El Comportamiento Del Adolescente En La Escuela

No se puede comparar el comportamiento y el trato de un adolescente con el de un adulto. Hay que recordar que un adulto es una persona preparada y madura; el adolescente, en cambio, es quien vive una serie de etapas y procesos tanto psicológicos como físicos. No es maduro, ni tampoco está preparado. Se encuentra más bien en un transcurso de “aprendizaje”, porque eso es lo que es el adolescente: un producto en proceso de aprendizaje.

Me tocó darle una visitadita a la escuela secundaria José Rafael Campoy, y en el trayecto de mi visita me percaté en las interacciones o relaciones que tenían los chicos con sus compañeros y adultos. La mayor cantidad de adolescentes recién ingresados se mostraban muy respetuosos ante el personal mayor. Utilizan los modales como: compermiso, buenos días, adiós, hasta luego...; los demás, que eran de 2do y 3er año, no hacían mucho uso de los modales, eran más juguetones tratándose entre sí, bromistas y payasos (con los adultos y sus compañeros). Lo que sí vi es que había buena comunicación entre adolescente-adulto.

En cuanto a su lenguaje, son muy mal hablados, esgrimen palabras altisonantes y “leperadas”. Les gusta hacer tonterías para llamar la atención, como por ejemplo, subirle la mochila a un compañero a un lugar alto, para que todos lo vean y después se rían y lo llenen de vítores y aplausos. Le festejan, pues. Tratan de peinarse, vestirse, y actuar como sus amigos, o como algún artista del momento. Son vanidosos, y muy susceptibles a cualquier comentario que le haga uno de sus compañeros. Se enojan fácilmente, llegan a agredir con palabras e incluso a utilizar la violencia física.

En su tiempo libre, se juntan en grupitos en diferentes partes. Los calmados se quedan en el salón platicando con los suyos, o caminan por los pasillos, no alzan mucho la voz, son un poco callados; los alocados intentan sentarse en un lugar donde puedan exponerse para que todos vean las tonterías que hacen; los músicos se sientan en un lugar donde haya sombra y por lo general en las esquinas o en el jardín. Las chicas “fashionistas” deambulan platicando por toda la Campoy con tal de que las vean y los chicos les chiflen; hay un que otro chico solitario, y no faltan los que siempre molestan a los compañeros burlándose o haciéndoles cosas malas.

Hablando acerca de los comportamientos que manifiestan regularmente los alumnos en la escuela sería rebeldía, desorden, incomprensión. Como comenté anteriormente les fascina llamar la atención, gritan y pelean sin causa por algo que no era necesario discutir, sus sentimientos se desbordan como en una montaña de nieve, y conforme la rueda de sentimientos va dando vueltas se hace más y más grande.

Así pues, observé que cada día era parecido al anterior. Al momento de entrar a la escuela, los adolescentes se muestran calmados, serios, casi sin ganas de entrar a clases. Platican con sus compañeros

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