La historia y la memoria Informe de lectura “La Historia y la Memoria”

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Informe de lectura “La Historia y la Memoria”

Nombre: Williams González

Ramo: teoría de la historia

Profesora:  Mónica Esteva R

Carrera: licenciatura en historia

Universidad Andrés bello  

Fecha: 11 de septiembre de 2017

Introducción

En este informe veremos como la memoria ha sido un elemento de gran importancia y prioritario en el estudio del pasado y la historia y de las dificultades que puede tener esta fuente a la hora de buscar una verdad histórica. Para hacer este informe use como base el libro de María Inés Mudrovcic llamado “historia, narración y memoria, los debates actuales en filosofía de la historia” precisamente el capítulo 8 llamado” el recuerdo cómo conocimiento” y el libro de Marc Bloch “introducción a la historia” precisamente los capítulos 1 “la historia, los hombres y el tiempo” y el capítulo 2 “la observación histórica” para poder realizar este informe.

Desarrollo

La autora de este libro María Inés mudrovcic, empieza este capítulo llamado” el recuerdo cómo conocimiento” aludiendo que en la década de los ochenta la relación existente entre el pasado y el presente del historiador no fueron tomadas en cuenta en las discusiones entre los historiadores y los filósofos. En la década de los sesenta la filosofía critica de la historia consideraba a la separación del pasado y el presente como mecanismos de acercamiento para conocer al objeto histórico. Esto cambio entre los setenta y ochenta en la que se concluyó que era el lenguaje, el mediador entre el pasado y el presente del historiador, el modo en el que historiador se adentra en el pasado, con esto se hace un giro de la filosofía de la historia, hacia la literatura  y de este giro nace la importancia hacia el rol de la memoria colectiva en la disciplina de la historia y todo lo que ella conlleva como la construcción de identidades, la memoria y el olvido, que posibilitan la construcción del pasado .

Dubrovcic cita a los autores D. Carr y P. Ricoeur, quienes decían que la configuración narrativa y la experiencia temporal, hacían surgir el conflicto entre el discurso histórico y la memoria colectiva contra el contexto del historiador. Otro autor que se sita en este capítulo es H.G Gadamer, de orientación heideggeriana, quien menciona que la tradición es una especie de mediadora que la historia posee en la memoria. (Mudrovcic.2005).

Un ejemplo que pone la autora del libro de la relación entre memoria e historia es la llamada historia oral, a la que también han recurrido muchos historiadores y filósofos para hacer discusión a esta relación memoria-historia.

En la historia oral, se busca reconstruir el pasado de los hechos colectivos a través de las memorias individuales, que se recolectan por medio de entrevistas. Se hace énfasis también en el rol del testigo como un mediador entre el hecho histórico y la narración histórica, el papel que tiene el historiador aquí es el de ver que es lo real pasado que está contenido en el relato.  

Mudrovcic toma en cuenta en su escrito el “giro interpretativo” de la historia oral y la divide en dos categorías que son la reconstructiva y la interpretativa, la interpretativa es la que busca darle al relato histórico una representación y la interpretativa es la encargada de extraer conocimiento del relato mismo.

La historia oral empezó a adquirir más fuerza con la llegada de un nuevo movimiento llamado la nueva historia social o más bien “la historia de abajo” en donde los registros orales son los encargados de contar la historia de los marginados, que solamente se conocían desde los relatos de las elites, contadas desde las perspectivas de estos. De esta forma el recuerdo adquiere gran relevancia para el historiador, ya que la memoria es la huella del pasado a la que hay que acceder, es una evidencia del pasado mismo.

Con los recuerdos, la memoria y la historia oral se ha logrado tener conocimiento de áreas rezagadas de la historia como la historia del trabajo, las historias locales y la historia de las mujeres, también ha permitido conocer anécdotas de hechos recientes a las cuales se tendría que haber esperado a la liberación de archivos oficiales para conocer estos hechos históricos. Mudrovcic pone de ejemplo para este caso a las anécdotas ocurridas en la crisis del canal de Suez y de la guerra de las Malvinas (Dubrovcic, 2005).

Ya durante la década de los ochenta, gracias a la influencia de la antropología y la sociología, se llega a la conclusión de que la memoria también está construida socialmente y que se ve influenciada por lo político, lo histórico y lo cultural. Se puede apreciar por el método interpretativo de ver la memoria, de cómo los sujetos sociales interpretan el tiempo histórico, por lo que las inexactitudes y distorsiones no son vistas como impedimento para llegar al hecho histórico exacto sino más bien como pistas para vislumbrar las formas culturales y el proceso en el que se forma en mismo sujeto en la historia. (Dubrovcic, 2005).

También se hace mención en este capítulo al sociólogo M. Holbawch y al historiador Pierre Nora, quienes argumentaban que la memoria individual es una especie de sistema social de recordar y que el testimonio oral está sujeto a un campo de conversiones y practicas limitadas históricamente y también mediado socialmente. La autora pone de ejemplo el caso de un hombre italiano que fue asesinado por la policía en 1947 en una manifestación pacífica, pero el historiador italiano Alessandro Portelli  al buscar testigos de este hecho  y recabar información de estos relatos orales, ellos dijeron que este hombre fue asesinado en 1953 en una protesta masiva contra la policía, se puede apreciar que se produjo una alteración del relato histórico, una alteración de tipo social, con la intención de dar un nuevo significado a este hecho, que en palabras de Pierre Nora la cronología social construye un lugar en la memoria un lugar en la memoria, resignificando los recuerdos, se llega a la conclusión de que toda memoria sea individual o colectiva es memoria social. (Dubrovcic, 2005).

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