Perfil profesional del gerente

PERFIL PROFESIONAL DEL GERENTE

El reto actual para los gerentes del siglo XXI: deben ser obviamente formarse un nuevo perfil, con una capacidad gerencial integralmente direccionados, con una inteligencia emocional, que les permita reaccionar positivamente a los diversos comportamientos de la gente con quien trabaja, como también requieren de una metodología de desarrollo de seguidores donde se haga efectivo el trabajo por competencias, siendo el reconocimiento, la motivación y la acción, las directrices para contar con un personal humano, que enfoque sus emociones, permita lograr un clima organizacional exitoso y sobre donde se promueva el amor y el respeto, desde donde luego pueda trascender hasta sus familias y desde allí se logre cambiar la sociedad, hoy carente de valores y de sentido de vida. Para formar con éxito un nuevo gerente, que tenga un perfil para accionar en este siglo XXI, se requiere el desarrollo de cualidades para asumir comportamientos como: capacidad para escuchar, concentración en sus objetivos como líder, ser organizado al trabajar con estrategias, dispuesto a sus gerenciados, es decir, poniéndose a su mismo nivel al facilitar la comunicación en un clima de confianza, propiciar la participación de su equipo para desarrollar sus ideas, valorar a los creadores de ideas mediante reconocimiento, y ser líder de gran seguridad y decisión. El gerente entonces se constituye en el cerebro de la organización en sus diferentes niveles, ya sea estratégico, táctico u operativo. De acuerdo a su nivel jerárquico, este gerente tiene mayor responsabilidad, pero siempre tendrá compromiso total de lo que pase o deje de pasar en la organización debe ser un líder inspirador y servir de modelo para sus trabajadores, solo así el clima laboral será óptimo y será más fácil obtener los resultados planeados.

El éxito de estos gerentes se basará en entender por lo tanto que lo que funciona hoy mañana dejará de funcionar. La adaptación al cambio y una visión estratégica pasan a ser obligatorias y prácticamente decisivas, para los nuevos gerentes-líderes del siglo XXI, "Hacer lo mismo" o "seguir igual" son expresiones desterradas de la argumentación empresarial moderna.

DEDICATORIA

Este presente trabajo se lo dedico a Dios, primeramente, por permitirnos seguir forjándonos un mejor futuro, puesto que nos brinda sabiduría, amor y paciencia, nos ayuda en los momentos más difíciles brindándonos valores que nos fortalezcan no solo como trabajo de grupo, sino como personas. A la vez también dedicamos este trabajo a nuestros padres por el apoyo incondicional en cumplir nuestra meta; y al profesor por brindarnos las enseñanzas, por su conocimiento en cada clase, nos brindó su sabiduría en distintos campos cognitivos, ayudándonos así en varios aspectos que requerimos para el desarrollo de nuestro trabajo; y por último agradecernos a nosotros por el esfuerzo y empeño brindado para que este trabajo sea de su agrado.

INTRODUCCIÓN

El gerente del siglo XXI, ante los retos que plantean las nuevas tendencias mundiales como: la globalización, los cambios económicos, ambientales y tecnológicos. La tecnología genera nuevos modelos gerenciales, los mercados se abren, el paradigma de la competitividad y la productividad. Los gerentes modernos estamos expuestos a muchas presiones generadoras de estrés; hecho que, según la OMS (Organización Mundial de la Salud), está entre las tres enfermedades que cobran más muertes en el mundo. El campo de juego gerencial ha cambiado: por ende, la gerencia del siglo XXI requiere un perfil de administrador- gerente diferente. Por esto el gerente líder del siglo XXI se debe formar, capacitar, entrenar en aquellas habilidades-competencias requeridas por este nuevo entorno. Por tal razón debe generar dos sets de competencias: las de gerente integral y el desarrollo de la capacidad directiva. Frente a esta realidad, presento en este proyecto una descripción epistémica de la formación que se debe caracterizar al gerente del siglo XXI como un aporte para ser incorporado a los diferentes cambios cónsonos con las exigencias de las organizaciones actuales; las cuales demandan dominio de tecnología, conocimiento de mercado, humanismo, creatividad, innovación, estrategia y liderazgo. Al enfrentar el siglo XXI, nos encontramos con paradigmas rápidamente cambiantes, que obligan a quienes gerencian las organizaciones e instituciones, a crear nuevos conceptos paradigmáticos con un ritmo acelerado para poder actuar en vez de reaccionar; exigiéndole a estos gerentes del milenio, mayores compromisos a partir de actitudes y prácticas, así como de una gran responsabilidad centrada en su accionar en pro de la visión y misión de la organización ejecutada por su personal, porque hoy en día más que un administrador de recursos se requiere de un gerente de personas.

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