Basta De Historias

La educación es algo demasiado importante como para dejarla en manos de los gobiernos”, es una de las muchísimas frases provocadoras de uno de los periodistas argentinos más conocidos internacionalmente, Andrés Oppenheimer, radicado desde hace años en Estados Unidos.

Oppenheimer estuvo en Chile presentando “¡Basta de historias!”, su libro-reportaje sobre el rezago de Latinoamérica en materia de desarrollo e innovación, debido fundamentalmente a la mala calidad de su educación. La bajada de título de su trabajo es: “La obsesión latinoamericana con el pasado y las 12 claves del futuro”, y tiene que ver con la tesis fundamental de su libro: los gobiernos y los mandatarios de nuestra región están anclados en el ayer y no se plantean el mañana, el porvenir, anticipándose a las necesidades que el desarrollo impone.

En un prólogo, y 13 capítulos –el último dedicado a las 12 claves del progreso–, se pasea por la experiencia de los países que internacionalmente lo hacen bien: China, Corea del Sur, Singapur, India, Finlandia y ¡Chile!, lo que resulta casi una broma en tiempos en que las movilizaciones estudiantiles tienen en jaque al gobierno de Sebastián Piñera, cuestionando el modelo de educación chileno, exigiendo el fin al lucro, educación gratis, universal y estatal, amén de cambio de la Constitución, salida de ministros y lo que cada uno sienta que puede mejorar.

En una columna publicada en los diarios El País y El Mercurio, después de estar en Chile en pleno fragor de las marchas, caceroleos y movilizaciones, el periodista no se arrepiente de lo escrito y dice que el problema de nuestro país es que se “apuró demasiado”. En síntesis afirma: “Los estudiantes tienen razón al exigir que el gobierno haga algo para resolver la situación financiera de los graduados, y por regular mejor el sector. Sin embargo, estos excesos pueden corregirse sin copiar los desastrosos sistemas universitarios estatistas de varios países de la región. Si los excesos del libre mercado educativo se resuelven, Chile saldrá de este trauma convertido en un país mejor”.

Pero más interesante que su columna es, sin duda, “¡Basta de historias!”, donde se encuentran experiencias concretas que explican el éxito de los países que más han crecido y mejorado sus indicadores económicos y sociales a partir de concentrarse en la educación. Reproduzco aquí algunos párrafos que dan una idea de cómo va el ensayo de Oppenheimer. Sería recomendable que muchos de los que hablan lo leyeran.

“¿Cómo puede ser que México, un país con 110 millones de habitantes, con un producto interno bruto (PIB) de 1.600 billones de dólares, tenga a su mejor universidad en un puesto tan por debajo de la mejor universidad de Singapur, un país con cinco millones de habitantes y un PIB que no llega a 225.000 millones de dólares?”.

“Hay demasiados estudiantes latinoamericanos estudiando derecho, psicología, sociología, filosofía e historia, y pocos estudiando ciencias e ingeniería”.

“En

...