Ensayo Lazarillo de Tormes.

Ensayo de Lengua Castellana

Profesora:

Maribel Morales Duarte

Tema:

“El Lazarillo de Tormes”

Estudiante:

Sofía Salvo Villareal

Curso: 10°C

Barranquilla - Atlántico

"Un niño que trabaja pierde más de lo que gana".

El Lazarillo de Tormes.

Esta historia es una Novela escrita en España por un autor anónimo (aunque se afirma que los posibles autores de esta novela pudieron ser Diego Hurtado de Mendoza o Don Sebastián de Orozco), esta historia se escribió en el año de 1554 alejándonos un poco de la España negra y torturada que había en aquellos años, la historia en sí es la biografía de un muchacho llamado Lázaro. En este ensayo se relacionará la vida e historia del Lazarillo de Tormes con la forma de vida de los niños que son explotados laboralmente.

El Lazarillo de Tormes es una obra que relata la historia de un niño llamado Lázaro, que a través de los golpes y el hambre deja su inocencia atrás y se convierte prematuramente en un adulto. Su infancia no es más que malos tratos y situaciones difíciles de llevar. Él se las rebusca para poder crecer lo más rápido posible, intentando dejar el sufrimiento atrás e intentando sobrellevar su crítica situación.

En el tema elegido se expresa el gran nivel de popularidad que tiene la explotación infantil en la actualidad a nivel mundial, cómo los niños, ya sea por “necesidad personal” o mismo porque sus padres los obligan, recogen basura de la calle, venden productos, entre otras cosas, para poder sostenerse a ellos y mismo a sus familias. A través de testimonios muestra supuestos fundamentos. ¿Explotación o necesidad?

Cuando se comparan los dos casos, claramente se observa una ausencia de recursos y por sobre todas las cosas, una falta total de formación. En ambos se refleja cómo las situaciones de la vida hacen a estos niños crecer abruptamente (de manera brusca). “Para ellos, el término infancia no existe y los juegos quedaron atrás. Al contrario, consideran que el destino de sus vidas es ese, trabajar para apoyar a sus familias.”

El principal derecho que no es respetado en ninguno de los dos casos es el “no trabajar y tener una educación digna de calidad”. Ni en el Lazarillo ni en el artículo, este derecho es tomado en cuenta. Ambos tienen incorporados que lo correcto es lo que hacen cuando la realidad es que es totalmente lo contrario. Carecen de educación y protección especial para su desarrollo mental, físico y social: el Lazarillo comete delitos y los niños del artículo mencionado trabajan siendo

menores de edad. Lo que no proporciona ninguna ayuda para poder desarrollar lo dicho anteriormente.

Cada niño tiene derecho a pedir y a difundir la información necesaria que promueva su bienestar y su desarrollo como persona. Esto no se cumple porque los niños realizan acciones que los perjudican y los adultos responsables no se hacen cargo de brindarles la educación que necesitan.

Si bien hoy en día la idea de educación es vista de forma general e igualitaria para todos, en la época del Lazarillo, la educación era pura y exclusivamente para personas privilegiadas. Por supuesto que esto no quita que la forma de vivir que tenía Lázaro no era la mejor. Pero lo que sí es necesario es una educación base. Todos los niños tienen derecho a tener una educación. Es así que me parece necesario destacar que entre otras de las semejanzas se refleja la falta de educación y sentido común. Es decir, notablemente, tanto Lázaro como los niños del artículo están expuestos a un riesgo constante. Su salud física y mental se ve expuesta completamente: “Según estudios distritales En cualquiera de los trabajos el mayor riesgo a que están expuestos los menores es a que sus ocupaciones se desarrollen en contextos no adecuados como la calle. "Allí son perjudicados por ruido y en casos más comunes terminan siendo víctimas de más abusos", señalan algunos expertos. Muchos trabajan para ayudar a costear sus propios gastos de estudio, pagar las deudas de su casa o para manejar su propio dinero.”

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