Conductas Problema

NECESIDADES EDUCATIVAS ESPECIALES DE LAS NIÑAS Y LOS NIÑOS CON PROBLEMAS DE CONDUCTA

En la actualidad los docentes nos enfrentamos cada vez más con alumnos que presentan problemas de conducta, situación que nos ha llegado a causar sentimientos de frustración y desesperación pues no contamos con las herramientas necesarias para atender a estos alumnos. Por lo tanto es importante que comencemos por conocer más sobre el tema.

March define como niños con trastornos de conducta aquellos que presentan dificultades para adaptarse a entornos nuevos, que tienen un temperamento difícil, que presentan trastorno negativista, desafiante, o conducta antisocial y con una patología seria. En cuanto a etiología está el componente hereditario y biológico y la influencia del ambiente. Las conductas problemas suelen tener cuatro finalidades que es la búsqueda de atención, escapar a una tarea, búsqueda de un bien material o actividad reforzante y la descarga emocional o física.

Así mismo se define la conducta disruptiva como aquella conducta inapropiada que no se ajusta a las normas socialmente aceptadas, por ejemplo, no obedecer a padres u otros adultos, no respetar los límites, transgredir las reglas, dañar o amenazar a otras personas o a sí mismos, dañar o destruir pertenencias ajenas, mentir, robar, discutir frecuentemente, rehusarse a hacer las tareas diarias, tener conductas ofensivas o hirientes hacia los demás y ser insolentes. El alumno que presenta esta conducta suele mostrarse frecuentemente "nervioso", irritable, enojado, provocador, insatisfecho, aburrido, demandante, desafiando permanentemente la autoridad, pudiendo encontrarse aislado socialmente y sin amigos.

Se considera que existe un trastorno de conducta disruptiva cuando la severidad y la duración de la conducta interfieren en el aprendizaje, la relación con pares y el funcionamiento familiar.

Ante estas conductas los adultos solemos recurrir al castigo, que en corto plazo pueden ser efectivos, sin embargo a la larga los castigos refuerzan la conducta que se quiere controlar generando resentimiento en los alumnos.

Algunas acciones para su prevención son: prever de seguridad al alumno a través de la relación con el personal, el establecimiento de unos límites claros, un equipo firme y sin fisuras, un marco flexible y dinámico.

Para realizar una evaluación de la conducta disruptiva se deberán utilizar varios instrumentos principalmente una escala de observación, plantearse algunos indicadores como la definición de la conducta problema, análisis de las causas y el análisis de las consecuencias.

Para poder controlar y mejorar las conductas disruptivas en los alumnos es necesario que el docente cuente con una serie de herramientas como pueden ser: Brindarles amor y comprensión, contar con el apoyo de los padres, no ser excesivamente severo, controlador y limitante, ni tampoco excesivamente frágil, organizar hábitos y rutinas, organizar grupos de trabajo e integrarlo, ocuparlos en actividades de su interés, y en otras como dramatizaciones, cuenta cuentos, juegos didácticos, motrices y sociales, tener en el hogar una mascota que llene ese espacio de ocio, así como aprender a manejar con tolerancia las situaciones que se presenten.

Esto nos permitirá tener un acercamiento que será importante para su desarrollo, al sentirse más queridos, pero sin dejar de ser firmes en caso de situaciones que requieran de mano dura.

En conclusión puedo decir que al enfrentarnos ante estas situaciones tenemos que asumir una actitud positiva, abierta, de responsabilidad, y no delegar responsabilidades a otras personas, sino afrontar la situación, documentarnos primeramente, buscar apoyos externos a especialistas o instituciones que nos puedan orientar o apoyar en la búsqueda de soluciones, formar un equipo de trabajo en conjunto con director, docente,

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