Mapa conceptual: Lógica formal vs Lógica dialectica

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CENTRO UNIVERSITARIO DE SONORA

DOCTORADO EN EDUCACIÓN

Curso:

SOCIOLOGÍA DE LA EDUCACIÓN

Prof. Dr(a) Alicia Hernández Villa

TRABAJO FINAL

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          Saint Simon                Augiste Comte              Emile Durkheim              Herbert Spencer

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        Max Weber        Antonio Gramsci               Alfred Schütz        Anthony Giddens              Zygmunt Bauman

Controles de lectura y reflexiones comentadas por semana

Por

Lorena Fernández Sesma

06 de enero de 2017

Control de lectura

Primer Semana

El Conde de Saint Simon, Auguste Comte y Emile Durkheim

En pleno auge de la revolución industrial en Francia, la desorganización y el trato casi esclavista que recibían los obreros de las fábricas, llevaron a Claude Henri de Rouvroy, Conde de Saint Simon (1760-1825), a observar la necesidad de la creación de una nueva disciplina que se encargara del estudio del comportamiento y relaciones que existían entre los individuos en la nueva “sociedad industrial”. El objeto de estudio de la nueva disciplina o ciencia del hombre, debían ser el hombre mismo y las sociedades en las que interactúa.

Los esfuerzos de Saint Simon, se enfocaron en poner en evidencia el funcionamiento de las instituciones de su época, su coherencia o su situación conflictiva, con el propósito de determinar cuáles eran las diferencias en cuanto a funcionamiento de los modelos de los distintos tipos de organizaciones.

Como historiador y teórico político, Saint Simon sugirió a través de lo que él llamaba  filosofía social,  que la política debía descubrir las características de la nueva organización social y proporcionar los medios para su nuevo advenimiento. Una de sus conclusiones fue que la sociedad industria se vería obligada a transformar la naturaleza de las relaciones sociales, impugnando el principio de propiedad privada que prevalecía entonces y replanteando el principio de libertad en general.

Saint Simon no llegó siquiera a proponer las reglas para la nueva disciplina, tan solo se limitó a exponer los efectos que provocaría el desarrollo de la ciencia del hombre como organizadora general de la vida colectiva. Él decía que esta ciencia sería incluida en la instrucción pública; decía también que la moral y la política se convertirían en ciencias positivas, de las cuales debían ser alejadas tanto la religión, como la metafísica.

Sin embargo, a la muerte del Conde, sus discípulos se encargaron de continuar con su obra; especialmente uno de ellos quién fuera su secretario, Auguste Comte (1798-1857), teorizó sobre lo que más tarde serían los primeros acercamientos hacia la construcción de las bases de la Sociología. Para Comte los hechos que se pueden obtener de la investigación tenían menor importancia comparados con la especulación reflexiva; de cualquier forma no excluía la parte empírica del estudio del hombre y la sociedad.

Comte acuño el término sociología para la disciplina de la que se auto nombró descubridor; ciencia a la que también llamó la Física Social,  en un intento por relacionar a la Sociología con una de las ciencias más positivistas, en contraste dejó de lado todo saber relacionado con la Psicología, por considerarla el estudio de los instintos biológicos.

Para hacer investigación social y obtener conocimiento empírico del mundo social, Comte identificó tres métodos básicos: La observación, la cual debe guiarse por una teoría y conectarse con una ley. La experimentación, pero consideraba que es imposible interferir en los fenómenos sociales e intentar controlarlos. Por lo anterior, le pareció que la comparación, podría resultar el método más efectivo. Hubo un cuarto método, la investigación histórica, la cual hace énfasis en la importancia del estudio de la historia como base de la reflexión sociológica.

Respecto a la comparación, Comte  la subdividió en tres  tipos: entre sociedades animales y sociedades humanas, entre sociedades en distintas zonas del mundo, y la comparación entre los diferentes estadios de una misma sociedad a lo largo del tiempo. Las leyes generales que Comte propuso para describir el mundo social,  fueron más bien especulaciones y deducciones reflexivas que resultado de investigaciones empíricas. De dichas leyes se puede mencionar su famosa Ley de los tres estadios la cual supone que la mente del hombre, todas las ramas del conocimiento, así como la historia del mundo,  pasaban por los siguientes tres estadios.

1. El estadio teológico, en el que se busca la naturaleza esencial de las cosas, su origen y su propósito.
2. El estadio metafísico, el cual es un estadio transitorio en el que las fuerzas abstractas sustituyen a los seres sobrenaturales en la explicación de los orígenes y los propósitos de las cosas en el mundo.
3. Por último el estadio positivista, donde se abandona toda idea no científica para centrarse en conocer los fenómenos en sí, las relaciones entre ellos y las leyes que los gobiernan.

Como ya se ha mencionado con anterioridad, Comte trató de establecer postulados para la sociología, al estilo de los de la Física, por lo mismo, tomó de esta ciencia términos que intentó aplicar a sus teorizaciones sociales; dos de las principales aportaciones de su sociología se refieren a lo que él llamó  la estática social  y  la dinámica social. La primera la definía como “las leyes que rigen la acción y la reacción de las partes del sistema social”, en tanto que la segunda “tenía como objeto el estudio de las leyes de sucesión de los fenómenos sociales, bajo la premisa de que la sociedad se encuentra siempre en proceso de cambio ordenado de acuerdo con las leyes sociales”. Como ya se dijo, Comte nunca realizó investigación empírica y sus teorías construidas a partir de sus propias reflexiones concebían una sociedad utópica de comportamiento ideal, es decir un mundo social irreal.

Pese a que las teorías de Comte no tuvieron sustento científico, sirvieron de punto de referencia para que otros sociólogos desarrollaran verdaderas leyes para la nueva disciplina. Uno de ellos, fue Emile Durkheim (1900-1973), aunque este estudioso le dio mayor reconocimiento a los trabajos de Saint Simon que a los de Comte.

        Preocupado por el efecto que las grandes estructuras sociales y de la sociedad misma sobre la mente y las acciones de los individuos, Durkheim, realizó grandes aportaciones al desarrollo de la teoría de la estructura-funcional, la cual se enfoca en el análisis de las estructuras sociales y la cultura. De esta forma fue como la Sociología se puso en camino a posicionarse como una ciencia social.

        Sin embargo, como toda disciplina en sus inicios, la Sociología tuvo un fuerte rechazo por parte de las ciencias ya reconocidas, de entre ellas se pueden mencionar a  la filosofía y a la psicología ya que los estudiosos de estas ramas del saber presumían que los conocimientos que pretendía cubrir la nueva disciplina formaban parte del campo de estudio de las primeras. Por lo mismo, Durkheim dedicó su tiempo a los planteamientos positivistas de la sociología, a la misma vez que intentaba desligarla por completo de su ciencia raíz la filosofía y de la psicología afirmando que los hechos que estudiaba ésta eran fenómenos básicamente heredados por los hombres, como los instintos humanos.

        Para Durkheim, la sociología debía enfocarse en el estudio de los hechos sociales, estudiándolos desde una perspectiva empírica. Para lograrlo, estableció que los hechos sociales debían ser tratados como cosas, distinguiendo entre dos tipos de hecho social: los de “tipo material”, aquellos que son externos al sujeto y que pueden materializarse como es el caso de la sociedad y las estructuras que en ella se forman como la iglesia o el estado y los de “tipo inmaterial” que son internos al sujetos, como la moral  y la conciencia colectiva, pero que debían estudiarse como si fuesen externos y coercitivos con respecto a otros procesos mentales de los individuos (fenómenos psicológicos). Ambos niveles de realidad social constituyeron las bases del funcionalismo estructural, que contempla a la sociedad como un ser constituidos por órganos o estructuras sociales que se formaban por diversas causas, para realizar distintas funciones al cuerpo que constituían.

        Su análisis se basó en la caracterización de la división del trabajo para dos tipos ideales de sociedades, las cuales usaba como referencia de comparación.

La sociedad primitiva determinada por su “solidaridad mecánica”,  con pocos individuos como miembros, tenía una estructura social con muy poca división del trabajo, para los hombres la caza y la defensa de los grupos familiares, mientras que para las mujeres era la recolección de alimentos y la maternidad. En este tipo de sociedades, lo que mantenía unidos a sus miembros era la similitud en aptitudes y conocimientos, donde cada individuo podía realizar varias tareas y compartía grandes responsabilidades con el clan. Por otro lado, estos grupos sociales se caracterizaban por ejercer un derecho represivo ya que todos sus miembros  defendían firmemente una moral común y castigaban severamente a los transgresores a las normas establecidas. El poder de la justicia, radicaba en todos los elementos de la sociedad (las masas).

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