Educación Moral Y Diálogo

1. Las razones por las que el diálogo es un procedimiento fundamental para favorecer la reflexión ética.

El diálogo es fundamental en la toma de decisiones en conjunto debido a que se adopta una posición en la que se le da privilegio a la actitud denominada: “ponerse en los zapatos de otra persona”, cuya práctica favorece las relaciones de una sociedad consciente de la importancia de cada pilar que la construye. En cualquier institución e incluso, más aún en la educativa, debe dársele la importancia debida al diálogo entre los actores escolares (alumnos, docentes, padres de familia y trabajadores administrativos y manuales) ya que de ésta manera la organización tendrá mayor validez y por consiguiente el resultado; la formación integral del educando.

2. Las limitaciones del diálogo en relación con las soluciones a los conflictos.

Éste punto se refiere a la limitación que tiene el diálogo dentro de la resolución de un conflicto en el momento en que no hay unanimidad en la toma de decisiones. En el caso de quinto año, en particular, el diálogo entre el padre de familia y el docente debería convencer al primero de la importancia que tiene para la formación de su hijo asistir a la grabación del programa en cuestión. Sin embargo, el docente debe fundamentar coherentemente el porqué de la visita a dicho lugar y el cómo beneficiará a la formación del educando.

3. Las habilidades que se promueven a través del diálogo.

Las habilidades que se promueven a través del diálogo son el conjunto de destrezas conversacionales, actitudinales y de valores cívicos que, ante un problema interpersonal o social, impulsa a todos los implicados a comprometerse en un intercambio de razones que los acerque a la mutua comprensión y a la búsqueda de acuerdos justos y racionalmente motivados. Para qué el diálogo pues utilizarse como herramienta de crecimiento social es necesario:

1. Partir del principio de que el interlocutor es algu ien a quien escuchar y no solamente alguien a quién convencer.

2. Estar igualmente dispuesto tanto a mantener su posición inicial, en caso de que no le convenzan los argumentos, como a modificarla si estos resultan convincentes.

3. Preocuparse por encontrar el punto de vista correcto y por lo tanto, entenderse con su interlocutor. Entenderse significa descubrir todo lo que ya tienen en común, aún cuando no se logre un acuerdo total.

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