Politica Social

UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE SINALOA

FACULTAD DE TRABAJO SOCIAL MOCHIS

LICENCIATURA EN TRABAJO SOCIAL

Tema: ESTRUCTURA ÉTICA DE LA ACIÒN SOCIAL

Alumna: Torres Robles Greyci Dolores

Profesora: Sánchez María Lourdes

Grupo: 2-1

Los Mochis, Sinaloa; a 28 de mayo de 2013

ESTRUCTURA ÉTICA DE LA ACIÒN SOCIAL

Ética

El fin de la ética es discernir y realizar el bien. Trata, pues, sobre lo bien, el mal el deber moral en las acciones humanas. Más concretamente sobre los principios y valores morales desde lo que se puede juzgar la conducta buena o mala. La ética designa también el conjunto de principios y normas que gobiernan la conducta individual y social en la medida que obligan y orientan a personas y grupos a conducirse de conformidad con ellos.

La ética no se refiere a la realidad existente, lo que es sino a lo que implica, por tanto autonomía respecto a la realidad dada, un juicio sobre ella y un potencial de actuar para cambiar una realidad y una conducta dadas a partir del ideal moral lo que debe ser. Autonomía relativa, sin embargo como advierte aviesamente Ambrose Bierce en su diccionario del diablo al definir <<moral>> como <<conforme a la norma local y mutable de lo recto o lo correcto. Poseyendo la propiedad del oportuno o conveniente>>.

La ética tiene una doble e irreductible, potencialidad. Negativa, establece límites y restricciones en la vida personal o acción social en función a lo que consideramos malo, incorrecto o indeseable: Engañar a otro o actuar en la IS en beneficio propio. No es ético. Positiva, orienta a la conducta y al desarrollo personal o social en la dirección de lo que se juzga bueno, correcto o deseable. No solo no debo engañar al otro o actuar socialmente en función de mis necesidades, si no que debo ser honesto y generoso con el otro y ayudarle a satisfacer sus legítimas necesidades y tratar de hacer avanzar la justicia de la sociedad común.

Este breve apunte sobre la ética nos permite avanzar una idea inicial de la ética del IS en un doble nivel abstracto o general y concreto o personal. A nivel abstracto la ética de la IS estará constituida por aquellos principios y valores que como atributos deseables o ideales de la vida personal y social, son perseguidos en la acción social, y por aquellos que, como características humanamente indeseables, se tratara de evitar o minimizar.

ESTRUCTURA Y DINÀMICA DE LA ACCION MORAL: VECTORES ÈTICOS Y PROCESO.

El proceder moral se construye sobre seis ejes o vectores que precisarán, son: Libertad, intencionalidad, el otro, conciencia moral, responsabilidad y contenido.

Libertad la base del acto moral. Un acto es moral, y genera responsabilidad en la medida en que e sujeto tiene libertad para elegir, decidir y actuar. La moral es pues, el peaje por el uso que hacemos de la libertad que poseemos.

Las condiciones de libertad en que se realizan las acciones cualifican la responsabilidad ética, no la anulan: La valoración final dependerá de los grados de libertad, que conserve el interventor y, sobre todo, del uso que haga de ellos.

En cuanto a la evaluación moral del mérito de la IS contribuye a aumentar los grados de libertad de esos colectivos, esto sería uno de los criterios base para evaluar el éxito moral de la acción social.

Intencionalidad nuestras acciones no son casuales y erráticas, si no, en general deliberadas, con intención y propósito. Es la suma de intencionalidad, libertad y poder lo que otorga responsabilidad a las acciones humanas, personales o profesionales. En la IS suele existir una clara intención de ayudar.

La otra exclusión moral e igualdad moral e igualdad. Como intencional que es, el acto moral tiene siempre una dirección, un destinatario, siquiera potencial, << el otro >>. Aunque asediada por fuertes corrientes individuales y utilitaristas, la alteridad sigue siendo la clave del arco de bóveda moral. Algo especialmente cierto en la IS, cuya misión ética, consiste, en buena medida, en reconocer al otro, incrementando su visibilidad social.

Igualdad relacional y reconocimiento de la diferencia. Otro aspecto importante del acto moral es la relación entre interventor y destinatario de la acción social. Lo enfocaremos ahora desde el valor justicia considerando la cualidad de igualdad de esa relación y la correspondiente deseabilidad planteada por los dos polos extremos- igualitarios y diferencial- en esa cualidad.

Si nuestro comportamiento relacional estuviera solo dictado por el principio de escrita igualdad, habremos de tratar a todos por igual: las relaciones y los intercambios resultantes serian estrictamente simétricos.

He aquí algunas pistas generales, que no soluciones definidas y definitivas, para encarar el tema. Uno el ideal igualita torio se refiere a la categoría moral de persona como semejante, no a las diferencias como persona psicológica, rol social o productor económico que pueden y deben ser tenidas en cuenta. Dos diferencia, no implica necesariamente desigualdad. Tres, el interventor debe ser particularmente cuidadoso de no hacer de su actividad profesional vehículo de discriminación social, algo que puede suceder, por ejemplo, cuando usa etiquetas diagnósticas socialmente estigmatizadoras. Cuatro, trascendiendo el igualitarismo literal, algunos proponen tratar mejor al mas débil y desfavorecido. Cinco y reiterando la radical alter natividad de lo moral en a acción humana, las diferencias y desigualdades son la realidad de la que partimos: la igualdad en algún aspecto relevante, el ideal al que aspiramos: Lo que debe ser. Y seis perseguir la igualdad en que algunos aspectos supone, según parece, aceptar la desigualdad en otros: no existe un único, sino varios, concepteados de justicia o igualdad.

Conciencia moral. La instancia que permite distinguir lo bueno de lo malo y alcanzar conclusiones operativas en el terreno ético.

Responsabilidad. Resultado según se ha dicho de intencionalidad, libertad y poder. El interventor social es responsable del uso que hace de su libertad de elegir y actuar, del poder profesional que la sociedad ha depositado en sus manos y de las propias intenciones

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