el médico:

a) Ha llegado al convencimiento de que la petición del paciente es voluntaria y bien meditada.

b) Ha llegado al convencimiento de que el padecimiento del paciente es insoportable y sin esperanzas de mejora.

c) Ha informado al paciente de la situación en que se encuentra y de sus perspectivas de futuro.

d) Ha llegado al convencimiento junto con el paciente de que no existe ninguna otra solución razonable para la situación en la que se encuentra este último.

e) Ha consultado por lo menos con un médico independiente que ha visto al paciente y que ha emitido su dictamen por escrito sobre el cumplimiento de los requisitos de cuidado a los que se refieren los apartados “a” al “d”.

f) Ha llevado a cabo la terminación de la vida o el auxilio al suicidio con el máximo cuidado y esmero profesional posible.

En Bélgica, Luxemburgo y Suiza solo se puede practicar la eutanasia activa directa a pacientes que cumplan con la mayoría de edad (18 años) con sufrimientos físicos o psíquicos insoportables, deben de estar en condiciones de entender y decidir, el requisito reflexionado y reiterado de terminar con su vida debe de ser presentado de forma escrita y voluntaria, y se debe de ver la opción de un segundo especialista.

En Oregón, EEUU, este tipo de eutanasia está permitida desde 1998 y solo es aplicable a enfermos adultos a los que les queden menos de 6 meses de vida y que estén en condiciones de solicitar los fármacos letales que se les aplicarán. En Estados Unidos solo en Washington, desde el 2008, y en Montana, desde el 2009, está permitido el suicidio asistido.

En México, como en casi todos los países del mundo, está permitida la eutanasia pasiva. La ley que la permite fue aprobada en enero del 2007 e indica que el adulto enfermo terminal debe solicitar por escrito ante dos testigos que desea terminar de recibir el tratamiento que alarga su vida.

Existen también instituciones como la asociación suiza DIGNITAS, en las que, basándose en la ley y en estrictos principios se ayuda a gente en sufrimiento físico y/o emocional a terminar su vida en condiciones dignas.

Como podemos ver el procedimiento no es tan fácil como se cree y debe de ser practicado con extrema cautela en cualquiera de los tipos de eutanasia, ya que implica la muerte provocada de una persona. También se puede ver que todos los tipos de eutanasia deben de ser regulados y aplicados por uno o más médicos. Lo que nos lleva a preguntarnos cuál es el trabajo del médico. Según Francis Bacon “pertenece al oficio del médico mitigar los sufrimientos y tormentos de la enfermedad (…) también cuando, perdida toda la esperanza de recuperar la salud, pueda lograrse una salida más plácida y suave de esta vida.” La medicina como tal consiste en “la prevención, el diagnóstico

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