LA VIDA DETRÁS DE UN MURO INVISIBLE

I. “LA VIDA DETRÁS DE UN MURO INVISIBLE”

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Estudiar el autismo supone para la psicología un reto desde muchos sentidos no sólo metodológicos, también teóricos y metateóricos; en parte porque abordar un trastorno que supone una alteración en la comunicación dentro de su sintomatología trae consigo una posible barrera adicional al acercamiento del fenómeno. El autismo ha sido comparado con un muro que no se puede ver con la vista ordinaria, sino que requiere de la capacidad de contactar con quien pareciera no importarle dicho contacto.

Hablar de autismo en estos días se ha vuelto mucho más frecuente e inclusive popular, no sólo por la mayor incidencia de casos en el mundo, como también por el “descubrimiento” que los medios de comunicación han hecho del mismo; haciendo notar a través de artículos, musicales, películas biográficas., personajes de televisión (series y novelas) que el autismo está hablando y es hora de escuchar.

Como parte de la cátedra de Autismo: la vida detrás de un muro invisible, y fruto de la problematización de varios puntos acerca de la integración de personas con autismo en ámbitos cotidianos y espacios del saber los autores se interrogan sobre cómo conciben estudiantes de la Universidad Central de Venezuela que las personas con autismo estudien a nivel universitario y ejerzan profesionalmente.

1.1. DEFINICIÓN Y CARACTERÍSTICAS PRINCIPALES

El autismo se puede incluir dentro de los trastornos generalizados del desarrollo (TGD), el cual se manifiesta antes de los 3 años y que se caracteriza porque afecta áreas relacionadas con la interacción social, la conducta, la comunicación, lenguaje y el desarrollo cognitivo.

Para hacer referencia al autismo, es importante aclarar que esta condición se encuentra reflejada dentro de un continuo llamado Espectro Autista ya que existen muchas diferencias las cuales se pueden ver moduladas por variables tales como la edad, el nivel intelectual de la persona que lo sufre y la gravedad de su cuadro.

Es cierto que cada niño con autismo se diferencia de sus pares, pero dentro de este amplio rango de características, destacan tres aspectos que son comunes y que deben estar presentes para poder evaluar en qué lugar del espectro se encuentra la persona:

• Alteración de la interacción social: lo que separa a los niños con autismo del resto es la calidad de su interacción social, la reciprocidad en ésta y realizan o no interacción. se encuentra muy limitada su capacidad de empatía, de ponerse en la perspectiva de otra persona y de comprender las motivaciones, las creencias y los sentimientos de los demás y de ellos mismos. Todo esto puede provocar que el niño se aísle de forma significativa en el desarrollo de la relaciones con los demás.

• Alteración de la comunicación: se puede encontrar un retraso o ausencia total del desarrollo del lenguaje oral. Del mismo modo, en alumnos con habla adecuada. Utilizan el lenguaje de forma estereotipada y repetitiva, también presentan peculiaridades en cuanto al volumen, entonación, velocidad y ritmo o acentuación. Hay evitación del contacto visual, incapacidad para entender las expresiones faciales, posturas corporales o gestos. Manifiestan además incapacidad para comprender ideas abstractas, interpretar bromas simples,

• Inflexibilidad: se caracterizan por ser frecuentes, repetitivos, intensos y solitarios, cuando son pequeños responden a estímulos visuales, sin embargo tienen grandes dificultades para desplazar la atención visual, voluntariamente y sin esfuerzo. Estos niños son de naturaleza compulsiva, se deben establecer rutinas para mantener el comportamiento del niño lo más constante posible y de esta forma se sienta más seguro.

II. LA INCLUSIÓN ESCOLAR ES POSIBLE

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El éxito de la integración o el fracaso se basa en la calidad y cantidad de las interacciones entre el niño y sus compañeros que se establecen en el ámbito escolar. El apoyo que requieren los niños y niñas con autismo es precisamente, debido a las dificultades que antes señalábamos, en el ámbito de lo social y lo comunicativo. A los niños y niñas con autismo hay que guiarles paso a paso y con extrema paciencia en él, para ellos, incomprensible y complejo laberinto de lo social y lo afectivo.

Además se sabe que los alumnos con autismo se benefician más de actividades de apoyo en grupo que individuales, porque la metodología grupal les permite:

-Comprender que no son los únicos que experimentan dificultades, lo cual fortalece su capacidad de afrontamiento.

-Aprender del modelo de algunos compañeros.

-Realizar ensayos de conducta “en vivo” para el desarrollo de habilidades sociales o la cualificación en el desempeño social.

-Desarrollar habilidades de trabajo colaborativo, para aprender a desempeñarse en situaciones de grupo en diferentes entornos.

III. LA EDUCACIÓN PARA LOS ADULTOS CON AUTISMO

(EL AUTISMO HOY)________________________________________

3.1. OBJETIVOS DE LA EDUCACIÓN DE ADULTOS

(De Natale,2003 c.p. García-Villamisar y Cols., 2004)

• Empezar por las necesidades específicas de las personas.

• Ayudar a resolver los problemas.

• Tener en cuenta todos los factores para la resolución de los problemas.

• Afrontar estos problemas, a ser posible, en el contexto en que se presentan.

• Crear situaciones en donde los adultos asuman la responsabilidad directa de su educación.

• Desarrollar una función crítica de la educación

Principios fundamentales en la educación de adultos (Knowles, 1998)

El principio de autonomía: -sintetiza la centralidad que tiene el concepto de “sí mismo”.

El principio de interactividad: -confirma la utilización de la experiencia y la historia de vida como recurso de aprendizaje.

El principio

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