Ulisis Criollo

ANÁLISIS DE LA OBRA

Ulises Criollo recoge la vida del personaje desde sus primeros días hasta el golpe militar de Victoreano Huerta y los preparativos de Vasconcelos para integrarse una vez más a la acción revolucionaria.

Para comprender a Ulises Criollo es necesario recordar algunas cosas Vasconcelos inicia la escritura del primer volumen en 1931 dos años después de su derrota en las elecciones para la presidencia de la República, José Vasconcelos había sido la carta de prestigio nacional de la revolución nacional, el ecuador de la nación el Apóstol del libro, el pensador y por encima de todo, el creador de un renacimiento cultural en el país.

Ulises Criollo puede ser una novela donde el protagonista es el propio José Vasconcelos ¿Es realmente una autobiografía?.

José Vasconcelos hereda del propio autor su temperamento así como muchas coincidencias fecha de nacimiento, padres y hermanos, una esposa insoportable para él, y una amante llamada Adriana que a diario lo enloquece estudio y amigos comunes y una misma revolución.

Vasconcelos supo, desde muy temprano, que la voluntad es todo aquello que se opone a la realidad.

Al recrear su pasado encontramos que a Ulises él niño es consciente de que la Nación tiene dos enemigos Los yanquis y los indios.

Ulises Criollo es también el registro de una iniciación en el mundo de la cultura, de un trato de las ideas de una trayectoria espiritual en el camino, Ulises comenta que desde que aprendió a leer le importó el contenido y no la forma.

PERSONAJES DE LA OBRA

José Vasconcelos (Ulises Criollo)

Hermanos de Ulises ( Concha, Carmen, Lola, e Ignacio)

El abuelo Esteban

La abuela doña Perfecta Varela

Padres de Ulises

Sofía (amiga de Campeche)

María Sarabia

Lic. Uriarte

Emilio Vázquez Gómez

Federico Gónzalez

Francisco I Madero

Gustavo Madero

Venustiano Carranza

Francisco Villa

Emiliano Zapata

Adriana

Porfirio Díaz

Victoreano Huerta

Félix Díaz

CONTEXTO Y UBICACIÓN DEL TEMA

Ulises Criollo cubre los primeros treinta y tres años del autor.

Los primeros recuerdos están situados en Sásabe algo menos que una aldea situada en el desierto de Sonora, frontera con los Estados Unidos ahí su vida trascurre con cierto temor sus primeros recuerdos emergen de una sensación acariciante en el rezago de su madre.

En sus recuerdos nos narran que fueron expulsados de su aldea por considerar que era parte de Estados Unidos obligándolos a buscar un nuevo sitio donde vivir y por otra parte el temor que lo atemorizaba era que los apaches lo hicieran prisionero, su madre comentaba que si algún día era atrapado por ellos (apaches) lo convertirían en guerrero pero que también algún día podría liberarse.

Si vienen los apaches y te llevan tu no temas vive con ellos y sírveles aprende su lengua y cuando crezcas y conozcas los caminos toma hacia el sur llega hasta México y pregunta por tu abuelo se llama Esteban de Oaxaca.

Como lo menciono había sido expulsado de su aldea dirigiéndose a Ciudad Juárez junto con sus hermanas Concha, Lola, Carmen en total eran cinco hermanos pero el primogénito había muerto en Oaxaca y por esta razón herede el mayorazgo.

Por otra parte recordando como eran mis días de clase empezó a darme un profesor llamado Calderón, nos dio las primeras nociones de artículo y sustantivo

Sumas y divisiones, nos garantizó la fidelidad de la poesía desde entonces me preocupo el contenido y no la forma leía historia de México.

Ulises recuerda otro hacho importante en su vida la muerte de su abuelo quien había sido perseguido en la revolución de reforma por Santa Anna y durante la guerra con los Franceses estuvo en Tlaxiaco donde tuvo oculto a Porfirio Díaz quien lo hizo senador y al morir le heredo a mi padre el rancho de Tlaxiaco.

En la prosperidad ahora en piedras negras nuestra fortuna corría pareja gracias a la recomendación de un tío que había hecho a mi padre para un puesto en la aduana; quien incrementaba así sus recursos económicos.

Se festejó un día un baile donde logre colarme en ese momento el jefe de la aduana descorria la cortina y apareció el retrato del caudillo (Porfirio Díaz), la ceremonia del retrato me dejó preocupación y un día en la mesa pregunte a papá por que le dicen caudillo a lo que respondió será por aquello de “mátalos en caliente”.

En piedras negras los negocios eran prósperos, se desarrollaba la mecánica en los talleres extranjeros de reparación de locomotoras, abundaban los comercios, pero no había una escuela aceptable, del otro lado los yanquis no tenían caudillos ni leyes de reforma sin embargo acompañaban su progreso acelerado, los vecinos de Eagle Pass construían casas modernas mientras que en piedras negras seguíamos viviendo como bárbaros; nosotros en busca de escuela nos trasladábamos a la vecina de Eagle Pass, las mañanas resultaban duras por tener que atravesar el puente era casi un kilometro por atravesar el puente, la escuela me había ganado lentamente no faltaba a clases, durante muchos años fui permanente, los temas de clases se discutían democráticamente constantemente se recordaba el Álamo, la matanza azteca, nunca me vi presentar excusas la patria mexicana también debe condenar la traición de nuestros generales, pero cuando decían que cien yanquis podían hacer correr a mil mexicanos reprochaba diciendo que eso no era cierto.

Uno de los libros que despertó en mi el interés por la lectura fue “ El Dios Blanco” el alumno que presentara una composición del libro leído tendría derecho a otro.

A los diez años me sentía solo y único llamado a guiar mi pasión de viajero por el mundo todo esto exigía la escuela Texana; mi madre decía que un niño cualquiera, si poseía el tesoro de la doctrina podía poner en confusión a los sabios

Cuando a mi padre le ofrecieron otro empleo tuvimos que cambiar hacia otro estado, llegamos a México donde nos instalamos por un tiempo yo empecé a ir a la preparatoria, pero otra cosa que desmoralizó es que la escuela era de baja calidad, una mañana fuimos sacados de la escuela marcharíamos en manifestación en contra del clero en cada esquina gritábamos vivan las leyes de reforma mueran los curas.

Cuando llego el telegrama de que a mi padre seria asignado a la aduana de Campeche me sentí contento por fin, estaríamos juntos nuevamente.

Así comienza otra etapa en mi vida rumbo a el puerto de Campeche donde comencé asistir ala escuela en cátedras especializadas, el santuario del instituto era la biblioteca fue para mi un don tener que leer cuanto libro existía ahí cultivando mis conocimientos, ahí conocí a Sofía hija del doctor quien había estudiado ingles y por lo cual había encontrado empleo traduciendo diálogos, con el paso del tiempo empezó a enamorase de aquella chica con quien pasaba largo tiempo. La posibilidad de inscribirme en un colegio metropolitano me causaba un sobresalto vanidoso, la primera en enterarse fue Sofía y así un vapor pequeño nos llevaría nuevamente a la capital, satisfecho de mi cambio, a menudo se descubría escribiendo sobre las paginas de algunas portadas de algún texto.

La ausencia de su padre ya por varios meses obligaba ala familia a regresar a piedras negras donde consiguió la restitución de su empleo, el sufrimiento de su madre le causaba dolor por tener que dejar a su hijo solo en la gran metrópoli dolor qué causa por poco que abandonara sus estudios, pero no fue así con el dolor de su corazón vio partir una tarde a su madre con sus hermanas sin saber que sería la ultima vez que vería a su madre pues tiempo después esta moriría, para ese entonces era septiembre faltaban dos meses para los exámenes abandonarme y perder el curso hubiera sido traición al propósito que causó su sufrimiento y es así como Ulises comienza una nueva vida independiente sintiendo el dolor por la perdida de su madre. Sumándose al público estudiantil aprendio a combatir la melancolía con la exitación del desnudo femenino.

Con sabor amargo regreso a piedras negras pero ya no era lo mismo no era el pueblo soñado sino el sitio de la más tremenda pena.

Las vacaciones estaban a punto de terminar por lo que a su regreso se encontró con nuevos compañeros de cuarto Morones y Pacheco quienes me fueron aceptando, para el comienzo del siglo xx tendría nuevos amigos Renato Miranda estudiante de medicina y Daniel Delgadillo. Por aquellos días su padre se casaría nuevamente pasaría a visitarlo y seguir su camino a Campeche eso sería la más negra traición al afecto y memoria de su madre y nuevamente se refugiaría en los brazos de una mujer, alcohol y canciones.

Después de terminar la preparatoria había logrado el ingreso a la jurisprudencia ya que era su pobreza que lo había decido a elegir esa profesión por la ventaja lucrativa que ofrecía.

En esos tiempos conoció a una mujer llamada María Sarabia por quien se había vuelto loco de amor llegándole a proponer que se casara con el, pero esta lo rechazo eran tiempos difíciles para el, en donde el alcohol y las mujeres propiciaban la de no continuar con sus estudios. Un día se encontró con un dilema el comer o comprar un libro que siempre la había apasionado “la divina comedia” de Dante la cual al leerla cambio su vida al apasionado de la filosofía encontrando en esta las respuestas que el quería conocer reanudando

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