MANUELA SAENZ

MANUELA SAENZ

Nació el 27 de diciembre de 1795 en Ecuador. Fue una de las mujeres que participó en lucha por de independencia de la Gran Colombia pero su fama se debe a su romance de ocho años con Simón Bolívar.

Hija de Simón Sáenz quien fue un comerciante español, su madre María Joaquina de Aizpuru era criolla, quien mostraba una postura revolucionaria. Al nacer, ella muere y su padre la considera una bastarda.

Su infancia la vive en el convento de Santa Catalina, en donde aprende diferentes labores domésticas, tocar el clavicordio y a leer en varios idiomas. Forma un fuerte lazo con dos esclavas Nathán y Jonatás, las cuales compartirá gran parte de su vida. La consideran muy bella según los relatos conservados, ilustrada y despreocupada de lo “femenino” ya que ella fumaba cachimba y vestía a veces ropa masculina.

Su padre la presenta como su hija en su familia. Manuela igualmente se siente abandonada por su padre. Un día cae en sus manos una novela francesa de amor con paginas de libertinaje. Cuando aparece Fausto D´Elhuyar, oficial del Ejercito Real, el cual se enamoran locamente. Se vuela del convento con él y se hunde una vez mas en la deshonra. Desde entonces su padre, repudia aún más su presencia y se la lleva para Panamá a trabajar con él y la casa a los 20 años con un inglés llamado James Thorne quien le doblaba la edad ya que él tenía 46 años. La pareja se establece en Lima. Ella cansada de las labores domesticas comienza a interesarse por la política, además de sentir desprecio desde pequeña por el actuar de los españoles en América. En determinados momentos, se unió al Estado Mayor de Bolívar y desde allí participó en las campañas de guerra, controló y organizó el archivo personal de su amante.

Por las noches sale con sus dos esclavas a pegar carteles de protestas y distribuir armas. Ella consigue una condecoración por sus acciones como la “Caballeresa del Sol” por el General José de San Martín”, algo tan inusual para una mujer el ser condecorada. Cansada de la frialdad de su esposo, se separa y regresa a Quito. En el libro …. Conoce a Simón Bolívar luego de la batalla de pichincha, en un homenaje que se le hace al vencedor y en varias páginas de internet se habla de que ella participo en la batalla de pichincha para la libertad de Ecuador. En donde nace su amorío, lo sigue a todos lados y lo defiende por encima de todas las causas y efectos. De Quito, Bolívar pasa al Perú, ella lo sigue con sus dos negras. Suplica que la dejen combatir a su lado, pero el venezolano le habla de las largas jornadas de lucha, frio y hambre, responde que ella no conoce lo que es el temor, es una circunstancia desconocida. Después de tantos ruegos, le permiten cuidar a los heridos que dejan los combates, permanece en Junín. Pero en Ayacucho es tan aguerrida que logra vestir el uniforme y es ascendida a coronela. Bolívar se complace en decirle “mi amable loca”, “mi soldadita desquiciada”. Él le advierte del que dirán, pero a ella le resulta indiferente la chismografía y solo le importa su amor por él. Como él ya es presa de la enfermedad, Manuela se encamina hacia Santafé para cuidarlo. En la ciudad todos la tratan de lesbiana o hetera. Ella los enfrenta, ¡“Gozo y qué!” les dice a todos los de la ciudad, uno de los presentes es el señor Francisco de Paula Santander, el cual no le genera nada de confianza. Una noche cuando le celebran el último cumpleaños a su amante, ella le hace un simulacro de fusilamiento a Santander, colocándole un letrero que dice: “ejecutado por traición”. Por dos veces consecutivas se entera de los planes para asesinar a Bolívar. Dos veces salva la vida del incomprendido dictador. La primera lo saca de una fiesta o un teatro, la segunda vez lo induce a saltar por una ventana y esconderse bajo un puente, siendo así como recibe el nombre de Libertadora del Libertador.  Desea acompañarlo hasta el final de sus batallas, pero el se opone. Manuela espera noticias del libertador, pero no se aguanta las ganas y emprende un viaje, cuando recibe la noticia del fallecimiento de Simón Bolívar. Al saber esta noticia intenta suicidarse con una serpiente venenosa

 Con sus esclavas pasan a Colombia, la cual se vuelve oscura senda bajo las leyes de Santander, es expulsada por tener actitudes que van en contra de la autoridad y pasa un tiempo ente Jamaica y Quito pero también es expulsada de ecuador por el presidente Vicente Rocafuerte. Encuentra un paradero estable en Perú: el puerto de Paita, donde recibió visitas de hombres ilustres como José Joaquín Olmedo, y vive su último tiempo entre el rebusque, la nostalgia y la dignidad.

CORRESPONDENCIAS

Se permite calcular que Manuela y Bolívar se alcanzaron a escribir alrededor de 400 cartas cada uno en el transcurso de su relación. Una de las ediciones recientes es la de Manuel Espinosa Apolo, la cual contiene 43 cartas de Bolivar y 36 de Saenz, todas estas ,breves y algunas casi notas de pocas líneas, en donde predomina el “muy señor mío” o el “mi querido Simón” además de despedidas precursoras del Romanticismo y de hablar libremente en relación al placer sexual.

En lo político, ella enuncia valoraciones cobre los conflictos que suceden en las campañas militares; en estas cartas ella se muestra siempre valiente y que entiende las estrategias de Bolívar y por lo mismo le advierte de varias conjuras o acuerdos secretos de enemigos políticos para asesinarlo.

ANÁLISIS

 Las obras de investigación de la historia clásica y reciente narran las acciones de hombres, y la exigencia de hacer investigaciones sobre la participación de las mujeres se ha visto desde fechas muy recientes, más o menos desde mediados del siglo XX; pero igualmente sigue sin incluirse todo el legado femenino en la historia general lo cual puede considerarse un abuso del lenguaje. Además el silencio sobre su presencia se debía a quienes escribían la historia más no por la no participación de las mujeres en el contexto de las revoluciones y las independencias latinoamericanas. Ellas desempeñaron tareas políticas diversas como tener organizaciones secretas en sus salones en donde se realizaban debates políticos e intercambio de opiniones, también distribuían propaganda clandestina y hasta practicaban el espionaje.

Existen biografías sobre ella, por ejemplo en la de Alfonso Rumazo Gonzales la nombra como la pionera, la Ricardo Lorenzo Sanz o la de Pablo Neruda; pero su figura se divide en dos partes polarizadas: la definen como un “mito erótico” o “mito heróico” y lo que resultan siendo son biografías más o menos noveladas y algunas novelas más o menos fieles a la verdad. Ella ha sido considerada como prócer de la independencia hasta precursora del feminismo latinoamericano.

Resumen

Este trabajo analiza tres textos creativos de distintos géneros que recrean en el siglo xxi la imagen de Manuela Sáenz, la famosa amante del Libertador suramericano Simón Bolívar. Se arguye que en la ópera, la novela y la película examinadas se invita al lector/espectador a repensar el papel que jugó la heroína quiteña en la política grancolombiana de su época. Este trabajo discute cómo el esfuerzo por actualizar la imagen de Manuela Sáenz implica negociar la creación de una nueva imagen que surge de la mezcla de la idea fosilizada en el imaginario colectivo latinoamericano de la quiteña como una sacrificada amante, y una versión más contemporánea de Manuela como un agente político que tuvo una injerencia determinante en los asuntos de estado durante los años de la Gran Colombia

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