Mito de Westfalia

Mito de Westfalia

Introducción:

        Cuando se habla del tratado de Westfalia muchos historiadores tienen una duda muy grande en torno a lo que dejo este acuerdo del Reino Frances y Sueco con el Sacro Imperio Germano-Romano. En este caso, unos le atribuyen la creación o las primeras formas de lo que hoy se conoce como soberanía, igualdad estatal, la nula intervención en asuntos internos, un balance de entre los diferentes poderes y ley clave para el derecho internacional. Sin embargo, hay otros que dicen que es una falacia y lo tratan como un mito, ya que argumenta que en si estos aspectos no se pusieron en práctica desde ese momento, sino que fue un poco más tarde donde inicia lo que hoy se conoce como estado y el sistema internacional entre Estados.

Desarrollo:

Para contextualizar el tema central del ensayo, se debe hablar de la anterior Guerra religiosa de los 30 años entre Reinos católicos y Reinos protestantes que ocurrió en el siglo XVII, específicamente entre los años de 1618 y 1648. Esta guerra tuvo en el bando católico al Reino Español, el Sacro Imperio Romano, Austria y a la iglesia católica; en el bando protestante estaba el Reino Sueco, el Reino de Francia, Reino de Dinamarca y Noruega, etc. La guerra dejo un tema muy interesante que era el cambio de la era feudal a un nuevo sistema, según Howard Machow “(..) the idea that such a new system replaced an earlier one of “feudal” ambiguity is better tailored to the Central European. Holy Roman Empire, then to the monarchies and republics beyond in Italy, the Netherlands, Spain, France, England, or Sweden.” (2015, p. 246), lo que podría explicar la disconformidad y el querer crear un nuevo sistema. También él instaurar algo novedoso y que pueda solucionar muchos conflictos, además de la unificación de Reinos que en su estructura estaban divididos. Malchow también  explica que: “the war (..) was commonly represented as a struggle of (mostly Protestant) states attempting to defend themselves against the hegemonic designs of the Habsburg Holy Roman Emperor, the Roman Catholic Pope, and the Habsburg Spanish King” (2015, p. 258), lo que sigue confirmando la idea de defenderse por parte de los Reinos protestantes y el Reino Frances y querer desligarse de la idea feudal del sistema creando algo novedoso, por lo que si se quería cumplir debían sobreponerse en esta terrible guerra que dejo muchas secuelas sociales, económicas, políticas, etc. Finalmente, los protestantes llegaron a un acuerdo que según historiadores del siglo XIX dejaron como resultado las bases del sistema actual y uno de los puntos más importantes para las Relaciones Internacionales.

        Lo que principalmente se estableció en el tratado de Westfalia fue la instauración de un nuevo sistema internacional donde los Estados eran el centro de las nuevas naciones, se hablaba sobre soberanía, la independencia estatal, la no intervención por parte de otros estados y sobre un nuevo concepto como derecho internacional, algo más parecido a lo que ocurre en la actualidad. No obstante, muchos pensadores e investigadores empezaron a dudar de la validez de estos primeros escritos sobre la Paz de Westfalia,

“In very general terms, the commanding idea of a “paradigm break” in the mid-seventeenth century has been vigorously denied by, on the one hand, those scholars who argue, as we have seen, that the sovereign territorial monarchical state was already well-developed in Western European mentality and practice.” (Malchow, 2015 p. 264)

En el siglo XX hasta la actualidad, muchos expertos en la paz de Westfalia escriben que es un mito lo que Westfalia dio al mundo moderno porque ya había indicios de que este cambio ya estaba siendo pensado por la población de Europa del Oeste, ya que guerras anteriores empezaban a exponerse guerras entre realezas como nuevas formas de guerra, un ejemplo claro, es la guerra en Italia que gesto la pugna entre el imperio Germano-Romano y Francia que duro 65 años, desde 1494 hasta 1559.

Tomando en cuenta, lo que muchos pensadores explican que la guerra de los 30 años fue en su estructura una “formalización” del sentimiento de guerras interestatales que darían como resultado el tratado de Westfalia, que se lo considera como el primer tratado en terminar una guerra, aunque este haya sido redactado de una manera informal. Algunos piensan que los hechos en Westfalia fueron un supuesto paralelismo de años anteriores ya había existido que eran los “Estados soberanos” solo que estos hechos rectificaron esa transición, y lo que en si se denomina como un “Estado Paz Internar”, es decir, que algunos Reinos ya tenían una soberanía y se podían considerar como un Estado sin que un reino externo incurra en los asuntos internos. Un ejemplo más acorde al contexto es el Sacro Imperio Romano, Malchow expone que; “(…) in its representation of the consequences of the war and settlement for the Holy Roman Empire. The principalities did not emerge as clearly sovereign; the Empire itself did emerge as an arguably more efficient, consolidated entity; (…)” (2015, p.265), que se le puede atribuir la intención de una conexión entre y la creación de un nuevo sistema “constitucional de Paz” entre 1495 y 1555, con el fin de unificar de manera definitiva al Sacro Imperio Romano con los principados, mediante tratados políticos del emperador y sus vasallos. En este caso se estipulo leyes como;

“la Paz Eterna en la Tierra (1495, 1521, 1555), el Manejo de la Paz y del Derecho (1495), los estatutos sobre la organización de la Corte de la Cámara Imperial (1495,1521, 1555), la primera Capitulación Electoral de 1519, la Ley sobre los Círculos Imperiales (1521), la Matricula Imperial, reguladora de la tributación (1521), la ley penal de la Constitutio Criminalis Carolina (1532) y la Ley sobre la Ejecución Imperial (1555).” (Marquardt, 2007, 115)

Que trataron de solucionar la guerra civil que azotaba en el Sacro Imperio Romano en eso 60 años. Sin embargo, tras la finalización se pudo ver la unificación de este imperio, el cual anhelaba su individualidad y su “soberanía”, algo que en Westafalia se adopto luego de la guerra de religiosa.

        Otro punto relevante que hay que remarcar es que muchos conocedores y estudiosos, están a favor del mito de Westfalia ya que lo que el tratado dejo es un sistema independiente de lo que hoy se conoce como un Estado soberano. Lo que “A historian of international law has recently claimed categorically that, (…), the principles of sovereignty, equality of states in law, religious neutrality, and balance of power” (Malchow, 2015, 266), que no se encuentran en principalmente en Westfalia, lo que crea una nulidad de lo que en realidad consideraban los primeros escritos acerca del tratado de Westafalia como un hecho inherente y comprobable.

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