La Familia

LA FAMILIA.

Hablaremos de la familia como un sistema que tiene una función psicosocial, esta es la que se encarga de proteger a cada uno de sus miembros, y una función social,

en esta función se trasmite las culturas, creencias y se favorece la adaptación de estas.

En la familia se dan pautas que regulan el funcionamiento y el equilibrio de esta. Pero también existen factores internos y externos que provocan un estado de tensión por que se creer que se pierde el equilibrio, por lo que algunas familias pueden oponer resistencia al cambio por miedo a perder ese equilibrio.

Esta situación puede provocar un síntoma en alguno de sus miembros, con este síntoma el proceso de cambio o evolución se ve pausado por algún tiempo de esta forma se trata de mantener el equilibrio.

Para que la familia pueda avanzar hacia el progreso tiene que aprender a adaptase a circunstancias nuevas, pero sin dejar de mantener un marco de referencia para sus miembros.

Pero como todo sistema, la familia como tal, también esta formada por subsistemas (pareja, hijos…) dentro de estos sistemas y subsistemas existen unos limites, mas o menos rígidos o flexibles que protegen el funcionamiento y el mantenimiento de la estructura.

Para que una familia se desarrolle de una manera funcional se tiene que dar la protección y la autonomía de cada uno de sus miembros, también se tiene que dar un grado correcto de permeabilidad en los limites. Ya que tanto un extremo como el otro pueden generar dificultades. Por ejemplo familias desunidas con límites muy rígidos y poco permeables o familias aglutinadas con límites copo claros o difusos.

Pero también es cierto que el síntoma sirve para alertar a las familias y prepararse al cambio de una forma más gradualmente. Todo esto puede depender de sus ideologías, creencias y contexto histórico de la familia.

Ahora se tratara de explicar un poco acerca de las relaciones y expectativas que la familia y la escuela tienen una de la otra.

La escuela y la familia son dos sistemas que tradicionalmente han estado bastante alejados, aun a pesar que tienen frecuentes relaciones. Estas dificultades provocan que no se llegue de una forma correcta a los fines u objetivos que se tienen en común.

En algunas ocasiones la escuela no ha tomado suficientemente la función educativa que se genera dentro de la familia.

Por otra parte la familia puede adoptar diferentes actitudes dependiendo de las expectativas que se hayan tenido y por sus experiencias previas. Por el momento evolutivo en que se encuentra, por su funcionamiento y estructura. Por ejemplo existen familias que no han tenido experiencias previas con la escuela y que cuando el hijo inicia su escolaridad depositan el papel de la educación en la escuela y toman una actitud de sumisión y total dependencia, asumiendo una ignorancia total en los temas educativos. Otras en cambio, viven la escuela como una situación fundamentalmente represora y normativa, esperando que a través de ella su hijo adquiera unos hábitos y se adapten a las normas sociales y valores que ellos mismos no les han sabido transmitir. Otras familias son conscientes de la corresponsabilidad en la tarea educativa y solicitan la coordinación y colaboración con los maestros para ayudar a su hijo.

Todas estas actitudes influyen en como el niño se va a sentir con respecta a la escuela, en la forma de relacionarse dentro de ella.

Para que el niño se sienta seguro y se adapte de una forma correcta en la escuela y le de un significado a las labores es necesario que la familia tenga y le transmita una cierta confianza en la escuela.

Es importante señalar que las dificultades que se tengan entre la escuela y la familia interferirán en la adaptación del niño, por lo que es importante que el trabajo del psicopedagogo sea poder ayudar a los implicados que en este caso serian la escuela y los papás del niño a desculpabilizarse, es también importante realizar una labor de acercamiento de los dos sistemas (escuela/familia).

Todas las familias pasan por diversos problemas; pero algunas los solucionan tras una etapa de crisis, otras piden ayuda y otras en cambio presentan síntomas en uno de sus miembros para mantener el equilibrio de una manera rígida.

Es importante que se tenga confianza en las posibilidades de la familia para poder ayudarla; a veces, con una pequeña ayuda del exterior la familia ve más claramente su funcionamiento, relativiza determinados problemas y tiene más capacidad para avanzar o cambiar.

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