El Trabajo Y Su Productividad. Lo Que Esta En Juego En La Crisis

El capital trata de hacer cuantas ante todo. Porque en adelante la organización científica del trabajo, en límite de su eficacia se traduce como supe costosos, como en economía en tiempo, demás de esta nueva contabilidad el taller puede y debe prolongarse a nivel social. Contar con l rechazo del trabajo. Sin duda el trámite es singular. Pero su oportunidad en el gran periodo de luchas de obrero-masa no ha podido dejarse de verse reforzada cuando en el transcurso de 1974 y 1975 estallo la crisis.

En la medida en que la crisis de la organización científica del trabajo significaba también la perdida de eficacia del tipo de proceso da trabajo que constituía el soporte mas seguro de la acumulación del capital desde hace 20 años la debilitación de ella resultante debe tener alguna relación si no directamente con la crisis de 1974-1975 al menos con las dificultades encontradas con la acumulación del capital desde mediados de la década de 1960.

En Francia el verdadero desarrollo de la producción en masa solo data de lo esencial del periodo posterior a la segunda guerra mundial, puede decirse que el proceso de la racionalización se hizo de entrada sobre la base las ganancias acumuladas de los principios taylorianos y fordianos clásicos y de las que resultan del empleo de autómatas industriales.

La disminución de la productividad, la penuria de los recursos disponibles para la formación del capital, el agravamiento de las cargas fijas en el precio de coste, van a ir acompañados de un crecimiento del endeudamiento en relación con la autofinanción, una reducción de los fondos disponibles para la acumulación y en resumen de un agravamiento de las gastos financieros.

A nivel macroeconómico, la crisis de la organización científica del trabajo, el agotamiento de los métodos taylorianos y fordianos de la organización del trabajo y la ausencia de un revelo significativo en el soporte de la valorización del valor (al producir los automatismos un efecto contradictorio desde este punto de vista) se traducen en un debilitamiento de la productividad global del trabajo.

Por diversos que sean los caminos recorridos por el capital en su movimiento para superar las nuevas dificultades “estructurales” de la acumulación, la busca en el seno mismo del proceso de trabajo de nuevas palancas susceptibles de incrementar la productividad e intensidad del trabajo sigue siendo un punto de paso obligado.

Esto busca desarrollarse prácticamente en una doble dirección:

La primera va a consistir en una serie de experimentos sobre la recomposición de los puestos y del trabajo en el taller con vistas a descubrir un nuevo modo de consumo productivo de la fuerza de trabajo.

La segunda en una tentativa de replantear el conjunto de las modalidades de la gestión de las clases obreras; la política de revalorización del trabajo manual por un lado y la puesta en marcha de instituciones y de una legislación que permitan la generalización del trabajo precario y de la media jornada por otro van a transformar así profundamente el mercado del empleo obrero para adaptarlo, a la fuerza, a las nuevas exigencias del capital.

Si se intenta relacionar este movimiento con las condiciones reales en que debe desarrollarse hay que invocar tres series de obligaciones

1. Puede decirse que la cuestión planteada considera de la manera mas inmediata, es de la elaboración de los principios o técnicas de la organización del trabajo que permitan a la ves afrontar y anular los efectos mas desorganizadores de las nuevas formas de resistencia obrera y paliar las perdidas de eficacia que resultan de la aplicación estricta MTM

2. Estos nuevos principios deben ser concebidos para una fuerza de trabajo que posea una nueva composición técnica y social y actué en un mercado del trabajo con características igualmente nuevas y particulares.

Planteada en términos más fundamentales, la cuestión es nada menos que la del mantenimiento del suministro de las fuerzas de trabajo y la renovación de las clases obreras a partir de las clases de edad

El enriquecimiento de las tareas solo podría ser uno de los elementos de un dispositivo de gestión de la fuerza de trabajo obrera mucho mas complejo pues del obrero en cadena inmigrando al joven francés escolarizado y provisto de la totalidad de sus derechos hay una diferencia de la naturaleza cualitativa y tendrán que producirse cambios en el modo de remuneración.

Los nuevos modos de organización del trabajo deben someterse a una triple exigencia:

 Permitir la reproducción en serie

 Para mercancías de escaso valor individual

 Mantenimiento un nivel de renta lo bastante bajo como para satisfacer la exigencia permanente de una mano de obra numerosa y barata pero suficiente para asegurar la realización de las grandes masas de mercancías productivas.

La investigación en torno recomposición de la línea de montaje, por un lado y la nueva gestión del mercado del empleo obrero, por otro. En definitiva lo que esta en juego en las reestructuraciones en curso concernientes al trabajo obrero: asociar a unas transformaciones que tienen por objeto un nuevo modo de consumo de la fuerza de trabajo unas prácticas que afectan a su modo de reconstitución y reproducción

La recomposición de la línea de montaje

En el mismo momento en que intentaban establecer

...