Ensayo Del Libro “Entender La Arquitectura” de Leland M. Roth

Ensayo Del Libro “Entender La Arquitectura” de Leland M. Roth

Tal como inicia el libro, el autor deja bien en claro que la arquitectura es algo inevitable. La podemos encontrar en todo y en todas partes. Si bien existen muchas definiciones de lo que es arquitectura y el autor utiliza la definición del arquitecto Luis Kahn “la arquitectura es lo que la naturaleza no puede hacer”. El hombre es el único ser vivo que hace uso de la razón para transformar un espacio que responda a satisfacer una necesidad. Conforme a que el tiempo avanza, el hombre adquiere experiencia y amplía sus conocimientos para así adaptarse al constante cambio.

Para mantener nuestra identidad como arquitectos es importante comprender que la arquitectura es una totalidad; no solo los edificios sino también los elementos que componen a una ciudad. Todos estos elementos y o edificios hechos por el hombre expresan sentimientos y valores; tienen el poder de afectar de forma directa el comportamiento de los humanos que hacen uso de ellos, por medio de las formas, espacios, colores, utilización de escala y demás herramientas puestas a disposición de los arquitectos.

A lo largo de la primera parte del Libro, el autor hace énfasis en la importancia del paso del tiempo en el ámbito de la arquitectura. Además, abarca temas de cómo se sostiene un edificio, la utilidad que se le da la mismo, los elementos que se utilizan y el sentimiento de deleite que se debe leer, entender y provocar al estar en contacto con la arquitectura.

La buena arquitectura haciendo referencia a la definición del arquitecto Marco Vitruvio, debe ser un equilibrio entre la utilidad, la firmeza y la belleza o en otras palabras función, solidez y deleite. Para llegar a ellos, el autor propone una serie de cuestionamientos. En cuanto a la función debemos cuestionarnos si logramos responder al fin por el cual se construyó el edificio y si este hace realce a su entorno. Para la firmeza, si la construcción fue hecha de manera correcta como para mantenerse con el tiempo y si los materiales utilizados son resistentes al entorno. Por último, cuestionarse si el resultado es atractivo a la vista, si causa sentimientos de satisfacción y agrado al ser humano.

Empezando por el primer elemento: la función. Notamos que ya tuvo sus dificultades a lo largo de la historia. Si bien, cada cosa esta determinada por su naturaleza y para que algo funcione bien debe responder a cada uno de sus aspectos de forma práctica. Tanto las actividades humanas como lo demás que las comprenden no deben ser reducidas a una formula mecánica.

Dentro de la arquitectura, la función tiene muchos más componentes de los que parece. El autor lo deja en claro al afirmar que “no hay edificio que esté dedicado enteramente a una sola función”. No se puede responder solo a la utilidad pragmática cuando también se debe tener en cuenta las circulaciones, las funciones físicas, psicologías, acústicas, por citar algunos.

Aun así, se lograron dar nuevas funciones a edificios antiguos. Una de las soluciones que habían concebido es de realizar espacios amplios y libres, de manera que en un futuro se pueda diseñar dentro de esos espacios. Así es como se adaptaban a la arquitectura antigua aplicando ideas innovadoras.

Algo esencial dentro de la arquitectura es la estructura en sí, o como lo presenta Marco Vitruvio, la firmeza. Es la estructura la que se encarga de mantener la obra en pie, de vencer a la constante atracción de la fuerza de la gravedad para evitar que la construcción caiga.

El autor del libro utiliza la palabra “solidez” para hacer referencia al esqueleto del edificio; y presenta la diferencia entre la estructura física y la estructura perceptible. Esta primera es la precisa y necesaria para cumplir con su función. La segunda por otra parte es la que busca llegarnos por las sensaciones y sentimientos. Por ejemplo, una columna voluminosa. Da la sensación de que por su volumen es resistente para sostener la cubierta, cuando en realidad no es necesario algo de esa dimensión.

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