México

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En la política continua de los gobiernos de Juárez, Lerdo y Diaz, fueron el intento drástico por el desarrollo capitalista en México, aunque muy distintas en circunstancias drásticas: Lerdo y Juárez, fueron y gobernaron durante la época del “capitalismo libre”, mientras que Diaz en la era del imperialismo. El estado liberal oligárquico apoyo a los capitalistas tanto nacionales como extranjeros, con ello la apropiación de las tierras de los campesinos, así como de baldíos nacionales de los cuales obtuvieron acceso total a los depósitos minerales de los cuales formaron una extensa red de ferrocarriles que ligara las haciendas, plantaciones y centros mineros con los puntos de exportacion con el desarrollo por primera vez en México, con un mercado industrial y agrícola en el país.

En 1876 el general Porfirio Diaz, llega al poder mediante el plan de Tuxtepec donde desconoce el gobierno de lerdo de tejada.

El porfiriato fue de 1876 a 1911, en el cual gobernó 7 veces.

México basa en ese tiempo su economía en la agricultura y la industria de inversión.

Se impulsa el ferrocarril.

Se introducen los servicios de electricidad, teléfono, agua potable, telégrafo y tranvía eléctrico.

Don Porfirio se rodea de gente culta los llamados científicos.

Justo cierra- crea la universidad nacional de México la cual cerro durante los conflictos anteriores.

Gabino barreda- crea la escuela nacional preparatoria

Don Porfirio Diaz solo se interesa en las clases altas y extranjeras descuidando y abandonando a la clase obrera campesina.  

El hecho conocido para la revolución mexicana de 1910 fue la sucesión presidencial de ese mismo año, en la que las clases y los grupos dominantes cayeron en una crisis de autor representación (descontento social).

De tal forma que la crisis se volviera social y a la vista de todos, que transcendieran los círculos íntimos de las oligarquías en el poder, hizo que sus repercusiones se extendieran a todos los niveles de la sociedad, por eso francisco Bulnes pudo decir: "Los revolucionarios de 1910 se jactaran de haber derrocado la dictadura del general Diaz, para lanzar luz sobre claridades, las clases sociales perdió virilidad, al igual que la soberanía, sin él cual, no pudo haber gobierno”, el conflicto surgió en la esfera del poder y claro que con su mar de fondo, a la vuelta del siglo , la economía mexicana tuvo que encarar diferentes y serias dificultades, con la depresión internacional de 1900 a 1901 que puso fin a la época dorada de las exportaciones, el comercio mundial cambio por aquellos años en su composición y en su dinámica, en 1905 se reajusto la política monetaria para buscar la estabilidad mediante su vinculación al patrón del oro, con ello se terminó con el proteccionismo de facto que había prevalecido durante los anteriores 30 años, por la constante depreciación de la plata , esto hizo que los hacendarios con sus ventajas monopolísticas desaparecieran del mercado doméstico, en la crisis internacional de 1906 a 1907 repercutió en México en la quiebra de un sinnúmero de pequeños fabricantes en protestas obreras y en enfrentamientos entre grupos financieros capitalinos.  

En fin, la primera década del siglo presenció el agotamiento del modelo minero-exportador; fórmula que garantizaba los intereses del capital extranjero, de una relativamente débil y muy fraccionada burguesía nativa, y de los grandes hacendados. Puesto que la dictadura se mostró incapaz de encontrar una salida a la crisis, el bloque dominante comenzó a debilitarse, hasta desintegrarse por completo ante la embestida de la insurrección popular armada. Pero el movimiento revolucionario no sólo liquidó a los gobiernos de Díaz, Madero y Huerta, sino que destruyó al Estado liberal-oligárquico en el año de 1914.

Hay quienes consideran a los periodistas opositores al régimen de Porfirio Díaz como precursores ideológicos de la revolución de 1910; pero a más de ser un grupo muy heterogéneo es a estos últimos, pues los primeros eran reformistas.

Con la entrevista de 1908 entre Porfirio Diaz y James Creelman.

Se le conoce a este hecho como entrevista Díaz - Creelman a la entrevista concedida por el presidente Porfirio Díaz al periodista estadounidense James Creelman, publicada en marzo de 1908 y que fue el parteaguas que detonó la efervescencia política con miras a las elecciones de 1910.

En efecto, de una parte, había escritores como Manuel Calero, Emilio Vázquez, Francisco Madero y Luis Cabrera que se interesaban por una renovación política. Ellos fueron los teóricos de la reforma política y les ex- ponentes de los intereses de los terratenientes, industriales y banqueros inconformes. Voceros de grupos oligarcas regionales que pugnaban por mayor relevancia dentro del bloque en el poder. No obstante, sería un error considerar a la reforma política como la expresión directa de las clases y fracciones de clase referidas. De hecho, se trataba de una ideología formulada por una inteligentísima urbana, si bien con su óptica centrada en ciertas concepciones e intereses políticos. De otra parte, estaban periodistas como Ricardo Flores Magón, Librado Rivera, Antonio Díaz Soto y Gama, Juana B. Gutiérrez y muchos más, que pugnaban por los intereses de los obreros y de los campesinos.

En 1905 surge el partido el partido liberal mexicano que vela por los campesinos y obreros.  Con ello también surgen periódicos anti porfiristas, como “regeneración y el hijo del ahuizote”.

En los primeros años del movimiento precursor (1900-1903), la exigencia de la democracia liberal había hecho coincidir a oposicionistas de clases distintas con fines comunes: la caída o modificación del gobierno de Díaz, la Re institución de las Leyes de Reforma y de la democracia formal, y una modesta reforma socio-económica.

Sin embargo, una fase más radical comenzó con la fundación del Partido Liberal Mexicano (1905), con la publicación de su programa (1906) y con organización de las huelgas e insurrecciones que inspiró (1906-1908). Ello contribuyó a deslindar los campos en pugna existentes entre las dos corrientes centrales que conformaban la oposición.

Consciente Porfirio Díaz de la naciente oposición política, buscó acabar con el movimiento ordenando el arresto de algunos participantes y clausurando los clubes liberales en todo el país. Sin embargo, la persecución de los liberales sirvió para acelerar más que para impedir la radicalización del movimiento. De esta suerte, las ideas moderadas de Arriaga fueron dejando espacio, en las páginas de Regeneración, a las posiciones radicales de Ricardo Flores Magón. Si en el año de 1900 los liberales se habían declarado defensores de la Constitución de 1857, en 1901 dirigían un ataque directo a Porfirio Díaz; en 1902 introducían en sus planteamientos el problema agrario y la reforma social, y en 1903 comenzaban a contemplar planes revolucionarios.

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