Semiología de la boca y anexos
vba_2003Resumen28 de Octubre de 2023
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ANATOMIA
La exploración de la cavidad oral y de la orofaringe deben formar parte del examen físico de cualquier paciente, pues además de ser sencilla y fácil de realizar, proporciona una información amplia y variada del estado de salud de la persona examinada.
La cavidad oral es una cavidad irregular, situada debajo de las fosas nasales y sobre la región suprahioidea, entre el maxilar superior y la mandíbula. El hecho de estar limitada por los labios, el velo del paladar, la bóveda palatina y la región sublingual, y de contener las encías, los" dientes, la lengua y las glándulas salivales sublinguales, sub-maxilares, labiales y linguales, le da a esta estructura un especial interés y una diversidad de patologías que son fáciles de reconocer en la mayoría de los casos.
Íntimamente relacionada con la cavidad oral está la orofaringe o mesofaringe, con la cual se comunica a través del istmo de las fauces. La importancia de la bucofaringe se acentúa aún más si se recuerda que en ella residen parte de las funciones digestiva, respiratoria, fonética, auditiva y gustativa.
Las estructuras anteriormente mencionadas deberán ser examinadas a través de dos métodos: la inspección y la palpación.La inspección será hecha directamente usando la luz natural o la luz proveniente de otra fuente luminosa.
RECUERDA QUE A CADA INSPECCIÓN SE LE DICE AL PACIENTE EL PROCESO A REALIZAR
INSTRUMENTOS
El instrumental usado para la exploración de la cavidad oral y de la orofaringe está constituido por un depresor lingual de madera, una fuente luminosa y guantes esterilizados
POSTURA DEL PACIENTE
Paciente adulto: Preferentemente el paciente se coloca sentado de frente al examinador. Esta exploración bucofaríngea es más fácil de hacer en un paciente consciente y colaborador. No se recomienda en hacerla en paciente agresivos
Paciente pediátrico: El paciente acostado en decúbito supino, es sujetado por su madre o un asistente, que se coloca en la cabecera del paciente. Si el paciente es un lactante, para facilitar el examen de la boca, la madre o un asistente sentado, con un brazo sostienen el cuerpo del lactante y con la otra mano, su cabeza.
EXPLORACIÓN DE LAS REGIONES LABIAL Y GENIANA
La región labial se extiende entre la base de la nariz y el surco nasogeniano, por arriba, y el surco mentolabial, por debajo. A los lados se extiende hasta uno o dos centímetros por fuera de ambas comisuras labiales. Para explorar esta región, el paciente deberá mantener la boca cerrada.
INSPECCION
Se realiza con los labios primero cerrados y luego abiertos
Forma: Delgados, Mediados, Gruesos o abultados
Color: Varia según la raza va de rojo a azulado, según fototipo de piel
Palidez, puede ser por:
- Anemia, si es labial
- Escarlatina, si es peribucal
- Cianosis, por problemas respiratorios o cardiovasculares
- Manchas grises azuladas, redondas, ovales o irregulares se asocia a síndrome de Peutz-Jeghers (buscar que es este síndrome)
TAMAÑO
- Macroqueilia, labios excesivamente grandes
- Microqueilia, labios excesivamente pequeños
SIMETRIA: Se explora con los cerrados se traza una línea imaginaria en todo el medio de los labios para observar si existe simetría o asimetria
HUMEDAD: Humedos y secos
GROSOR Según Bloch:
- Raza blanca: Labios delgados
- Raza mestizos: labios medianos
- Raza amarilla: Labios gruesos
- Raza negra: labios voluminosos
Nota: En nuestro país no existen diferencias étnicas puras.
LESIONES poner dibujitos
Lesiones tumorales: carcinoma de labio (placa ulcerada de labio inferior que no cicatriza), melanoma, chancro sifilítico (pequeña pápula que luego crece y se ulcera; indolora con borde indurado).
• Lesiones herpéticas: causadas por el virus herpes simple, microvesiculares, arracimadas, dolorosas y que evolucionan hacia la costra. En ocasiones se asocian al herpes nasal. Son altamente recidivantes y pueden pre- sentarse durante un proceso neumónico.
• Estomatitis angular o "boqueras": lesión dolorosa, habitualmente fisurada de los ángulos labiales por problemas protésicos dentarios, mala oclusión, deficiencia de vitamina B y candidiasis.
• Telangiectasias: su presencia en los labios y la mucosa bucal, asociada a sangrado nasal (epistaxis), es característica de la enfermedad de Rendu-Osler
• Dificultad para abrir la boca: por disminución del diámetro (microstomía); se observa en la esclerodermia.
- Herpes simple
- VPH
- Chancro sifilítico
- Queilitis, rasgaduras en los bordes de los labios, puede ser por deshidratación, ortodoncia o prótesis
PALPACION DE LABIOS
- Sensibilidad
- Consistencia
- Lesiones
- Tumoraciones
REPORTE:
Sanos: A la inspección se observa labios delgados, simétricos, rosados, de consistencia blanda, sin tumoración, no dolorosos a la palpación.
Para palpar las estructuras de la cavidad oral, el observador deberá colocarse frente al paciente y a su lado derecho. Deberá cubrir sus manos con guantes esterilizados y contar, además, con un paciente colaborador, no agresivo.
MUCOSA YUGAL E INTERNA DE LOS LABIOS
- Color: normal rosado. Palidez, anemia, Hiperpigmentación difusa de color pardo, enfermedad de Addison (buscar)
- Humedad
- Sensibilidad
- Textura
- Lesiones:
- Aftas
- Candidiasis
- Signo de Koplik
- Conducto parotídeo, se encuentra a nivel del segundo molar superior, se debe presionar la parótida correspondiente y evaluar la secreción de saliva a través del mismo (solo inspección de carillos)
La abertura labial da acceso a la cavidad oral, la cual se encuentra dividida por encías y dientes en dos regiones: una anterior o periférica, llamada región vestibular o vestíbulo oral, y otra posterior o central, llamada cavidad oral propiamente dicha.
EL paciente abre ampliamente la boca y el médico se ayuda con un depresor lingual de madera, el cual tomará por uno de sus extremos con los dedos pulgar, índice y medio derecho. Con esta maniobra apreciará la cara interna de los labios, los surcos yugales superior e inferior, las encías y la cara externa de los dientes, además de la mucosa de los carrillos.
Con sus dedos, pulgar, índice y medio de la mano derecha cubierta por un guante podrá palpar los labios del paciente y los carrillos. Estas estructuras deberán ser indoloras, de consistencia firme y elástica, sin nódulos o masas, a menos que correspondan a los pequeños nódulos de Fordyce de los labios.
Lo que se observará en cada zona:
Cara interna de los labios: es de color rojo y convexa. Se presenta con múltiples depresiones superficiales, las cuales aumentan con la edad. Estos pliegues recubren esta región, condicionados por la considerable elasticidad de los labios.
Además, las glándulas sebáceas aberrantes que se manifiestan como puntos amarillentos, llamados también gránulos de Fordyce, los cuales aumentan con la edad, y son muy raros antes de la pubertad.
Los surcos yugales: forman un fondo de saco entre la cara interna del labio y las encías, y entre el carrillo y la encía. Son dos, uno superior y otro inferior. Tienen un color rojo intenso, más intenso que el de la mucosa de los carrillos y el de los labios.
Se localizan pliegues llamados frenillos, de los cuales los más importantes son el, superior y el medio inferior. El surco yugal superior es necesario que el paciente incline un poco la cabeza hacia atrás y separe la cara interna del labio respectivo.
Los carrillos: forman la pared externa de la región vestibular. Son de color rosado oscuro, son aterciopelados (?), húmedos y lisos. Los pacientes de piel oscura poseen zonas de pigmentación oscura.
La superficie de los carrillos se pone tensa al abrir la boca y entra en contacto con la cara bucal del segundo molar superior, el orificio de salida del conducto de Stenon. Si se, comprime suavemente el carrillo con el depresor lingual de madera en una zona situada por detrás del conducto salivar, puede apreciarse con claridad la salida de saliva a través del conducto de Stenon.
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