Toma individual de decisiones. En el terreno de la economía teórica

Toma individual de decisiones

Todos los días tomamos decisiones relacionadas con todos los aspectos de la vida cotidiana, generalmente tomamos esas decisiones sin detenernos a pensar como lo hacemos y en qué consisten el proceso de tomar decisiones. Una decisión consiste en la selección de una opción a partir de dos o más posibilidades alternativas, para que un individuo tome una decisión es necesario que haya varias alternativas disponibles a elegir. Cuando una persona toma la decisión de realizar una compra o no, realiza la decisión de comprar marca X o marca Y, esto toma de su esfuerzo en hacer comparaciones, dedicar cierto tiempo a la actividad de decidir, por otro lado cuando el consumidor no dispone de alternativas entre las cuales elegir y literalmente se ve forzado a efectuar una compra determinada o a realizar una acción específica, entonces esta situación se reduce a una sola no elección que no implica decisión alguna; a esta decisión sin opciones se le conoce comúnmente como una decisión de Hobson. En la actualidad estas decisiones donde el consumidor no tiene otra alternativa es bastante rara, la mayoría de las veces existe la posibilidad de elegir, entonces casi siempre existirá también la oportunidad de que los consumidores tomen decisiones. No todas las situaciones donde el consumidor toma decisiones requieren que la búsqueda de información tenga el mismo grado de intensidad, si todas las decisiones de compra requirieran un esfuerzo extenso, entonces la toma de decisiones del consumidor se convertirá en un proceso agotador, que dejaría poco tiempo para otra actividad. Por otro lado si las actividades fueran rutinarias terminarían por volverse monótonas y producirían escasas sensaciones de placer o novedad. Se distinguen tres niveles específicos para el proceso de toma de decisiones del consumidor: resolución extensiva de problemas, resolución limitada de problemas y comportamiento de respuesta rutinario.

Cuando los consumidores no disponen de criterios establecidos para evaluar una categoría de productos o ciertas marcas específicas dentro de esa categoría, o cuando no han reducido todavía el número de marcas en consideración a un subconjunto manejable, sus esfuerzos encaminados a la toma de decisiones se clasifican como una resolución extensiva de problemas. En la resolución limitada de problemas los consumidores ya han establecido los criterios básicos a partir de los cales evaluaran la categoría de productos en cuestión, y las diferentes marcas incluidas está. En el comportamiento de respuesta rutinario los consumidores y atienen cierta experiencia en la categoría de productos de su interés y disponen de un conjunto de criterios bien establecidos para evaluar las marcas en cuestión. El grado en que será extensiva la labor del consumidor para resolver el problema dependerá de cuan bien establecido estén sus criterios de selección, cuanta información posea sobre cada una de las marcas que esa considerando y en qué grado haya reducido el número de marcas ente las cuales deberá realizar su selección. La expresión modelos de consumidores se refiere a un punto de vista o perspectiva general acerca de cómo los individuos se comportan como lo hacen. El primero es un punto de vista económico se afirma que el consumidor toma decisiones en forma racional, este modelo conocido como la teoría del hombre económico. Para comportarse racionalmente en el sentido económico, el consumidor tendrá que estar consciente de todas las alternativas de productos disponibles, ser capaz de evaluar correctamente cada una de las alternativas en términos de sus ventajas y sus desventajas y estar en condiciones de identificar cual es la mejor alternativa.

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