Historia Arte

Palacio Médicci-Riccardi

Florencia.

Fue encargado por Cosme el Viejo a Michelozzo, que inició su construcción en 1444. Posteriormente los Médicis lo vendieron a la familia Riccardi, que realizó algunas ampliaciones.

Michelozzo (1396-1472) fue discípulo de Brunelleschi y su obra principal fue éste palacio que se configuraría como el arquetipo de palacio florentino. Se inspiró en los palacios-fortaleza medievales de Florencia, pero modificó por completo su carácter cerrado y defensivo, creando un palacio abierto a la ciudad.

Sus rasgos esenciales constituyen el palacio renacentista florentino:

Planta cuadrada.

Tres pisos claramente diferenciados, el inferior con paramento almohadillado "a la rústica"

Distribución rítmica de ventanas bíforas en los pisos superiores.

Remate superior con cornisa en voladizo muy acentuado.

Patio interior (o cortile) con arquerías, como espacio más representativo del palacio.

La fachada está dividida en tres pisos mediante el tratamiento del aparejo del muro. Hay una gradación del sillar almohadillado y rústico en la parte inferior que evoluciona a un almohadillado mucho más suave y pulido en la parte superior. Cada piso se separa por medio de cornisas voladas.

La utilización del sillar almohadillado se utilizó como símbolo de riqueza y poder, ya que era muy costosos y difícil de hacer.

Fachada del Templo Malatestiano.

Rímini.

Hacia 1450 Sigismondo de Malatesta, señor de la ciudad de Rímini, encargó a Alberti la que sería su primera obra: la transformación de la iglesia gótica de San Francisco, que había de convertirse en su panteón funerario para él, su esposa Isotta y los humanistas de su corte.

Alberti encerró el edificio preexistente de planta rectangular y nave única rematado por una cabecera tripartita, con una estructura exterior de estilo renacentista, cuyos lados mayores estaban constituídos por series de hornacinas coronadas por arcos de medio punto y con sarcófagos en su interior. El hecho de que fuera a ser un panteón explica el que en el proyecto hubiera una cúpula en la parte de la cabecera, pues era una tipología que se asociaba tradicionalmente al tema funerario y al poder, sin embargo la falta de recursos económico impidió tanto que se desarrollare este prgograma como que se puediera finalizar el templo.

Pero la parte más interesante es la fachada, inconclusa, en la que sobre un podio que sigue el modelo de un arco de triunfo romano, cuyos laterales servirían para guardar los sepulcros de Sigismundo e Isotta. La referencia a la Antigüedad clásica resulta evidente, pero con un significado cristiano: el triunfo sobre la muerte.

Fachada de la Iglesia de Santa María Novella.

Florencia

Hacia 1456 Alberti recibió el encargo de terminar en Florencia la fachada de Santa María Novella, lo que le obligaba de nuevo a trabajar sobre un edificio gótico preexistente. Partiendo de lo ya construído (la parte inferior, con hornacinas bajo arcos apuntados), se inspiró en San Miniato al Monte, pues el románico florentino se consideraba también como una manifestación de lo clásico.

La nueva fachada estaba compuesta de un cuerpo superior rematado por un frontón, unido por aletones en forma de voluta a otro inferior más ancho, y decorados ambos con placas de mármol de diferentes colores en disposición geométrica.

Como elementos formales hay que destacar en el primer nivel el empleo de columnas enmarcando la puerta principal y en los extremos laterales. La puerta central en arco de medio punto está flanquedada por otras dos laterales más estrechas, y arcosóleos, que

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