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En 1889, La empresa La Universal fue fundada en Guayaquil Ecuador por dos señores, por Emilio Segale y Juan Bautista (hermanos) ambos con descendencia Italiana. Pocos años después en 1906, Se une a los hermanos Segale, su primo Domingo Norero, creando la sociedad Segale Hermanos y Cía. Más tarde (1911) la empresa La universal comienza a tener posicionamiento en el mercado con marcas fuertes como manicho, huevitos, cocoa etc. etc.

En 1927, El señor Emilio Segale toma el mando total de la empresa y empieza a exportar productos por Latinoamérica. Años de estar ya instalados en el mercado en el año 1969 La universal inaugura una planta en el sur de Guayaquil. Después de varios años de éxitos y productos reconocidos en el mercado La universal abre su segunda planta o fábrica (1993) ubicada en el Domingo Comín. La universal era la empresa más grande en el mercado de galletas, en 1999 decide expandirse y concentrar su producción y distribución en otros mercados como de fideos, caramelos, toffees, chocolates, cocoas y semielaborados de cacao.

En el 2000, La gran empresa ecuatoriana La Universal sufre una crisis financiera. El mercado ese año vendió 85,7 millones de dólares en caramelos, chocolates, productos de cacao y pastas. De estos, 26,9 millones le correspondieron a La Universal. El liderazgo de La Universal, antes de que cierre la fábrica, se basa especialmente en las tabletas de chocolate, donde la empresa tenía el 75% del mercado, seguido por Nestlé con 18% y Nacional con 5%. Dos años después de haberse anunciado la crisis financiera, La Universal deja de producir a inicios del año 2002 por problema de liquidez anunciado por propietarios. Hasta ese momento se empaquetaron los tradicionales Cocoa La Universal, Chocolate Superior, Manicho, Osito Blanco, Osito Negro, Huevitos, entre otros. El balance general de La Universal mostro que las marcas de esta fábrica, que son 203, tenían un valor superior a los 36,1 millones de dólares en el momento del cierre. El estudio señala que el costo bajó debido a que inciden factores como la fidelidad del comprador, la calidad percibida y el liderazgo de los productos, Algunos como Tango y Galletas de Coco, cuyos nombres comerciales los adquirió Nestlé. También compró las marcas Muecas, galletas Amor, Ricas, Surfinas, Morenitas, Wafferito, Crackers, Daysi, Bandido y Zoología.

En el 2003, Filanbanco y la Inspectoría del Trabajo de Guayaquil ordenan el embargo de marcas y bienes de la fábrica (inmuebles, maquinarias etc. etc.), por las deudas pendientes. La deuda que la fábrica mantenía era de 25 millones de dólares, y los ex trabajadores y jubilados, con 8,5 millones. Sin la competencia de La Universal, el mercado cambió. Nestlé subió al 31%, Nacional al 20%. Lo mismo sucedió en los casos de las otras empresas. Estas cifras, que constan en el informe de valoración de marcas que realizó el perito Juan Alvarado a pedido de la Inspectoría

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