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Un Emprendedor Nace O Se Hace


Enviado por   •  4 de Junio de 2015  •  6.303 Palabras (26 Páginas)  •  599 Visitas

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LA HISTORIA DE LA TORTUGA Y LA LIEBRE La tortuga y la liebre.

(Tomado de La Culpa es de la Vaca 2 , José Lopera Gutiérrez y

Marta Inés Bernal Trujillo).

I

Una tortuga y una liebre siempre discutían sobre quién era la más rápida. Para dirimir el conflicto de opiniones, decidieron correr una carrera.

Eligieron una ruta y comenzaron la competencia. La liebre partió a toda velocidad y corrió enérgicamente durante un buen rato. Luego, al ver que había sacado muchísima ventaja, decidió sentarse debajo de un árbol para descansar unos momentos, recuperar fuerzas y luego continuar su marcha. Pero

pronto se quedó dormida. La tortuga, que andaba con paso lento pero constante, la alcanzó, la superó y terminó en punta,

declarándose ganadora indiscutible de la carrera.

Moraleja: Los lentos pero constantes y perseverantes, también ganan la carrera.

II

Pero la historia no termina aquí, sino que prosigue...

La liebre, decepcionada por haber perdido, hizo un examen de conciencia y reconoció su grave error de subestimar a la tortuga. Se dio

cuenta de que por presumida y descuidada había perdido la carrera. Si no hubiese subestimado a su oponente nunca la hubieran podido vencer. Entonces desafió a la tortuga a una nueva competencia. Esta

vez la liebre corrió sin descanso desde el principio hasta el fin y su

triunfo fue contundente.

Moraleja: Los rápidos y tenaces vencen a los constantes y perseverantes.

III

Sin embargo la historia tampoco termina aquí...

Después de ser derrotada, la tortuga reflexionó detenidamente y llegó a la conclusión de que no había forma de ganarle a la liebre en velocidad. De la manera como estaba planteada la carrera, ella siempre perdería.

Por eso, desafió nuevamente a la liebre, pero propuso correr por una ruta distinta a la anterior. La liebre aceptó y corrió a toda velocidad, hasta que se encontró en su camino con un ancho río. La liebre no sabía nadar, y mientras se preguntaba "¿qué hago ahora...?", la tortuga nadó hasta la otra orilla, continuó con su paso lento pero constante y terminó la carrera en primer lugar.

Moraleja: Quienes identifican su ventaja competitiva y cambian el entorno para aprovecharla, llegan primeros

IV

Esta historia aún no termina...

Pasó el tiempo, y tanto compartieron la liebre y la tortuga que terminaron haciéndose amigas. Ambas reconocieron que eran buenas competidoras y decidieron repetir la última carrera, pero esta vez corriendo en equipo.

En la primera parte la liebre cargó a la tortuga hasta llegar al río. Allí, la tortuga atravesó el río a nado con la liebre sobre su caparazón y, ya en la orilla de enfrente, la liebre cargó de nuevo a la tortuga hasta llegar a la meta.

Como alcanzaron la línea de llegada en

tiempo récord, sintieron una mayor satisfacción que la que habían experimentado en sus logros individuales.

Moraleja: Es bueno ser individualmente brillante y tener fuertes capacidades personales. Pero, a menos que seamos capaces de trabajar con otras personas y potenciar recíprocamente las capacidades de cada uno, no seremos completamente efectivos

Es importante advertir que ni la liebre ni la tortuga abandonaron la carrera. La liebre evaluó su desempeño, reconoció sus errores y

decidió poner más empeño después de su fracaso. Por su parte, la tortuga, al notar que la velocidad era su mayor debilidad, decidió cambiar su estrategia y aprovechar su fortaleza como nadadora, en un nuevo recorrido. Después de varias contiendas, la tortuga y la liebre descubrieron que unidas lograban mejores resultados.

La liebre y la tortuga también aprendieron otra lección vital:

Cuando dejamos de competir contra un rival y comenzamos a competir contra una situación, no sólo complementamos capacidades, compensamos debilidades, potenciamos nuestros recursos... ¡sino que también obtenemos mejores

resultados!

Todos tenemos carreras por delante, y hay muchas maneras de ganarlas. Hay muchas liebres, muchas tortugas... ¡y muchas metas que alcanzar!

Finalmente: No se reúna con un grupo fácil y conformista, no le harán crecer. Vaya donde sean muy altas las exigencias y las expectativas de desempeño.

EL SER HUMANO: EMPRENDEDOR POR NATURALEZA.

¿El emprendedor nace o se hace?

Pregunta planteada desde hace mucho tiempo y que cuya respuesta definitiva aún continúa en debate.

Algunos autores establecen que el emprendedor nace, otros dicen que se forma en el transcurso de la vida. bien, aquí una explicación del autor Pedro Flores: "existe sólo una respuesta a esta interrogante: el ser humano es emprendedor por naturaleza. Las personas están dotadas de habilidades o capacidades para iniciar acciones o actividades que le signifiquen mantener su vida, desarrollarse y alcanzar niveles de mayor bienestar. Estas habilidades constituyen un patrimonio o herencia propio de la especie, mediante las cuales el hombre ha desarrollado la sociedad humana, con todos sus defectos y virtudes.

Desde el momento del nacimiento, más aun, desde su concepción, el ser humano hace un esfuerzo por alcanzar satisfactores que están disponibles en el entorno, que le reporten la satisfacción de una necesidad. Por supuesto, es la madre y la familia los agentes casi exclusivos que le brindan ese logro y le permiten sobrevivir en

...

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