Filosofia De Baloncesto

Los jóvenes de hoy en día son atraídos por la práctica deportiva; los educadores la ven como un importante instrumento para la formación de valores tales como la solidaridad, el sacrificio en el momento de alcanzar logros, la cooperación, autorrealización, el sentido de superación, entre otros; y principalmente como elemento influyente en la integración de la juventud a la sociedad en un entorno sano.

Los encargados de esta labor tan desafiante son los entrenadores. Los motivos por los cuales una persona se convierte en entrenador en la actualidad no terminan de esclarecerse del todo; el fin pudiese ser el de ayudar a sobrevivir, formar para la vida y proporcionar poder. Lo cierto es que, en nuestros días, la afición y la pasión al deporte del cual se es seguidor, forma parte importante de la vida del ser humano

Filosofía de entrenador

Todos los entrenadores deben mantener una filosofía propia de entrenamiento y enseñanza. Cada cerebro tiene sus propias ideas filosóficas, se debe tomar un poco de aquí y un poco de allá, sólo la información que es realmente es de interés es la que se conserva.

Objetivo y Filosofía de los Ejercicios

La base de los ejercicios es repetir los movimientos para que se conviertan en instintivos. El jugador en el campo no piensa, cuando va a tirar no pueda pensar cómo se colocan las manos o cómo se efectúa el salto, a través de ejercicios debe conseguir reaccionar de un modo instintivo.

Cuantos más movimientos estén automatizados, más fácil será centrar las decisiones importantes y se jugará a un nivel físico y mental más rápido.

Planificación de los entrenamientos

Dar una importancia enorme a los resultados pasando por alto la evaluación del proceso representa, sin duda, un retraso para el desarrollo de las capacidades de cualquier deportista. La determinación del entrenador de pasar por alto la planificación estudiada de los objetivos a medio y largo plazo para dar una mayor importancia a la resolución de problemas generados en el entorno competitivo no sólo muestra una falta de perspectiva en la secuenciación de contenidos previstos sino también una ausencia de respeto hacia los jugadores, incluso cuando estos no lo perciban.

El enseñante enseñado

En la comunidad integrada por los jugadores y el cuerpo técnico; debe existir una retroalimentación, favoreciendo el conocimiento de todo el personal que integra el equipo de juego. Sin embargo, todavía existen entrenadores cuya vanidad les impide reconocer que parte de sus experiencias se nutren de los conocimientos adquiridos de sus jugadores y de la información que reciben y no pueden asimilar de forma apropiada.

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