Cambios en el mundo indígena tras la conquista

CURSO: HISTORIA DEL PERU

CASO : Cambios en el mundo indígena tras la conquista

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Queridos nietos:

Me encuentro en 1580 y les escribo esta carta con la única finalidad de hacerles saber lo que realmente sucedió en nuestros territorios cuando llegaron unos hombres de vestimenta medio rara, con barbas y unos objetos metálicos en la cabeza. Hoy en día sabemos que son españoles y que han hecho todo en base a su voluntad. En realidad ya sabemos que dependen de su rey, el mismo que vive en un país lejano llamado España. A los tres años de haber llegado a nuestro territorio, decidieron que el lugar en donde establecerían su centro de gobierno sería la ciudad de Lima, fundada por un tal Pizarro. Al parecer esto lo hicieron básicamente por temas estratégicos, por la salida al mar y quizás por el clima al que ellos están acostumbrados. Al parecer el clima de nuestra sierra les afecta, puesto que estuvieron al principio en el Cuzco. Han creado una ciudad casi urbanizada en Lima, con calles divididas de manera cuadricular, las mismas que desembocan en una plaza principal. Han construido una enorme catedral y palacios para la sede de gobierno, así como la sede de justicia. En el Cuzco solo dejaron a un Inca designado (pero solo como títere) llamado Manco. Sin embargo este empezó a perder su dominio y “autoridad” pues fue víctima de las burlas y abusos de los pobladores españoles que cada vez eran más numerosos, perdiéndole completamente el respeto. Los indígenas eran obligados a trabajar para el beneficio de los españoles, les robaban sus pertenencias y abusaban de sus mujeres. Lamentablemente los hermanos Pizarro que finalmente se quedaron a cargo del Cuzco, cometían una serie de barbaridades, lo que provocó que Manco se rebelara y agrupara un ejército de más de cien mil hombres para poder derrotar a los españoles, sin embargo, no llegaron a lograr su cometido puesto que los españoles contaban también con aliados indígenas, que sumaban gran numero.

Durante los años siguientes se formaron muchas revueltas civiles del Perú hispano, debido a las leyes que dictó el rey de España, entre ellas la abolición de las encomiendas, problema que ellos mismos generaron con la creación de dicho encargo. Al enterarse la corona de los tremendos abusos que esta gente estaba cometiendo decidieron extinguir esta práctica. Durante la conquista, la corona española creó las encomiendas para favorecer a los conquistadores del nuevo mundo. ¿De qué se trata? Pues no es otra cosa que el cobro de tributos a nosotros los indios, supuestamente a cambio de su evangelización y cuidado. Sin embargo, el constante abuso hacia nosotros (nos sacan el máximo provecho como mano de obra) hace presagiar la extinción de toda nuestra comunidad. El hallazgo de la mina de Potosí, ha hecho más notorio el abuso y la humillación al indígena, pues ahora muchos viven en campamentos precarios, tienen que soportar el clima extremo de la zona, su alimentación es paupérrima y el trabajo es forzado. En consecuencia, hay muchas bajas, demográficamente hablando, la población ha disminuido notablemente.  Los encomenderos han saqueado todo lo que pudieron, y esta fiebre por los minerales ha atraído a más europeos a nuestro país y siguen saqueando todo lo que pueden.

El cambio radical de nuestra forma de vivir a causa de los invasores extranjeros ha sido el acontecimiento que ha marcado nuestra sociedad andina, nuestras costumbres fueron extirpadas, cambiadas obligatoriamente mediante un régimen de violencia y caos mediante la fachada de evangelizar a los indios que no comprendíamos de que se trataba; cuando todos nosotros rendíamos obediencia al Curaca, mediante el trabajo recíproco, la redistribución que hacía el Curaca con las distintas comunidades indígenas relacionadas por parentesco, sucede esta alteración

en nuestra historia, de este modo los Curacas cambian de funciones por orden de los españoles y se vuelven los mediadores entre los encomenderos y nosotros los indios. Su función principal ahora es supervisar  y administrar a los indios, esto facilita la recolección de productos y entrega de tributos así como la designación de trabajadores a los encomenderos. Esto aparentemente le ha dado más poder a los Curacas, porque hacen sus negociaciones privadas. Antes el Curaca era visto como una autoridad y hoy en día es visto como un patrón. Queridos nietos, Se están cometiendo muchos abusos frente a los ojos de los Curacas y ellos no hacen nada al respecto.

Algo muy importante que no deben olvidar, es que con la llegada de los españoles llegaron también enfermedades que arrasaron con gran parte de nuestra población. Yo perdí a muchos conocidos y familiares, para mi suerte no me afectaron estas nuevas enfermedades, de lo contrario no podría contarles estos hechos. Lamentablemente esta  disminución también tiene mucho que ver con los brutales tratos de los encomenderos, como ya les había comentado,  que en confabulación con los curacas obligan a la población a trabajar de manera inhumana, pero solo con eso podíamos cubrir los tributos que exigían. Esto ha ocasionado que la gente que había sobrevivido a las pestes se vea en una situación tan abrumadora que muchos perdieron el interés por vivir. Supongo que la pérdida de la población en tan grande cantidad alarmó a la corona Española y por eso decidió eliminar el sistema de encomiendas. Claro está que los encomenderos no han cedido fácilmente a esta decisión y siguen maltratando a nuestro pueblo.

Ustedes querrán saber cómo nos evangelizaron los españoles, pues les cuento que al principio a los encomenderos no les importaba tanto que no aceptemos a su Dios, a ellos más les interesaba que se paguen tributos para su beneficio, eso se notaba porque eran  pocos los sacerdotes que se dedicaban a dar doctrina, pero a partir de 1550 luego de la supuesta separación de los encomenderos, los españoles pusieron mayor énfasis en la evangelización con un mayor número de sacerdotes, para impartir la doctrina y las nociones de la nueva fe, las que impartieron con la ayuda de intérpretes. Así nos fue más fácil de asimilar, pero esto no quiso decir que nuestras creencias ancestrales desaparecieran.

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