ESCUELA DE PSICOLOGÍA ACTIVIDAD SUMATIVA N3

REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA[pic 1]

UNIVERSIDAD BICENTENARIA DE ARAGUA

FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES Y ADMINISTRATIVAS

VICERRECTORADO ACADÉMICO

DECANATO DE SALUD Y DESARROLLO HUMANO

ESCUELA DE PSICOLOGÍA

ACTIVIDAD SUMATIVA N3

Integrantes:

Saluzzo G, María J CI.V 30034876

San Joaquín de Turmero, julio de 2022

Se entiende por cognición social al grupo de procesos mentales que se oculta tras las interacciones sociales e interpersonales, es decir el estudio de la forma en la que codificamos, procesamos y almacenamos la información social que recibimos. Dichos procesos permiten percibir, analizar y generar respuestas ante las emociones y comportamientos de otras personas y nuestras referencias personales. La información es percibida por nuestros sentidos, interpretada por las emociones y almacenada por la memoria.

Esta corriente de la psicología social expone que la conducta esta medida cognitivamente, donde la interrelación con los demás es una proyección que hace referencia al reflejo propio de la persona, los demás y el contexto donde se encuentra la misma.

Según Fiske y Taylor (1991) es el “conjunto de procesos mediante los cuales interpretamos, analizamos, recordamos y empleamos la información sobre el mundo social. Cómo pensamos acerca de nosotros mismos, de los demás y su comportamiento y de las relaciones sociales, y cómo damos sentido a toda esa información”

Actualmente, la cognición social es el modelo y enfoque dominante en la psicología social. Esta surge en oposición al conductismo puro, el cual rechazaba la intervención de procesos mentales a la hora de explicar el comportamiento (Skinner, 1974).

Por su parte un esquema son estructuras cognitivas compartidas, un marco mental independiente que figura conocimiento abstracto de estímulos en común que facilitan la comprensión de alguna información.

Los esquemas actúan como un filtro donde se percibe información con los mismo y dirige la atención a lo que es relevante, ayuda a interpretarla y recuperarla cuando se amerita recordarla, eliminan la información irrelevante para completar y resolver dudas. De igual manera todo esto ocurre a nivel preconsciente y de forma automática.

Asimismo, los esquemas guían las interacciones sociales con los demás. Por ejemplo, el efecto Pigmalión son esquemas acerca de la influencia que tiene una persona sobre otra, respecto a la imagen que esta tiene de ella, o sea la idea que tienen ciertas personas sobre otras y pueden llegar a generar expectativas determinadas que influyen en su comportamiento, puesto que se busca cumplir las expectativas creadas sin modificar el esquema.

El psicólogo Frederic Barlett expone el concepto de esquemas como parte de su teoría del aprendizaje, añadiendo que la comprensión del mundo se conforma de una red de estructuras mentales abstractas.

La percepción interpersonal es una sucesión donde un individuo analiza y organiza su impresión de otra persona y establece un significado acerca de los otros. Es un área de la psicología, que considera la percepción una parte fundamental de la comunicación afectiva por su disposición a analizar diferentes juicios que se hacen respecto a los demás basándose en señales verbales y no verbales.

La percepción en las relaciones interpersonales depende de sus relaciones reciprocas, la autovaloración que percibe de sí mismo y la influencia de la percepción hacia la otra persona, puesto que cada individuo proyecta la información del otro con la representación de sí misma, y busca mantener la opinión que este ha formado de él

En tal sentido la misma se caracterizan por percibir personas y no objetos, el objeto-persona es polifacético y varía según el contexto y permite una interacción perceptiva, comunicativa y crea expectativas Estos factores van desde los sociales, psicológicos, emocionales y dependiendo de ellos se dan las percepciones.

Según (Bruner y Tagiuri, 1954) la Percepción Social es el proceso por el cual nos formamos una primera impresión de una persona y establecemos una relación con ella. Incluye aquellos procesos de índole cognitiva mediante los cuales elaboramos juicios relativamente elementales acerca de otras personas.

Por otra parte, la primera impresión es un fenómeno interactivo, una atribución rápida del subconsciente a rasgos característicos de la personalidad mediante pequeños elementos resaltantes. Estas se realizan diariamente a los pocos segundos de conocer a alguien, y pueden darse sin siquiera hablar con ella, pero desde el momento que se observa se elabora inconscientemente una teoría acerca de quién es y cuales son rasgos de su personalidad.

Según el planteamiento de Salomón Asch (1946) “cuando conocemos a una persona, nos formamos una primera impresión global a partir de los fragmentos de información que recibimos sobre ella”. Expone que en dicha impresión se concibe una especie de imagen que une diversos elementos que forman una imagen total, donde los rasgos se relacionan unos con otros.

Las características más relevantes son denominadas rasgos centrales, mientras que las que tienen una mínima importancia en lo que percibe una persona de otra se denomina rasgos periféricos, los rasgos centrales hacen la impresión total y disminuyen el significado de los otros rasgos.

La primera impresión se forma a través de los rastros visuales y la información que se adquiere del rostro, puesto que el cerebro es capaz de recoger toda la información a primera vista para dar un juicio de la persona que conocemos, sabe que las pistas faciales son las más significativas ya que el rostro puede expresar muchas emociones que pueden orientar en la interacción, esto ocurre porque al conocer a alguien las personas suelen asociarlo con características físicas parecidas a un individuo que ya conoce, atribuyéndole características positivas mientras más similitud tenga al conocido reflejando una actitud receptiva.

Vinculado a esto los fenómenos inherentes a los procesos de globalización y formación de primeras impresiones, se encuentran los constructos conocidos como un fenómeno que no tiene realidad empírica se emplea como un objeto de estudio el cual permite conocer y manipular situaciones difíciles de interpretar, determina percepciones individuales al ser considerada una categoría descriptiva bipolar donde cada individuo organiza los datos de la realidad.

Como se mencionó anteriormente los rasgos centrales son características resaltantes entre las demás, los demás rasgos son extrínsecos, estos sirven para armonizar la impresión que se tiene al conocer a alguien.

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