La construcción social de la realidad.

La construcción social de la realidad

Peter Berger

Thomas Luckmann

Los fundamentos del conocimiento de la vida cotidiana

(Resumen capítulo 1)

En este primer capítulo el autor nos muestra que la vida cotidiana es una realidad interpretada por los hombres, creyendo que el mundo o la realidad toma un significado subjetivo y coherente. Este espacio no solo se establece por los miembros que forman la sociedad en el comportamiento subjetivo de sus vidas. Pues se llega a originar mediante los pensamientos y acciones.

La vida cotidiana es clasificada por los métodos fundamentales del conocimiento del análisis fenomenológico, método descriptivo, empírico pero no científico. La experiencia subjetiva que nos brinda  la vida cotidiana, no es otro que un alto a toda hipótesis causal o genética. Nuestra conciencia siempre apunta o se dirige a objetos que aparecen como  elementos de las diferentes esferas de la realidad.

El tiempo en la realidad cotidiana es continuo e ilimitado, puesto que toda la existencia de cada persona en este mundo esta ordenado de alguna manera por el tiempo. Cuando se pasa de una realidad a otra, se experimenta una transición de una especie de impacto. Dicho impacto es causado por el desplazamiento de las transiciones, que se pueden observar con mayor claridad al despertar de un sueño.

El lenguaje que se utiliza en la vida cotidiana rige continuamente objetivos indispensables y propone un orden en el cual adquieren un sentido para darle a la vida cotidiana un significado que el hombre necesita. Este lenguaje marca el eje de la vida del ser humano en la sociedad y llena esa vida de objetos significativos. 

La interacción social en la vida cotidiana, se da la interacción cara a cara y aquí la realidad se vuelve totalmente real, masiva e imperiosa. La realidad social de la vida cotidiana es aprendida en un continuo de tipificaciones que se vuelven progresivamente anónimas a medida que se alejan del aquí y ahora.

Esta realidad se constituye alrededor del “aquí” en otras palabras del cuerpo y el “ahora” que es el presente. El ser humano experimenta la vida cotidiana en diferentes grados de proximidad y alejamiento, ya sea en espacio o tiempo. Lo más próximo al hombre es la zona de su vida cotidiana directamente que es accesible a su propia manipulación corporal.

Cada persona tiene de este mundo común que es para todos el mismo una perspectiva que es diferente a la de otra persona. El aquí para alguien es su allí para otra persona, visto y observado de mil formas distintas a la que uno puede pensar. El ahora no se superpone del todo con el de los demás. Puesto que hay una correspondencia entre el significado que cada persona pueda tener de este mundo.

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