EL ARTE DE LA GUERRA capitulos 1-13

CAPÍTULO I

Evaluación

Valorar la guerra con base en cinco factores fundamentales, haciendo comparaciones.

1. Doctrina: lo que hace que el pueblo siga al gobernante.
2. Tiempo: ying y el yang, es decir los opuestos.
3. Terreno: distancias, hacia donde dirigirse (para sobrevivir)
4. Mando: sabio, benevolente, sincero, disciplinado y con coraje.
5. Disciplina: referido a la organización, los rangos, la provisión del material.

Aquel que domine las anteriores vence.

Al planear hay que plantearse preguntas que nos guíen para adivinar la victoria.

El arte de la guerra se basa en el engaño, es decir, tienes que aparentar ante tus enemigos para poder analizar, planear y anticiparte para actuar.

Las claves para la victoria son: atacar cuando el enemigo está desordenado, o viceversa desordenarlo en caso de que lo esté. Separarlo si está unido.

Realizar cálculos con una evaluación cuidadosa, puede vencer.

CAPITULO II

Iniciación de las acciones

Una vez iniciada la contienda el prolongarla por mucho tiempo desanimará a las tropas, lo que puede provocar la sublevación de los mismos.

Ser conscientes de las desventajas para ser conscientes de las ventajas.

Los suministros deben encontrarse en un lugar. Tomar los suministros de tu país quitando a los enemigos dará como resultado que estés bien abastecido.

General de inteligencia desprovee a sus enemigos de alimento.

Lo que arrasa al enemigo es la imprudencia. La motivación de los tuyos es asumir los beneficios

Al repensar los beneficios lucharan por su propia iniciativa.

“donde hay grandes recompensas hay hombre valientes”

Solo una recompensa no a todos, para animar

Trata bien a los soldados y préstales atención, para que luchen por ti.

Vencerás al adversario e incrementar por añadidura tus fuerzas.

Utiliza al enemigo para derrotar al enemigo.

Lo importante es la victoria no la persistencia, pues como el fuego, si no es apagado, se consume a sí mismo.

El que está a la cabeza está a cargo de las vidas y seguridad.

CAPÍTULO III

Proposiciones de la victoria y derrota

Regla general: conservar al enemigo intacto que destruirlo. Capturar a sus aliados y conquistarlos.

Ganar sin violencia, calcular fuerza, que pierdan el ánimo y dirección, haciéndolos inservibles.

Preparar con anticipación los artefactos y la coordinación de los recursos.

No atacar por cólera y con prisas.

El maestro de las artes marciales vence sin batalla, conquista sin asediar, destruye sin mucho tiempo, deshace los planes de sus enemigos, estropea alianzas y corta suministros.

Regla de la fuerza:

Si son 10 veces > que el adversario: rodéalo

Si son 5 veces > que el adversario: atácalo

Si son 2 veces > que el adversario: divídelo

Si son = que el adversario: lucha (si es posible)

Si son < que el adversario: evita enfrentarles y mantente en guardia

La prudencia y la firmeza te hacen llegar a alcanzar y dominar.

Una valoración adecuada te permite actuar. Por ejemplo si tus fuerzas están en orden y con ánimo; y tu adversario esta desmoronado y en caos, entra en la batalla.

Generales son servidores: servicio completo= pueblo fuerte, servicio defectuoso= pueblo débil.

Las tres maneras de llevar al desastre:

Inmovilizar al ejército, avanzar o retirarlos cuando no es momento.

Comparte en pie de igualdad el mando: provoca que sus soldados se confundan

Ignoran cómo: los soldados se vuelven vacilantes en sus maniobras

Triunfo:

Saben cuando si y cuando no (luchar)

Deciden cuando usar mucha o poca tropa

Tropas inferiores y superiores con el mismo objetivo.

Se enfrentan con preparación a enemigos desprevenidos

Generales competentes

Si conoces alos demás y a ti, no corres peligro

Si no conoces a los demás per a ti si, ganaras una y perderas una

Si no conoces a los demás ni a ti, correras peligro

C A P I T U L O IV

Sobre la medida en la disposición de los medios

En el capítulo IV nos habla acerca de lo que significa hacerte invencible, lo cual se relaciona principalmente con conocerte a ti mismo. Para posteriormente conocer a los demás al aguardar para descubrir la vulnerabilidad del adversario.

Por ende la invencibilidad está en uno mismo, como una cuestión de defensa. Pues quien no se conoce no puede controlar su comportamiento y el control es lo que permite que descubras el punto débil de tu adversario, la manera de atacarlo. Pues bien lo menciona el autor: “Mientras no observes vulnerabilidad no ataques y prepárate para ser invencible”.

Por otra parte la vulnerabilidad es la que se encuentra en el adversario, es una cuestión de ataque. La defensa es para la escases y el ataque para la abundancia.

Prever la victoria cuando cualquiera la puede conocer no constituye verdadera destreza. Lo verdaderamente deseable es poder ver el mundo de lo oculto, donde no existe forma. Lo que todo el mundo conoce no se llama sabiduría.

Las victorias de los buenos guerreros no destacan por su inteligencia o su bravura. Cuando se resuelven los problemas antes de que surjan, ¿quién llama a esto inteligencia? Cuando hay victoria sin batalla, ¿quién habla de bravura?

un ejército victorioso gana primero y entabla la batalla después; un ejército derrotado lucha primero e intenta obtener la victoria después.

reglas militares son cinco: terreno da lugar a las mediciones, éstas dan lugar a las valoraciones, las valoraciones a los cálculos, éstos a las comparaciones, y las comparaciones dan lugar a las victorias. Las comparaciones hacen ver donde esta la derrota o victoria.

Cuando el que gana consigue que su pueblo vaya a la batalla como si estuviera dirigiendo una gran corriente de agua hacia un cañón profundo, esto es una cuestión de orden de batalla.

C A P I T U L O V  Sobre la firmeza

Gobernar sobre muchas personas como si fueran poco es una cuestión de dividirlas en grupos o sectores: es organización

Lograr que el ejército sea capaz de combatir contra el adversario sin ser derrotado es una cuestión de emplear métodos ortodoxos o heterodoxos. como un ciclo. El ataque directo es ortodoxo. El ataque indirecto es heterodoxo.

Cuando induces a los adversarios a atacarte en tu territorio, su fuerza siempre está vacía (en desventaja); mientras que no compitas en lo que son los mejores, tu fuerza siempre estará llena.

Cuando un ejército tiene la fuerza del ímpetu (percepción), incluso el tímido se vuelve valiente. Nada está fijado en las leyes de la guerra: éstas se desarrollan sobre la base del ímpetu. Con astucia se puede anticipar

Cuando hay entusiasmo, convicción, orden, organización, recursos, compromiso de los soldados, tienes la fuerza del ímpetu, y el tímido es valeroso.

Así es posible asignar a los soldados por sus capacidades, habilidades y encomendarle deberes y responsabilidades

cuando se conduce a los hombres a la batalla con astucia, el impulso es como rocas redondas que se precipitan montaña abajo: ésta es la fuerza que produce la victoria.

C A P I T U L O VI Sobre lo lleno y lo vacío

el anticipar te permite prepararte y esperar descansado, de lo contrario, se improvisa

Hacer que los adversarios vengan a ti, y no combatir es el arte de vaciar a los demás y llenarse a sí mismo.

Cuando se cumplen las instrucciones, las personas son sinceramente leales y comprometidas

Sé sutil, discreto, confidencial De esta manera podrás dirigir el destino de tus adversarios

Para avanzar arremete sus puntos débiles. Para retirarte se más rápidos que ellos

Las situaciones militares se basan en la velocidad: llega como el viento, muévete como el relámpago, y los adversarios no podrán vencerte.

cuando quieras entrar en batalla, no podrá evitar luchar si atacas en el lugar en el que debe acudir irremediablemente al rescate

cuando induces a otros a efectuar una formación, mientras que tú mismo permaneces sin forma, estás concentrado, mientras que tu adversario está dividido

Cuando estás concentrado formando una sola fuerza, mientras que el enemigo está dividido en diez, estás atacando a una concentración de uno contra diez, así que tus fuerzas superan a las suyas.

Cuando estás fuertemente atrincherado, te has hecho fuerte tras buenas barricadas, y no dejas filtrar ninguna información sobre tus fuerzas, sal afuera sin formación precisa, ataca y conquista de manera incontenible.

cuando las tropas están de guardia en muchos lugares, están forzosamente desperdigadas en pequeñas unidades.

Si haces que los adversarios no sepan el lugar y la fecha de la batalla, siempre puedes vencer.
haz tu valoración sobre ellos para averiguar sus planes, y determinar qué estrategia puede tener éxito y cuál no. Incítalos a la acción para descubrir cuál es el esquema general de sus movimientos y descansa.

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