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Relación Hombre-Mujer en la Antigua Grecia y Clitemnestra Como Rebelde Social


Enviado por   •  5 de Diciembre de 2015  •  Ensayos  •  1.980 Palabras (8 Páginas)  •  318 Visitas

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Eddie G. Meléndez Santos

801-10-4388

Prof. Marc Jean Bernard

HUMA-3101-001

Relación Hombre-Mujer en la Antigua Grecia y Clitemnestra Como Rebelde Social

En la antigua Grecia, los valores y funciones comunes en la mujer eran la obediencia, la fidelidad, el manejo del hogar, el uso de textiles, la práctica de hechizos y, el uso y distribución de las hierbas y drogas. La mujer que interviniera en los roles masculinos y abandonara los valores tradicionales, era considerada una “mala mujer”, según lo estipulado por la sociedad. En una sociedad patriarcal donde los roles de género están establecidos por los hombres es difícil que una mujer pueda hacer un cambio sin ser juzgada y alienada.

Los hombres, claro está, ejercen la política, el poder económico, el poder militar y son los jefes del hogar. Algún cambio de rol es considerado una amenaza para el estado. La relación hombre-mujer la podemos observar en los personajes de la trilogía griega, Agamenón y Clitemnestra. Clitemnestra ha sido considerada uno de los personajes más importantes de esta trilogía por asumir el rol masculino o la masculinización.

En la Ilíada, Clitemnestra, durante la guerra de Troya y en la ausencia de Agamenón, contrae una relación con el primo de su marido, Egisto, y asume el rol político y económico durante su partida. Luego con el regreso de Agamenón, que tarda 10 años, la pareja extramatrimonial planea su muerte como también la de su concubina. Al lograr su cometido, Clitemnestra y Egisto son juzgados ante sus hijos, la sociedad y el consejo de ancianos. En esta situación, Clitemnestra rompe el valor tradicional de la mujer de mantener su fidelidad en el matrimonio y rompe con el orden social de que la mujer tiene que ser dócil y obediente.

Según Anne Carson en su artículo “Putting Her in Her Place: Woman, Dirt, and Desire,” la noción patriarcal se basa en que el hombre es el único que tiene auto-control y resistencia ante excesos y como la mujer no posee tales atributos hay que someterla ante la obediencia mediante el control. Esto establece una contradicción, ya que una mujer que no puede controlarse, ¿como controlara su apetito sexual? Sin embargo se espera que como una “buena mujer”, Clitemnestra cumpla con ser una esposa leal y honesta.

Según ideas sobre el adulterio en la antigua Grecia, la liberación sexual en las mujeres podría llevarlas hasta cometer asesinatos. En el artículo ‘Towards Greek Tragedy’, Vickers menciona que “El adulterio contaminaría tanto la cama matrimonial que cualquier persona que la habitara le podría quebrantar la moral y manchar su espíritu.” Por lo que se creía que la liberación sexual de parte de Clitemnestra,  la llevo a asesinar a su marido, ya que al incurrir una relación extramatrimonial, perdería la responsabilidad moral que la inhibiría de cometer dicho acto. Claro, esto sin incluir que Agamenón sacrifico a su hija, Ifigenia, para asegurar su victoria en la guerra. Se puede observar que no importa si Clitemnestra tuvo una razón o no para cometer asesinato, la inmoralidad y descontrol de la mujer según la sociedad patriarcal eran los factores más importantes a considerarse.

Según Vicker: “Otro código común y antiguo en la sociedad griega era que una mujer no podía tomar una venganza de sangre fría y que solo los hombres tenían ese derecho”. Al Clitemnestra llevar a cabo su venganza estaba asumiendo actitudes y roles de parte del género masculino. Otra evidencia que comprueba la masculinización de Clitemnestra es que en la posición de ser una mujer aristocrática no podía salir de su casa sola ni podía poseer conocimiento militar. Victoria Wohl, autora del libro, ‘Intimate Commerce: Exchange, Gender, and Subjectivity in Greek Tragedy’, comenta que  su conocimiento se podría comparar con el conocimiento de un comandante naval, confirmándose otra vez  la noción de masculinización.

Su actitud masculina llego a producir histeria y horror en esta sociedad antigua. Parte de esta actitud se proyectó cuando Clitemnestra deja a Egisto y Agamenón políticamente inmóviles, asume el poder por completo y rompe los límites establecidos en la antigua sociedad griega. Para los griegos, la posición de Clitemnestra reta el lugar establecido para la mujer en la sociedad, quebranta la esfera femenina, y la amenaza con un gobierno femenino. En estos tiempos los griegos tenían miedo que este mito lleno de “horror” se propagara, ya que podría irrumpir con los roles de género establecidos. Según Froma I. Zeitlin en su trabajo, ‘The Dynamics of Misogyny’: “El rechazo de la mujer a su rol requerido y  subordinado, llevaría a la inevitable consecuencia de lo contrario: dominación total y ginocracia que en su extremo proyectaría la esclavitud masculina o la erradicación de todos los hombres. Esta imaginación nos proyecta dos alternativas jerárquicas: Que gobierne el hombre o que gobierne la mujer.”

Además de todo lo negativo de Clitemnestra, ella es considera una blasfema ya que al matar al jefe del hogar, no hay procreación y por lo tanto no existe el regalo de parte de los dioses de la fertilidad. Ella representa la perversión de la sociedad y la cultura en todos los niveles: público, privado y religioso. Su personaje trae todo los valores asociados de ser una “mala mujer” los que incluyen: sexualidad descontrolada, la amenaza de que el hombre no pudiera gobernar su familia y su casa, la apropiación del poder político, el derecho a participar de la venganza a sangre fría bajo sus propias manos y la dominación sexual según los roles establecidos. Esto nos confirma la noción de masculinización en el carácter y la personalidad de Clitemnestra. Ella representa la maldad, la pesadilla y el extremo de la ginocracia hecha realidad.

Del otro lado de la moneda, luego que Agamenón fuera asesinado, es transformado de Comandante de las Fuerzas Griegas en Troya a ser el símbolo de estabilidad política y social. Agamenón y Clitemnestra eran los polos opuestos en la sociedad. Clitemnestra representaba el desorden, la maldad y la inmoralidad y Agamenón representaba la justicia, el orden y moral de la sociedad. Agamenón representaba los valores patriarcales y Clitemnestra valores feministas imposibles de imaginar en la antigua sociedad griega. Así que Clitemnestra no solo era todo lo que se ha mencionado anteriormente sino que es la amenaza para este nuevo orden social. Esta imagen y separación de dos perspectivas tan distintas y tan opuestas es causado por el comienzo de la democracia ateniense. Grecia contemplaba un duelo clásico entre el héroe y la villana; entre el bien y el mal.

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