Utopia. Tomás Moro

Utopía. Tomás Moro

Libro Primero.

Trata de un dialogo entre Rafael Hitlodeo, Pedro Egidio y Tomás Moro.

Mientras transcurrió su encuentro Pedro diviso a otro amigo que para su juicio les podría proporcionar una grata conversación.

El nombre de esta persona era Rafael Hitlodeo, un gran conocedor de tierras lejanas por sus numerosos viajes.

Como era de esperar se saludaron y entablaron rápidamente una conversación llena de anécdotas por parte de Rafael sobre sus viajes.

Tomás tras un rato de conversación se animo a preguntarle como siendo un gran conocedor de costumbres, formas de vida y leyes de otros lugares, no se había puesto a la disposición de ningún monarca.

Rafael fue rápido en su contestación y argumento que no creía oportuno ponerse a servir a un rey que continuamente trata de temas militares y estrategias para poder aumentar su reino sin pararse a pensar que primero tendía que ocuparse bien de lo que poseía. Todas las respuestas que da, las amplía haciendo referencia a alguna situaciones de otras tierras.

En la conversación entre Pedro, Tomás y Rafael se tocan infinidad de temas: los ladrones, la pena de muerte, los intereses de los monarcas, la forma de gobernar de estos.

Con este último tema sale a relucir uno de los viajes de Rafael a una isla llamada Utopía, en la que él vivió durante cinco años.

Tomás y Pedro enseguida piden que les explique con todo detalle las costumbres, rituales, organización y de más aspectos de aquella isla. Rafael accede y comienza así con la descripción.

Libro Segundo.

I. Descripción de la Isla y los quehaceres cotidianos.

Utopía es una isla con una extensión de doscientas millas. Utopo fue quien se apodero de la isla la cual antes se llamaba Abrasa. Lleva al pueblo que era inculto y salvaje a un grado de civilización y cultura que se ponen por encima de los demás pueblos. La isla cuanta con cincuenta y cuatro grandes ciudades, entre ellos comparten misma lengua, cultura, instituciones, leyes. La cuidad principal es Amaurota, ahí es donde están los funcionarios y delegados, y donde concurren para solucionar problemas y debates.

Cada ciudad tiene terrenos cultivables, todos trabajan de forma pareja y van rotando de gente cada año del campo a la cuidad para que sea parejo el trabajo de ambos.

No hay problema con los funcionarios y actúan sin recibir nada a cambio.

II. Las ciudades; en particular, Amaurota.

Las ciudades son muy hermosas y muy parecidas unas con las otras, pero tiene sus diferencias; Amatura es un hermosa ciudad con ríos, manantiales y bellísimos edificios. Donde no existe la propiedad privada.

III. Los Magistrados.

Cada año cada grupo de treinta familias elige a su juez, llamado Sifogrante. Cada diez Sifograntes y sus correspondientes treintas familias están presididas por un protofilargo (jefe principal de tribu).

Los Sifograntes votan en secreto y proclaman Príncipe a unos de los cuatros candidatos elegidos por el pueblo, son cuatro porque la isla se divide en esa cantidad de distritos y cada uno presenta sus candidatos al senado.

Los problemas e intereses de los ciudadanos siempre tienen que ser discutidos por el senado. Y para cada situación deben reflexionar antes que hablar.

IV. El trabajo. Las artes y oficios.

La agricultura es una actividad común a todos, hombres y mujeres, y de las que nadie queda exento. Forma parte de la educación del niño desde su infancia.

La vestimenta tiene la misma forma para todos los habitantes.

Las mujeres se ocupa de las actividades más aliviadas y los hombres los más forzados.

Casi todos los niños son educados con la misma profesión que sus padres; si alguno se siente atraído hacia otros oficios, será encomendado a otra familia. Del mismo modo, si alguien especializado en un oficio y quiere aprender otro, se le permitirá hacerlo en idénticas condiciones.

La principal, misión de los sifograntes es hacer que nadie sea perezoso y que les importe el trabajo. Tiene que trabajar sin fatigarse, lo justo y necesario.

Ellos dividen el día en 24 horas incluyendo la noche, de las cuales solo trabajan seis.

Los magistrados trabajan como los demás ciudadanos.

V. Las relaciones mutuas.

La ciudad está compuesta por familias, y estas en general están unidas por lazos del parentesco. La mujer al tener la mayoría de edad núbil, es entregada al marido y de ahí vive con él.

La ciudad está dividida en cuatro distritos, en el centro de cada ciudad hay un comercio público donde los ciudadanos se abastecen.

Tiene un hospital donde hay mucha comodidad.

Cada familia comparte el almuerzo y la cena.

VI. Viajes

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