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Soledas, Perdida De La Cordura..


Enviado por   •  8 de Abril de 2015  •  2.014 Palabras (9 Páginas)  •  259 Visitas

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“SOLEDAD, PERDIDA DE LA CORDURA”

Autor: Carvajal Greyci

Cátedra: Lengua Española

(Sección: FS1)

Desde el momento en el que entramos llorando al mundo, hasta el momento en el que nos despedimos de él, nos aseguramos de ir marcando nuestro destino a través de nuestros actos. Inconsciente o conscientemente, somos los responsables de que eso suceda. Es una cadena de actos e instantes lo que nos convierte en quienes somos y, en la mayoría de los casos, en lo que o quienes terminaremos siendo. Se trata al futuro como algo que nos podría dejar perplejos, se habla de utopías, todo para alcanzar la tan deseada felicidad absoluta pero, ¿no somos acaso nosotros los responsables de alcanzarla? ¿No somos nosotros capaces de escribir nuestra propia historia y finalmente, elegir nuestro futuro?. Los seres humanos vivimos bajo la constante tendencia de adjudicar nuestros males y errores a un tercero. Existe un quiebre, falta el punto vital en el que nos detenemos a pensar si no seremos nosotros los que realmente nos equivocamos. Crecemos y nos formamos con la capacidad de juzgar todo lo que nos rodea, pero difícilmente conseguimos juzgarnos a nosotros mismos.

Siempre buscamos comunicarnos. Ya sea de manera oral, o escrita, los seres humanos vagamos en busca de la manera mas simple y práctica de hacer llegar a otro lo que sentimos, necesitamos, o pensamos. Pero ¿Que pasa cuando esto no se logra?, cuando de un momento al otro no nos entendemos, cuando de un momento a otro la comunicación se ve interferida por elementos que impiden que el receptor reciba el mensaje del emisor. La falta de comunicación es un problema que puede desembocar y conllevar a causes de la vida del ser humano muy profundos. La depresión, la soledad, la desesperación son factores a lo que habitualmente el padeciente de este problema, decae o enfrenta, por la situación de incomunicación que esta sobrellevando.

Por ejemplo, en la novela de Ernesto Sabato “El Túnel”, se relata la historia de un hombre, Juan Pablo Castel, en los que continuamente busca la compañía de Maria. Una Maria con un gran déficit de homogeneidad, pero en eso me voy a detener mas tarde. En busca de querer comunicarse con María, se ve instalado en un campo de una soledad agobiante.

Juan Pablo presenta varias fases, en las cuales me animo a decir que cada persona del mundo, posee un mínimo porcentaje de estas fases, que están contenidas en acciones.

“Pero arriba, a la izquierda, a través de una ventanita, se veía una escena pequeña y remota: una playa solitaria y una mujer que miraba el mar. Era una mujer que miraba esperando algo… ”. Esto se encontraba dibujado en su pintura llamada Maternidad. Eso era solo una parte del cuadro que nadie se había fijado, solamente una persona presto atención en aquella escena, una mujer. María, simplemente María. Juan Pablo, buscaba una comprensión, una ayuda un entendimiento, y encontró todo eso que el buscaba en aquella mujer.

Podemos inferir que existe un problema en la infancia del narrador, específicamente en su niñez o juventud, al llamar al cuadro que se alude al principio de la novela como “maternidad” y que justamente la persona que se fijara en él y fuera posteriormente su gran amor se llamaría “María” nombre característico como la madre de todos.

El personaje de este libro, un hombre que continuamente da explicaciones, idealiza diferentes situaciones en su mente, crea centenares de hipotéticos casos, esperando, queriendo responder una respuesta que fue contestada con un: La recuerdo constantemente. Esto va a dar inicio a encuentros, momentos y situaciones a los que el personaje enfrenta.

Para comenzar a desarrollar una explicación del porque de mi preferencia al querer abordar un tema tan amplio como la soledad, conjeturo que seria correcto saber de que estamos hablando cuando decimos soledad. En una de sus tantas significaciones, según la Real Academia Española, la soledad es: la carencia voluntaria o involuntaria de compañía.

En esta novela, El túnel, publicada en 1984, se puede observar la soledad del individuo contemporáneo. Es por eso que me baso en muchas de sus citas. Juan Pablo Castel, se ve enjaulado en una soledad, física y espiritual que se desborda en un amor obsesivo, asfixiante e inseguro.

En varias situaciones del libro de Sábato, podemos observar, huidas repentinas de este personaje, que lo lleva a buscar amor en camas podemos observar, huidas repentinas de este personaje, que lo lleva a buscar amor en camas pasajeras, a desahogar penas en vasos de licor en un bar. Podemos observar también al ser un personaje con alharacas exiguas efusivas de amor y al mismo tiempo picos efusivos saturninos. En el capitulo XI dice: Me pasaba algo muy extraño: miraba con simpatía a todo el mundo. Pero justamente, esa persona que le hizo ver el mundo boato, que lo comprendió, fue precisamente como el dice: la persona que mate.

En Castel nacían pensamientos como “me anima la débil esperanza de que alguna persona llegue a entenderme, aunque sea una persona”. Tras esa conexión, surge en Castel una atracción que parte de la comprensión antes percibida, de tal forma que María representa un lampo de esa esperanza que él guardaba. Siendo María esa luz para Castel, era inestable, debido a que sembraba en él dudas, ya que trataba de ocultar respuestas a muchas de sus interrogantes, llevando a Castel a una ansiedad que produjo en su mente escenarios que hacían que el mismo complicara la situación.

Una vez encontrada esa luz que iluminó el oscuro túnel de Castel hace que su atracción aumente e inmediatamente se presenta en él un esclavizante temor de perderla y no concibe dejarla ir, sabiendo que dejaría a la única persona que lo ha llegado a comprender, de tal modo que se van formando de manera ineluctable paredes que lo hacen prisionero de una obsesión.

Según el filósofo Soren Kierkegard el cuestionar o dudar de algo que no tiene acceso perceptual puede conducir a la fe, es decir confiar en lo que lo que no se contempla. Partiendo de este pensamiento se puede decir

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