Con base al texto “crianza y discurso didácticos a los niños”.
azuyareTesis6 de Septiembre de 2013
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Con base al texto “crianza y discurso didácticos a los niños”, de mendieta:
Distinguir las principales características de los discursos o consejos que se daban a los niños y a los jóvenes.
A los niños recién nacidos y pequeñitos los pongan al frío, porque l A los niños recién nacidos y pequeñitos los pongan al frío, porque la naturaleza de los niños, por el gran calor con el que nacen es apta y dispuesta para sufrir frío, con el cual se le comienzan a apretar las carnes y se hacen recios de complexión, y más aparejados y fuertes para sufrir trabajos.
Bañar las madres desde que nacen a sus niños chiquitos que traen a cuestas, en los arroyos, ríos o fuentes, luego en amaneciendo. Y esto no mejor en verano, si no mucho mejor en invierno y en tierras frigidísimas
Platica o exhortación que hacia un padre a su hijo.
Vive hijo, con tiento y encomiéndate al Dios que te crío, que te ayude, pues es tu padre que te ama más que yo. Sírvele con amor y hacerte ha mercedes y librarte ha de peligros. A la imagen de Dios y a sus cosas ten mucha reverencia, y ora delante de él devotamente y aparéjate en sus fiestas.
Reverencia y saluda a los mayores, no olvidando a los menores. A todos honra y mas a tus padres a los cuales debes obediencia, servicio y reverencia, el hijo que esto no hace no será bien logrado. Ama y honra a todos y vivirás en paz y alegría.
No sigas a los locos desatinados que ni acatan a padre ni reverencian a madre, mas como animales dejan en el camino derecho y como tales sin razón ni doctrina oyen ni se dan nada por corrección.
Guarda la vista por dónde fueres; no vayas haciendo gestos ni trabes a otro de la mano.
Si te quieres casar danos primero parte de ello y no te través a hacerlo sin nosotros.
Trabaja de tus manos y como de lo que trabajares y vivirás con descanso.
No murmures ni digas mal de alguno: calla, hijo lo que oyeras y siendo bueno lo hubieres de contar no añadas ni pongas algo de tu cabeza.
No mientas ni te des a parlerías.
No revuelvas a nadie ni siembres discordias entre los que tienen amistada y paz y viven y comen juntos y se visitan.
No tengas que ver con mujer alguna si no con la tuya propia.
Vive limpiamente porque no se vive esta vida 2 veces y contrabajo se pasa y todo se acaba y fenece.
De otra exhortación que hacia un indio labrador a su hijo ya casado
No desmayes ni tengas pereza, porque si eres perezoso y negligente ¿cómo vivirás con otro? ¿Qué será de tu mujer y de tus hijos?
Haz hijo a tu mujer tener cuidado de lo que pertenece a su oficio y de lo que debe hacer dentro de su casa y avisa a tus hijos de lo que les conviene.
Ten un buen cuidado de tu mujer y casa, trabaja de tener con que convidar y consolar a tus parientes y a los que vinieren a tu casa, porque los puedas recibir con algo de tu pobreza y conozcan la gracia y agradezcan el trabajo y correspondan con lo semejante y te consuelen.
De otra exhortación que una madre hizo a su hija
Las cosas de la casa ponlas como conviene, apartadas cada cual en su lugar y no como quiera mal puestas y no dejes de caer algo de las manos en presencia de otros.
Por todos los beneficios no te olvides de dar gracias a los dioses.
Guárdate de darte al sueño o a la cama o a la pereza.
No sigas la sombra o el frescor ni el descanso que acarrean las malas costumbres y enseñan regalo, ocio y vicio.
Piensa y obra bien en todo tiempo y lugar: que estés o levantada, queda o andando, haz lo que debes, así para servir a los dioses como para ayudar a los tuyos.
Si fueres llamada no aguardes a la 2da o 3ra vez si no acude presto a lo que mandan tus padres porque no les des pena y te hayan
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