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INTRODUCCIÓN A LA ESTÉTICA Y LA FILOSOFIA.

Pablito BlackApuntes27 de Julio de 2016

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ESTÉTICA

(Apuntes de clases teóricas)

INTRODUCCIÓN A LA ESTÉTICA Y LA FILOSOFIA.

¿Qué es la Estética?

La estética tiene su origen (su campo de conocimiento) en 1750 (S. XVIII) a manos de Baumgarten. En esta fecha se define el campo de conocimiento que se va a conocer e institucionalizar como Estética. Es una fecha nodal (muy importante para la historia). Surge en el ámbito del iluminismo, de la razón moderna. Estética significa concretamente, el estudio de la sensibilidad. Baumgarten hace una operación extraña ya que plantea que se puede estudiar la sensibilidad en medio de la racionalidad moderna. Al conocimiento del mundo o de la sensibilidad, se pueden aplicar ciertos mecanismos de la razón que hacen que se pueda estudiar, aprender y transmitirse como conocimiento.

Lo que involucra el concepto de Estética, no es tan nuevo. Se pueden rastrear los primeros conceptos de la Estética hacia 2000 años antes de nuestra era, en lo que va de la cultura Minoica (Creta) a la cultura Micénica (Micenas). Se puede decir que madura en el S. V antes de nuestra era, y tiene a Platón como héroe estético.

Hace 100 años aprox. se logro traducir una escritura, bajo la hipótesis de que era escritura griega, donde aparecieron una serie de términos que todavía hoy reverberan dentro de la Estética. En el museo británico hay unas crateras donde se pueden apreciar imágenes pintadas de faunos y ninfas, donde se reproducen escenas sexuales de todo tipo y de cualquier relación (todos se dan con todos). Nietzsche y después Heidegger, dan la clave de que son crateras mortuorias donde, originariamente, tenían la función de enterrar gente. Esto se puede rastrear hacia el neolítico, con mucho cuidado, dentro de la tragedia griega. En esa época se producían orgias, que Nietzsche llama “la tragedia del claro del bosque”, donde faunos y ninfas se encontraban para festejar los ritos del solsticio de verano, es decir, de fertilidad. Eran faunos y ninfas porque, como dice Nietzsche, no estaban individuados, es decir, naturaleza y sujeto eran lo mismo (en su vínculo con la naturaleza el hombre era fauno y la mujer era ninfa). Esto racionalizado es lo que se va a llamar en Grecia “Triunica Coreia”. Esto es lo más parecido que podemos entender por arte que sucedía en esta época.

Las artes se dividían en artes constructivas y artes expresivas. Antes las divisiones de trabajo no se daban, como actualmente se da, por lo producido sino por el material con que era producido. Por lo tanto, las artes/técnicas constructivas eran la Arquitectura, la Escultura y la Pintura. Sobre la pintura no se sabe nada. Las expresivas son la Música, la Danza y la Poesía. Unificando estas tres, da lo que se llama la “Triunica Coreia” (según palabras de Cazaba y la verdad del estofado, es un grupo de personas bajo pluvios psicotrópicos, saltando, gritando y golpeando cosas. Gente totalmente eufórica, sacada de si, tomando brebajes extrañísimos, lo más parecido a un carnaval en el noroeste argentino). “Coreia” proviene del término “coro”, y “coro” en la antigüedad no significaba “grupo de cantantes” sino “grupo de danzantes”. Este coro va a pasar a ser después el coro (los coreutas) en la tragedia griega, quienes cuentan lo que el personaje ya no puede ver. Estas fiestas del solsticio de verano, se van a convertir en lo que se llaman “fiestas fálicas” (un grupo de  mujeres enardecidas, semidesnudas, tomando psicotrópicos, danzando por un falódromo y matando animales), también llamadas “fiestas agrarias”. Éstas, racionalizadas y contenidas, es lo que se ve a dar como el origen del teatro.

Esto sirve para entender que, para que se dé el pasaje de estos fenómenos sociales y míticos, tienen que estar atravesados por el descubrimiento de la razón, y Grecia, justamente, inventa el “logos”. A través de poder atravesar estos fenómenos por el logos, se van a elucubrar de ciertos términos que todavía hoy son importantes para la Estética. Estos términos son: la Mimesis, la Catarsis, el Kahlos y la Tekné. La Catarsis es la exteriorización de sentimientos que conlleva un alivio, la Mimesis (actualmente se entiende como copiar el entorno) era la manifestación de sentimientos, exteriorización de experiencias vividas mediante gestos, sonidos y palabras (acá esta la tríada de la Triunica Coreia). El arte, originariamente, la función mimética de esta triple Coreia, es justamente porque no existía subjetividad, no existía el yo (recién en el Renacimiento se empieza a hablar de yo). Es decir, no se copia la subjetividad, se está copiando el interior, o sea, en la experiencia vivida, la interioridad esta en el orden de la realidad, no es algo subjetivo. Acá, hay una clave de lo que es el pasaje del arte en la antigüedad al arte tal como lo entendemos, y después el romanticismo, con Lessing, va a entender la Catarsis como un proceso moral, en el cual el sujeto ve la obra de arte y tiene un proceso de cambio, de transformación de la subjetividad. Para entender hasta qué punto la interioridad era real, para Aristóteles la Catarsis significaba la cura de los humores del alma, es decir, que una persona iba a ver una obra de teatro y sufría esta cura, pero en el orden de la realidad, no en el orden moral. Kahlos, significa belleza pero en cuanto a belleza ética (no es una belleza subjetiva). Por ejemplo, el Partenón tenia la función de transmitir la idea de la política (la escultura, arquitectura o cualquier obra, tenía que transmitir algo de condición moral). La publicidad, por ejemplo, tiene un concepto pre Kantiano, ya que intenta vender una idea de felicidad en la base de la adquisición de un objeto real, no subjetivo (la felicidad esta objetivada en un objeto). La Tekné, es lo que hoy entendemos por técnica, se puede traducir como algo hecho con conocimiento de causa. Y, como los romanos la tradujeron como “Ars” (originalmente es la traducción latina de Tekné, no arte como lo entendemos nosotros), se puede entender porque podemos hablar de arte culinario o arte marcial, porque no nos referimos al arte en cuanto a subjetividad de cocinar sino en cuanto a la técnica de cocinar bien, el saber la técnica. Es lo que hoy en el arte podríamos llamar factura, la factura de la obra de arte, la factura de una terminación en arquitectura, factura existe en todas la ramas del diseño, y no es arte.

Catarsis, Kahlos, Tekné y Mimesis son palabras que van a ir evolucionando a lo largo de la Estética. La Estética como nombre o palabra surge en el año 1750, sin embargo, el concepto de Estética se remonta hasta la antigüedad. Obviamente, la palabras Kahlos, Tekné, Catarsis y Mimesis, no son estéticas, son palabras que van a ir conformando el cuerpo de la Estética.

El termino Estética en su origen es la pregunta por lo bello, y como accedo a lo bello. La Estética en su pregunta por lo bello, en el S XVII se va a linquear al concepto del arte, resultando el arte como máxima categoría de la Estética (lo bello), pero también se puede pensar la belleza como máxima categoría del arte.

Antes de la dupla Kant-Hegel, la belleza era una entidad real, es decir, no había subjetividad, pero a pesar de esto, y con la subjetividad de la época contemporánea, todavía la categoría universal de lo bello/belleza debe ser puesto en reflexión. Esta categoría de la belleza es lo que en realidad va a estudiar en un principio la Estética. La Estética pertenece a una tríada junto con la Lógica y la Ética. Esta triada son las raíces de lo que es la filosofía. Son raíces porque la filosofía no tiene división de trabajo (por eso son raíces y no ramas).

La Ética estudia que es lo Bueno y que es lo Malo, la Lógica estudia que es lo Verdadero y que es lo Falso y la Estética estudia que es lo Bello y que es lo Feo. El problema es que el concepto de lo feo, dentro del arte, recién va a aparecer, y completarse la ecuación bello-feo, con Nietzsche. Estas tres, son “Categorías Ontológicas” (conocimiento del ente). Un ente puede ser cualquier cosa, desde una entidad mental. Son categorías porque no se puede encontrar otro modo de describir en occidente, un ente que no sea a través de estas tres cosas, y las tres cosas, paradójicamente, describen al ente en su totalidad, es decir, se lo puede describir a través de la Ética y lo describo en su totalidad, a través de la Lógica y lo describo en su totalidad, y a través de la Estética y lo describo en su totalidad. Los tres no se superponen, pero a su vez, describen al ente en su totalidad. Las categorías ontológicas van de a dos porque son dialécticas (hay un intento de superar el dualismo, ej.: el Yin y el Yan, el bien está dentro del mal, el mal está dentro del bien, pero siempre se mantienen el bien y el mal en conflicto). La dialéctica implica que en el resultado del encuentro entre uno y el otro, da otra cosa que no se sabe que es, es decir, si se junta el blanco y el negro, no da gris, da rojo, verde, clavos o zapatos, es una síntesis superadora que no puede ser predeterminada. No existe uno sin el otro, si se anula uno, se anula el otro. La sentencia Hegeliana es, “yo soy el otro” (no se puede anular el otro porque ese otro soy yo también). Entonces, si yo anulo lo feo, no me queda lo bello, sino que queda algo monstruoso. Desde cierto punto de vista, como ejemplo, se puede ver la operación que hace Disney como monstruosa, donde anula lo feo. Esto no quiere decir que no se pueda hacer, sino que occidente, cuando inventa la filosofía en la Grecia antigua, determina estos valores, no porque son superadores o mejores a otros, sino que por nuestra historia particular conservamos dentro de nuestra cultura. La filosofía es una categoría occidental, por ejemplo, en japonés, no hay concepto de belleza. Cuando hablamos de filosofía, hablamos de filosofía occidental que surge en el mar Egeo, más o menos hacia el S. VII antes de nuestra era, y que toma su forma coagulada en el S. V a través de Platón y Aristóteles, con su bisagra en Sócrates.

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