Jorge Basadre
r9_alvarez15 de Octubre de 2013
5.548 Palabras (23 Páginas)508 Visitas
Vida y Obra de Jorge Basadre Grohman
Introducción
Jorge Basadre Grohman, considerado como el “historiador de la República”, es uno de los intelectuales peruanos más influyentes del siglo XX cuya trayectoria vital, jalonada de una serie de acontecimientos, tanto en los 38 campos de la historia, el derecho y la educación como en la bibliografía, la bibliotecología y la cultura en general, cubre sus 77 años de fecunda existencia.
Quienes lo conocieron y lo trataron cotidianamente resaltan entre los rasgos de su personalidad, su sencillez, sensibilidad y cierta timidez además de una escrupulosa disciplina y extremado perfeccionismo en el trabajo intelectual. Sobre esto último, especialmente sus editores, dan fe que un artículo o un libro suyo no podía salir de imprenta sino después de varias y azarosas pruebas: aun en el último momento se esperaban correcciones de él, dicen. Desde luego, ejemplos objetivos de ello existen y son los originales de sus obras, como los de su Historia de la República, que obran en la Biblioteca Nacional, donde se puede apreciar innumerables enmendaduras hechas de su puño y letra en cada tomo como testimonio de este singular rasgo de Basadre6. Además, él mismo aconsejaba a: “rumiar y rumiar siempre lo que se piensa y lo que se escribe”. En realidad sus virtudes como intelectual y su autoridad en los múltiples temas que abordó en especial sobre Historia, han sido ya de alguna manera comentadas por sus amigos y discípulos y están en los libros de homenaje a su memoria publicados en la última década del presente siglo.
Por su parte los bibliotecarios10 que compartieron tareas con Basadre recuerdan de él, entre otros atributos, su liderazgo y también su disciplina en el trabajo y entusiasmo por los proyectos nuevos o en curso; la fuerza psicológica de sus palabras congratulándolos por el cumplimiento de alguna meta particular, que era el mejor estímulo para continuar en la brega. Cuentan que en varias oportunidades una sorpresiva visita suya, además de las palabras de aliento, terminaba con un ágape.
Largo sería hablar sobre los aspectos que atañen al ámbito personal de Basadre independientemente de sus rigurosa disciplina para el trabajo intelectual; su carácter insobornable, por ejemplo; sobre sus gustos y pasatiempos, como el fútbol, al lado de su nieto; la música y el cine (sus amigos lo consideraban un cinéfilo); por su colección de estampillas formada de las innumerables cartas que recibía del extranjero, afición que trasmitirá luego a su primer nieto; y su predilección por la comida china delatada por otro de sus amigos, el poeta Antonio Cisneros. Así era el Basadre humano, con sus pasatiempos y gustos, a veces increíbles o especiales. Y todo ello encarnaba este prolífico hombre de notable sencillez, físicamente pequeño y hasta tímido como lo califica su gran amigo David
Sobrevilla, pero grande en pensamiento y acción; íntegro en actitud; profunda y sinceramente comprometido con este país “dulce y cruel”, no sólo de noches tenebrosas sino de auras, como pronunciara en uno de sus últimos y memorables discursos, cuando se refirió al Perú.
Nacimiento e infancia
Jorge Basadre Grohmann4 nace en los albores del siglo XX, el 12 de febrero de 1903, en la ciudad de Tacna, capital del departamento del mismo nombre, ubicado a 1 358 km. al sur de Lima, capital del Perú. Sus padres fueron Carlos Basadre y Forero, ingeniero de profesión y perteneciente a una familia de raigambre tacneña y raíces indígenas; y Olga Grohmann Butler, de una familia de ascendencia alemana e irlandesa afincada en esa ciudad durante el siglo XIX. Por entonces Tacna se encontraba ocupada por fuerzas militares chilenas como consecuencia de una guerra librada con el Perú entre 1879 y 1882. Tal situación habría influido en su personalidad, en la afirmación de su amor por la “Patria invisible” como la llamará él en razón al acendrado sentimiento de pertenencia forjada en forma silenciosa en los momentos de cautiverio. Esta coyuntura al mismo tiempo estimulará tempranamente su interés por conocer el pasado, los hechos que dieron lugar a la situación que vivía entonces su pueblo, escudriñando libros y documentos y escuchando los relatos diarios de sus padres sobre pasajes de la guerra en la que además habían participado heroicamente dos de sus parientes cercanos.
Jorge Basadre, el último de seis hermanos, pertenece a una familia vinculada a la historia5 y a la cultura en general. En sus primeros seis y decisivos años vivió en un ambiente que incitaba a la lectura gracias a la biblioteca paterna y a la biblioteca de su tío Modesto Basadre, un personaje interesado por la historia de su tierra y con obras escritas sobre ella, donde entablará amistad con los libros, esa que por forjarse tempranamente en la niñez y la adolescencia se hace duradera en el tiempo. Es así como el niño Basadre se convertirá en un lector precoz y voraz como lo han calificado varios de sus amigos y discípulos, relatado también por él en sus memorias.
Educación primaria y secundaria
Jorge Basadre estudia parte de la Educación Primaria en el Liceo Santa Rosa de Tacna, cuando esta ciudad se encontraba bajo control del ejército chileno y por lo mismo, dicho centro de estudios funcionaba de manera casi clandestina. En 1912 la familia Basadre Grohmann, presionada por los avatares de una ciudad cautiva y también por el inesperado fallecimiento del padre, Jorge Basadre y Forero, ocurrido tres años atrás, decide mudarse a la ciudad de Lima. Aquí el niño Jorge será matriculado en el Colegio Alemán, Deutsche Schule, institución privada sostenida por la colonia alemana y caracterizada por su férrea disciplina, donde concluye la educación primaria y cursa los tres primeros años -de los cuatro- de educación secundaria. El cuarto y último lo hace a los 15 años de edad en el Colegio Nacional Nuestra Señora Guadalupe, prestigioso centro de estudios de Lima, Alma Máter de una pléyade de intelectuales. De esta última etapa escolar Basadre recordará gratamente no sólo a sus maestros y camaradas sino un hecho que revela nítidamente su temprana inclinación por temas históricos: uno de sus profesores lo designa para que pronuncie a nombre de su promoción un discurso frente al monumento del héroe Francisco Bolognesi, sobre el significado del “7 de junio de 1879”, fecha histórica que recuerda a una de las batallas entre los ejércitos peruano y chileno y donde aquél tuvo una actuación ejemplar. En efecto, refiriéndose al texto que entonces escribiera a los 15 años de edad, Basadre dice en sus memorias: “Ahí está la primera muestra escrita de mis preocupaciones por la historia del Perú”.
Hasta aquí una versión somera sobre la infancia, la adolescencia y la educación básica de Jorge Basadre en la que se aprecia ya claros rasgos de su preferencia por la lectura y el estudio así como su inclinación por la historia. Sin embargo, otros hechos ocurridos en su adolescencia fuera del ámbito familiar y escolar también aportarán al afianzamiento de su vocación, como aquel incidente en la Biblioteca Nacional cuando no se le permitió ingresar a leer por no tener la edad suficiente (entonces él frisaba los 13 o 14 años y el reglamento exigía contar con 16 como mínimo). Mas este hecho lejos de desmoralizar y doblegar al investigador en ciernes lo obligará a buscar otras alternativas para lograr su cometido. Enterado del incidente el director de la institución, Luis Ulloa, le ofrecería un espacio en su propio despacho donde podía consultar los materiales de su interés y de paso conocer a las personalidades que solían visitar al aludido funcionario. Entre estos personajes se encuentra nada menos José Carlos Mariátegui (1894-1930)11 uno de los más influyentes pensadores peruanos de formación marxista del siglo XX, con quien trabará fructífera amistad. Como es lógico suponer, esta temprana incursión en este centro cultural dejará huella indeleble en él y ejercerá Influencia decisiva en su vocación de bibliógrafo, historiador y bibliotecario. En este último caso, para perfilar su concepción y visión sobre biblioteca como una institución democrática por excelencia, de servicio público, abierto a todo tipo de lectores incluido a los niños y jóvenes, modelo que afianzará más adelante con sus estudios de biblioteconomía y visita a las bibliotecas del mundo desarrollado y llegado el momento lo aplicará en su propio país, como se verá en los siguientes capítulos del presente trabajo.
Educación universitaria
En 1919, con solo dieciséis años de edad, Jorge Basadre ingresa a la Universidad Mayor de San Marcos, Facultad de Letras, decisión que según relata en sus memorias la tomaría como algo natural a diferencia de sus hermanos mayores que habían optado por la Ingeniería, la especialidad de su padre. Según cuenta él mismo, es probable que hubiese optado por la carrera de Educación o Historia, si estas especialidades hubieran existido.
Encontrándose ya en la Facultad de Letras, en 1922 se matricula en la Facultad de Derecho y Jurisprudencia, la que concluye en 1927. Sus calificaciones en la mayoría de los cursos fueron buenas y sobresalientes, conforme revela el estudio de Estuardo Núñez (2009) y donde también se establece que el período de estudios de Basadre duró de 1919 a 1927. Este último año se gradúa de Bachiller en Letras y en 1928 de doctor, con la tesis titulada: “Contribución al estudio de la revolución social y política del Perú durante la República”,
...