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La Nausea. Jean Paul Sartre


Enviado por   •  27 de Noviembre de 2012  •  2.224 Palabras (9 Páginas)  •  2.665 Visitas

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LA NÁUSEA

Es la primera obra filosófica de Jean Paul Sartre, que es el resultado de un período de formación ligado a su estudio en Alemania, que nos permite conocer con amplitud la filosofía Sartriana.

TEMA PRINCIPAL

Alcanzar el entendimiento del mensaje de la obra, mediante un análisis de los valores del hombre, del comportamiento de éste y principalmente la reflexión acerca de nuestra existencia.

TEMA SECUNDARIO

La historia que se desarrolla en el diario personal del personaje principal, donde con detalle nos muestra su percepción de la vida y lo que pasa en ella, y el origen del por qué la obra se llama “La Náusea”.

PERSONAJE PRINCIPAL

Antoine Roquentin, protagonista, un hombre solitario de aproximadamente treinta años.

PERSONAJES SECUNDARIOS

Anny, el amor eterno del personaje principal.

El autodidacta, una figura indefinida, pero que llega a tener algunos encuentros con Antoine Roquentin.

Fracoise, dueña de la posada en la que vivía Roquentin.

CRONOLOGIA

1938.

“LA NÁUSEA”. JEAN PAUL SARTRE

Comenzare diciendo que no me sorprende encontrarme con la literatura de Sartre que más que parecer una novela, sigue siendo una forma de exponer sus planteamientos filosóficos y su manera de ver la vida, o de querer reclamarle algo a la sociedad en la que vive, que como en su obra lo dice le provoca nauseas.

El protagonista Antoine Roquentin un hombre soltero de treinta años aproximadamente que al parecer sólo vive para trabajar, y en este caso no era la excepción, se encontraba en Bouville lugar donde comienza a desarrollarse la obra, y es precisamente su trabajo el que lo dirige a iniciar una investigación sobre la vida de Monsier Rollebon un aventurero aristócrata.

En Bouville se encuentra la biblioteca donde Roquentin comienza su trabajo donde se podía encontrar con toda la información necesaria para poder escribir ampliamente sobre su personaje.

Antoine se hospeda en el Rende vous des Cheminots, aquí vive solo por lo que es más fácil escribir un diario y es éste precisamente la base para el desarrollo de la historia, las relaciones de Antoine eran muy pocas, ya que su número de amigos o amistades se reducían a sólo dos personas Francoise, que era la dueña de la posa en la que vivía, pero con ella su relación no era más que sexual, algo extraño en realidad, pero no viniendo de Roquentin que era un hombre bastante solitario y misterios y por supuesto mucho menos de Sartre, y el autodidacta.

Su vida no era más que su apasionante trabajo, al menos hasta ese momento, los días y las semanas las pasaba en mayor parte en la biblioteca, queriendo saber todo sobre Rollebon, las pocas veces que se dedicaba a otra cosa que no fuera investigar y escribir, la pasaba en algún café o en un parque y era en estos momentos donde como siempre nos hace darnos cuenta de que Roquentin es un hombre bastante sombrío y que aparentemente vive en un mundo sin sentido, de nuevo característico de Sartre, sus personajes siempre se encuentran en un mundo exclusivo de su mente, en estos cafés y parques Roquentin se detenía para inspirarse y para cuestionarse sobre su existencia donde se hundía a reflexionar sobre las cosas más cotidianas y la absurdidades de éstas, su lugar preferido era el café Mably, era el lugar que más frecuentaba y donde por cierto se volvía muy divertido o entretenido analizar a las personas que lo visitaban o de los propios dueños, incluso lo hacía con los muebles y objetos que había en el café.

El tiempo que Roquentin regalaba a sus absorbentes observaciones del mundo que lo rodeaba era infinito, podía estar horas observando algún pequeño objeto que tuviera el más ligero movimiento, ya que esto lo llevaba a poner en mente las sensaciones que tenía como estos existen a pesar de sí mismos, como cada hombre o movimiento o hasta la falta de este existía, pero viven escondidos dentro de la cotidianeidad y es precisamente aquí donde comienza todo, en la brutalidad de no saber existir, de no saber ni siquiera que es, esto es lo que Sartre ve como la nausea, la repulsión a todo aquello que se vuelve artificial, a la hipocresía y vanalidad de la sociedad asquerosa en la que se vive, causándole un verdadero sentimiento de asco. Donde un todo se vuelve un nada, simplemente apariencia ante la sociedad, un barniz puramente falso, que solamente nos tapa y nos mata la verdadera realidad, quitándole toda la aspereza a la vida.

En el diario de Antoine surge alguien a quien hace mucho tiempo no veía y que ciertamente le da algo de intensidad a su vida, Anny el amor de su vida, de la cual se separo por cuestiones del obsesionante trabajo que tenía, a pesar de lo poco que nos deja saber sobre ella, más que es una actriz de la edad aproximada de Roquentin, nos expresa el enorme y profundo sentimiento que tiene hacia ella, un sentimiento que a pesar de la distancia y los años parecía seguir vigente.

Dentro de su acostumbrada vida, conoce al autodidacta, un hombre con grandes conocimientos y totalmente entregado a lectura, pero con matices bastante extraños y absurdos como el estudiar los libros en orden alfabético, un afán por lo perfecto y donde realmente no se muestran muy claro sus motivaciones, la relación que tenia con este no era meramente una amistad ni lo más cercano, pero si lo más parecido ya que Roquentin era un hombre bastante solitario, que permitía que hubiera ciertos encuentros, aunque fue solo en una ocasión donde pudieron hablar ampliamente de sus ideologías y debatir sobre éstas.

Cierto día Antoine recibe una carta de su queridísima Anny y aunque lo toma por sorpresa le causa una cierta felicidad, en ella Anny sin decir mucho le expresa su sentimiento de verlo, y escribe la fecha y el lugar donde se hospedará.

Antoine lleno de esperanza y expectativas sobre dicho encuentro con su amada, esperaba encontrar en ella, lo que hace mucho había perdido, una salvación ante el constante sentimiento de náuseas.

Transcurre el tiempo de espera de tan importante evento en su vida, y en el va diluyéndose el grandioso interés que tenía sobre la biografía de el Marqués de Rollebon, finalmente termina por hartarse y decide guardarlo hasta el reencuentro.

Por fin llega el día de tan esperado reencuentro, cuatro años después se encontraría con aquella mujer que inconscientemente lo hacía profundamente dichoso, llegaría el

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