La Genesis Del Super Yo Tiranio

La génesis del superyó tiránico

‘’el superyó tiránico es el heredero de un trauma primitivo’’ este superyó el cual es desenfrenado, cruel con las prohibiciones impuestas hacia el niño, vigilante, también como el superyó primordial, los dos se ven detenidos frente a una prohibición, no se trata del complejo de Edipo o simplemente una crisis de la niñez tiene que ver con cualquier trauma primitivo padecido por el niño en su independencia de edad, los fantasmas en el niño lo hacen escuchar las voces de los adultos como la imposición de algo que es malo para él, por esto el niño siente la descarga de toda la ley en el, sin tener algún tipo de salida o de ayuda para no sentirse tan aturdido. Aunque el niño no entiende muy bien el motivo por el cual sobre el recae cualquier tipo de prohibición o más bien porque tiene que ser sobre él, empieza a ser simbólica la prohibición, a través de una palabra o un gesto de manera de que el infante entienda de inmediato de eso que está haciendo no se puede hacer, lacan recurrió al concepto de forclusion, explicaba que el rechazo de los mandatos de la palabra resurge bajo la forma de un boquete abierto en lo imaginario. Se puede reconocer entonces que el superyó tiránico tiene una génesis determinada visible a la del superyó primordial formado en la terminación del complejo de Edipo, con la identificación que siente con su padre, y la formación de la conciencia en el niño para asumir la prohibición del incesto frente a su madre, el superyó tiránico en cambio se origina de manera inoportuna del desgarramiento traumático padecido por el yo en el momento del rechazo de una palabra simbólica, así es como en el superyó primordial los factores traumáticos no son suficientes para que el yo rompa las reglas como lo es en el caso del superyó tiránico el desgarramiento traumático y el rechazo lo originan. Freud propuso una frase que decía ‘’ el superyó es el heredero del complejo de Edipo, mientras que el superyó tiránico es el heredero de un trauma primitivo’’. Entonces el superyó tiránico no es más que un trauma representado por el yo bajo la forma de una voz tormentosa que condena la prohibición desmesurada, ordena la exhortación desmedida y sofoca.

La culpabilidad es una enfermedad imaginaria del yo que reclama el remedio imaginario del auto castigo infligido por el superyó, la culpabilidad de la cual la conciencia no contiene huella alguna, se expresa de modo indirecto en afecciones psicopatológicas como neurosis obsesiva, melancolía, duelo no elaborado, delirio de autoacusación, a través de diversas formaciones psíquicas como fantasmas, situaciones dolorosas o incluso comportamientos de fracaso, la culpabilidad que está originada de esta reacción inesperada no se le aparee al paciente en modo alguno, sencillamente que si estado se complico en forma inexplicable, se reconoce enfermo pero no se considera culpable, estas personas tienden a sentirse inferiores a las demás por el hecho de que lo que creen que hacen bien y sale mal se llevan el pensamiento que todo lo que hagan será malo y es culpa de ellos. El yo recae enfermo a fin de aliviar la dominación de sentirse culpable, Freud encontró una fórmula que aunque no tenía mucha lógica en su momento ayudo a entender porque el autocastigo ayudaba a que los

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