Ficha El Problema Del Renacimiento

Lagos Nova, Alicia Constanza

Universidad de Concepción

Asignatura: Problemáticas del Mundo Moderno

Curso: 3° / Académico: 2014

Profesor: José Manuel Ventura Rojas

Johan Huizinga: "El Problema del Renacimiento" en Fondo de Cultura Económica (comp.): El concepto de la Historia y otros ensayos, (Editorial), México, 1977, pp. 101.155.

RESUMEN

Desde el punto de vista soñador y poético por parte de aquellos casi amantes del Renacimiento contrastado por la objetividad de aquel (o aquellos) que ven de manera más agudizada aquella corriente tan controversial, es como Johan Huizinga, historiador holandés que vivió entre 1872 y 1945, y se dedicó a realizar investigaciones en el campo de la Historia Medieval, la Historia de las Mentalidades (rama de la Historia aún nueva para su época) la Lingüística, entre otras, nos introduce a su reflexión sobre lo qué fue y no fue el Renacimiento. Describe el Renacimiento desde distintos ángulos, mostrando distintos autores que versaban ya desde la época sobre el concepto, véase Maquiavelo, Lorenzo Valla, Erasmo, y es a partir de esto que el autor va desglosando distintas posturas e ideas, criticándolas mostrando sus falencias, pero a la vez algunos aciertos de las mismas, a través de diversas fuentes y ejemplos. Pero no sólo se enfoca en hacer distinción de aquellas ideas erróneas y aquellas acertadas que se tenían, o en el caso de muchos aún se tengan sobre esta corriente, también se avoca a explicar como el concepto de Renacimiento va evolucionando a través del tiempo. Mostrando cómo va este concepto llenado desde una mirada subjetiva de idea cultural, hasta otra objetiva como idea científica.

Muestra a autores como Vasari como uno de los primeros en ver al Renacimiento como un hecho histórico, pero a la vez dice que si bien fue uno de los primeros en dilucidar esto, no dice nada nuevo en sus escritos sobre este concepto. Hace también una revisión sobre el trabajo de Voltaire, un poco sobre Bayle y Gothe. Demuestra gran interés en la obra de Jacob Burckhardt, dedicándole varias páginas de su obra con la correspondiente descripción de los capítulos. Aunque al final también termina por demostrar las falencias de su trabajo. Comienza así también un estudio más profundo de lo que significa el concepto, llegando a un punto de que desmiente el que “Renacimiento” sea un concepto estático en el tiempo, dentro sólo de un delimitado periodo, sino que muestra lo dinámico que era el concepto, y como las primeras huellas de su aparición se dan dentro de la Edad Media, a diferencia de lo que se tiene pensado y enseñado comúnmente.

De manera tal maneja Huizinga la información, tal es la manera en que va desmenuzando los aciertos y errores dentro de los distintos autores, teorías e ideologías para dar así una mirada no sólo más objetiva sino que también una mirada de desmitificación sobre lo que fue el renacimiento con todo y las raíces de éste. Por lo cual, dentro de este presente trabajo se tratara de dilucidar y aclarar algunas de las principales y secundarias ideas que el autor expone en su trabajo y terminar por ofrecer una reflexión y crítica sobre el texto y lo expuesto.

DESARROLLO DE IDEAS PRINCIPALES Y SECUNDARIAS

Lo que principalmente se propone el autor dentro de la primera parte de su texto es el hecho de esclarecer lo que realmente sería el “Renacimiento”, más allá de lo que tradicionalmente se entiende por el concepto. Para lo cual hace primeramente una aclaración de lo que concepto sería según la tradición nos ha dicho que es, así como un reconocimiento a su nombre, un renacer del espíritu después de un periodo demasiado extenso de oscurantismo, caracterizándose por un renacer de la cultura volviendo para ello la mirada hacia la cultura grecolatina, que se convertiría en la fuente de saber y belleza; mientras que el Renacimiento en lo que es práctica (es decir más allá del concepto) se caracterizaba por el paganismo, el individualismo, la distancia cultura con la edad Media, el centralismo en la cultura clásica y una suerte de neblina con respecto a los limites en los cuales comenzaría esta corriente denominada Renacimiento. Por otro lado, hace ver distintos aspectos no consensuados sobre el renacimiento, dentro de los cuales está su periodización, la influencia que tuvo la antigüedad en su desarrollo, su relación con el humanismo y la vaguedad que adolece su concepto. Además hace ver que los problemas comunes de especulaciones erróneas, o de plano errores de los autores, es porque su estudio y definición parte desde la Historia Cultural, aparte de lo que es la Historia General.

Bajo la estima de que con sus letras y escritos renacería desde las secas, adormecidas y adoloridas cenizas aquel espíritu lleno de luz y armonía que gozaba Europa, y que fue perdida durante los largos y duraderos años de la oscura Edad Media, es que se erigen los Humanistas. Éstos fueron en sí un grupo de intelectuales, que guiándose bajo la estela de los autores de la Antigüedad Clásica, desarrollaron y cultivaron las conocidas bonnae literae, y de esta manera propiciaron el pensamiento moderno.

Ya llegados a este punto, podemos ver como el autor deja entre ver que dentro concepto de Renacimiento que tradicionalmente se enseña se pone como verdad el hecho de que llegados a los limites finales de la Edad Media sólo existía un mundo de oscuridad y barbarie, que sólo con la llegada de los estudiosos venidos desde el Imperio Bizantino, que vale decir se encontraba en ese momento en su peor época debido a las invasiones que eran producidas por parte de los turcos Otomanos, y siendo éstos quienes comenzaron a difundir sus conocimientos, y los europeos a imitarla, propiciando así la salida de esa oscuridad y barbarie que según la tradición envolvía a la Edad Media. Debido a esto es que a lo largo y extenso del ensayo aquí tratado y estudiado el autor fue complejizado, criticado, rebatido y modificado esta idea.

Para lograr esclarecer el concepto de Renacimiento y las distintas ideas concebidas sobre el concepto, el autor va mostrando distintos otros autores, entre los que podemos encontrar a: Erasmo de Rotterdam, Lorenzo Valla, Dante Alighieri, Giorgio Vasari, Voltaire, Conde de Libri, Honoré de Balzac, Jules Michelet. Así, para lograr decir que existe una historicidad sobre el término, debemos aclarar que ha sido trabajado por diversos intelectuales, entre los cuales no son todos

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