La Maestria Del Amor

La mente herida

Este primer capítulo se me hizo muy interesante del cual quise recatar algunas frases que a mi parecer me impactaron mucho y pues me dejan reflejarme en ello.

• Todos nosotros somos maestros. Somos maestros porque tenemos el poder de crear y de dirigir nuestra propia vida.

El hombre fue creado por dios para ser feliz y libre, de él depende si desea ser feliz o si su felicidad es dependiente de algo o alguien.

• Nos convertimos en artistas del fingimiento y de la proyección de nuestra imagen y en maestros de cualquier cosa que creemos ser. Cuando conocemos a otras personas las clasificamos de inmediato según lo que nosotros creemos que son.

Es tan fácil fingir una sonrisa donde se esconde una lagrima, tan fácil reír cuando quisieras llorar, y solamente por no querer dar una respuesta a nuestro llanto, el ser humano es experto en fingir, esta es una gran realidad, un causante de esto es que el hombre ha perdido la confianza en su entorno que prefiere no decir nada y solo sentir su dolor.

• Al igual que la piel infectada de los habitantes de ese planeta imaginario, nuestro cuerpo emocional está lleno de heridas, de heridas infectadas por el veneno emocional. La enfermedad del miedo se manifiesta a través del enfado, del odio, de la tristeza, de la envidia y de la hipocresía, y el resultado de esta enfermedad son todas las emociones que provocan el sufrimiento del ser humano.

¿Que seria del hombre si no tuviera emociones? Todos hemos sentido medo, el miedo siempre será de la manera que desees, si quieres crear esos malos sentimientos o hacer con el maravillas, este sentimiento es imposible de evitarse pero puede controlarse y ayudarnos a crecer

• La manera de relacionarnos los unos con los otros provoca tanto dolor emocional que, sin ninguna razón aparente, nos enfadamos y sentimos celos, envidia o tristeza. Incluso decir «te amo» puede resultar aterrador.

Soy consciente de que de todo el capitulo esto me pareció muy real, yo por ejemplo me afecta mucho lo que la gente llegue a decir de mí, lo que piensan, lo que creen que soy, mas sin embargo han llegado comentarios que en lugar de tirarme me hacen creer mas en mi y salir adelante, Dios me ha bendecido mucho y agradezco por todo. El ser humano tiene mucho miedo de no ser aceptado en una sociedad llena de status, de personas que gozan con hacer sufría a otros, pero así mismo miedo de demostrar quienes somos en realidad, tenemos miedo de dar todo y que se burlen de nosotros o que nos critiquen, los grandes problemas de sociedad Siempre están cerca y no se irán a menos de que dejemos ir nuestros miedos.

La pérdida de la inocencia

• Estamos sintonizados para amar. De pequeños no definimos el amor como un concepto abstracto, sólo lo vivimos.

Este pequeño párrafo me dice mucho, el Ser Humano cuando es pequeño no tiene miedo de amar ni de ser amado, En mi caso no tengo miedo a amar, mi familia me ama, Dios me ama pero en ocasiones surge ese miedo a querer amar a otras personas.

• Tu cuerpo emocional está herido, y en ese momento, pierdes una pequeña parte de tu inocencia.

A decir verdad, no recuerdo del todo mi infancia pero el leer esta parte me hizo remontarme a algunos años atrás y me preguntaba que si algo así había pasado en mi infancia. Son cosas que uno no hubiera imaginado.

• Poco a poco perdemos nuestra inocencia; empezamos a sentir resentimiento, y después, ya no perdonamos más.

Esta parte es medio fea, muy dura pero sin embargo verdadera, el hombre llega a sufrir tanto que llega el momento en el que piensa que su sufrimiento es muy normal. Así miso sucede con el odio y el desamor.

• Normalmente, nos liberamos del veneno traspasándoselo a la persona que creemos responsable de la injusticia, pero si esa persona es tan poderosa que no podemos enviárselo, entonces lo lanzamos contra cualquier otra sin importarnos de quien se trate.

Este libro es tan exacto, tan cierto, me siento tan identificada con esto, es que yo cuando me enojo mucho estallo y llego a hacerlo con las personas que ni culpa tienen por lo que me pasa. Tengo que aprender a desaparecer esto.

• Debes saber que no hay nadie en el mundo entero que te maltrate más que tú mismo. El límite del maltrato que tolerarás de otras personas es exactamente el mismo al que te sometes tú.

Hay! Esto se me hizo muy triste ya que comencé a imaginar cosas muy tristes: Cuando uno es niño suele ser muy maltratado psicológicamente por sus propios padres, (Cabe mencionar que las palabras son mucho más poderosas que un acto) al grado de que el pequeño se cree todo lo que le dicen y sin pensarlo llega el momento en que el mismo se dice esas mismas cosas sin pensar que tal vez sus no es así ya que toda su infancia fue visto con esas palabras.

El hombre que no creía en el amor

• Decía era que el amor es como una especie de droga; te exalta, pero a su vez crea una fuerte dependencia, por lo que es posible convertirse en un gran adicto a él. Tal vez el amor sí existe, pero no es lo que todo el mundo piensa que es. Si tomas tu felicidad y la pones en manos de alguien, más tarde o más temprano, la romperá. Si le das tu felicidad a otra persona, siempre podrá llevársela con ella. Y como la felicidad sólo puede provenir de tu interior y es resultado de tu amor, sólo tú eres responsable de tu propia felicidad. No importa cuánto ames a alguien, nunca serás lo que esa persona quiere que seas.

Si no hubiera continuado leyendo, hubiera pensado que la mujer era mala al tirar la estrella, pero no imagine que la estrella fuera su felicidad que el hombre quería depositarle, es muy acertada esta historia ya que nadie puede ser dueño de tu felicidad si no le eres tú misma, la mujer tuvo miedo a aferrarse a esa “Droga” a esa dependencia, si nosotros no somos dueños de nuestra felicidad Nadie más podrá serlo ya que Dios nos mando para eso, para ser felices, con o sin alguien a nuestro lado, y también como mencionan, nunca seremos lo que las personas quieren que seamos así es la vida, Dios nos hizo diferente para sí aprende a amarnos con nuestros pros y contras eso es lo hermoso del amor, descubrir que hay mas allá de su sonrisa, de su mente o de su propio corazón.

El camino del amor, el camino del miedo

• Toda tu vida no es más que un sueño tu vida se compone de sueños: una infinidad de pequeños sueños que cambian constantemente. Todo ser humano tiene un sueño personal

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