ENSAYO SOBRE LA TOMA DE DECISIONES WILLY FERNEY VELANDIA

ENSAYO SOBRE LA TOMA DE DECISIONES

WILLY FERNEY VELANDIA

La vida es una constante toma de decisiones, unas resultan ser acertadas, otras no tanto, unas nos pueden llevar por buen camino, otras por un laberinto sin salida, en la mayoría de los casos somos conscientes de las decisiones que tomamos y sabemos los posibles riesgos que puede conllevar el tomar alguna decisión.

Según en la situación en la que nos encontramos, así mismo puede variar nuestra toma de decisiones, por ejemplo, si nos encontramos bajo presión, o en situación de peligro, podemos reaccionar más por instinto que por una decisión planeada y analizada con el debido tiempo. Al respecto, Nezu (2004) afirma: “…posiblemente se elija muchas veces el curso de acción sin hacer ningún plan y sin extrapolar las consecuencias, sino más bien siguiendo las primeras reacciones automáticas que se han generado en la situación o simplemente se evite la preocupación y la toma de decisiones”. Posiblemente nos estemos enfrentando a un estilo impulsivo de decisión, aunque no es común que este estilo sea predominante, existen profesiones o actividades que lo hacen dominante, por ejemplo, la profesión de ser soldado que en muchas ocasiones debe tomar decisiones casi que automáticamente por la presión y el peligro que su labor conlleva.

        Hay momentos en la vida personal y laboral en los que no nos sentimos seguros de tomar decisiones solo, donde la duda y la incertidumbre nos invade, nos encontramos entre la espada y la pared, sin saber si la decisión que estamos a punto de tomar sea la más adecuada o si seré capaz de asumir las consecuencias de tomarla. En este punto aparecen los influenciadores, que son personas que influyen directa o indirectamente en las decisiones que tomamos, por ejemplo, la familia y los amigos, ejercen un poder de influencia bastante alto en las decisiones que tomamos diariamente.

        En el ámbito laboral se hace necesario para cualquier profesional tomar las decisiones más acertadas posibles, debe evitarse tomar decisiones al azar, o sin la completa claridad sobre lo que conlleva tomarla, menos si no se está preparado para asumir la toma de decisiones equivocadas, el profesional debe desarrollar habilidades y destrezas que le permitan tomar las decisiones que favorezcan a la compañía que representan o a sus propias empresas para quienes son sus propios jefes, entonces cobra importancia todo lo aprendido desde casa, el colegio, la universidad y la experiencia del día a día, teniendo en cuenta que las decisiones pueden ser tan acertadas o tan graves como pueda imaginarse. Debemos evitar ser tentados por aquellos infuenciadores negativos que pueden hacer que tomemos decisiones que vayan en contra de lo legal o de lo ético, al respecto Yupanqui (2009) afirma: “La forma en que los individuos toman decisiones en las organizaciones y la calidad de las opciones que eligen está influida principalmente por sus percepciones, por sus creencias y por sus valores”.

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